De los hijos de Charlène a los looks corporativos: las mejores fotos en la inauguración de los Juegos Olímpicos

Noche histórica en París, con la gala inaugural de los Juegos Olímpicos y presencia de prácticamente todas las casas reales europeas. Una de ellas, la de Mónaco, que daba la sorpresa en el último momento con la presencia de los dos hijos de Charlène y Alberto en las gradas. Y todas o casi todas con algo en común: los looks corporativos de los royals, que repasamos en las mejores fotos de la inauguración de la cita.

La recepción que se celebraba un par de horas antes en el Palacio del Elíseo ya nos dejaba ver esos detalles tan corporativos en la ropa de los royals, incluso patriótico, si lo queremos decir así. De la corbata naranja de Guillermo Alejandro al conjunto blanco y rojo de Mary de Dinamarca, pasando por la combinación de los príncipes de Mónaco, formando entre los dos la bandera del país: ninguno dejaba su elección al zar.

Sí veíamos una excepción, que no era otra que la reina Letizia, a la que veíamos ya en las gradas colocadas a orillas del Sena, donde tuvo lugar el desfile de equipos olímpicos. A diferencia, por ejemplo, de Máxima, que sí lució el uniforme de la delegación neerlandesa, la esposa de Felipe VI lució uno de sus vestidos más alabados.

Claro que ninguno de ellos pudo lucirse especialmente durante la inauguración en sí. Porque la lluvia no dio tregua y todos los royals tuvieron que colocarse sus chubasqueros para protegerse del agua y no acabar empapados. Así, desde María Teresa de Luxemburgo a la propia doña Letizia, todos ellos nos regalaron curiosas imágenes con sus impermeables, muy alejadas de las etiquetas y glamour a los que estamos acostumbrados.

Eso sí, todos se lo tomaron con mucho humor. Vimos a la gran duquesa de Luxemburgo riéndose a carcajada limpia y a Máxima de Holanda incluso bailando cuando llegó el momento de que desfilara el equipo olímpico de Países Bajos.

Tampoco Charlène y Alberto de Mónaco dejaron que sus hijos se mojaran y vimos a Jacques y Gabriella bien pertrechados para los momentos más intensos de agua, que no fueron pocos.

Quien también ha tenido que ponerse el chubasquero ha sido la reina Letizia, ocultando así ese diseño tan alabado de Carolina Herrera que había elegido para la cita. No se puede decir que la lluvia le haya pillado de sorpresa, puesto que iba bien preparada con un paraguas, pero por cuestiones de organización no ha podido utilizarlo.

Y es que, el modelo de paraguas, clásico en color negro, hubiera dificultado la visibilidad de sus compañeros de tribuna, por lo que no tuvo más remedio que colgarlo en la barandilla que había cerca y protegerse con ese impermeable, no precisamente muy estético.

Pero no vivimos solo de royals y fueron muchas las celebrities que se dejaron ver cerca de la torre Eiffel, como John Legend junto a su familia, Ariana Grande o Natalia Vodianova junto a su marido.

Una de las gurús de la moda, la editora Anna Wintour, tampoco se perdía esta histórica cita, haciéndolo acompañada de su amigo, el director de cine Baz Luhrmann. Como el resto, tenían que protegerse de la lluvia con paraguas, aunque ni siquiera eso hacía que renunciara a sus míticas gafas de sol.

Diego Osorio, ex de Ana Boyer y Eugenia Silvia, era sin duda, el invitado inesperado a esta alfombra roja de famosos internacionales. Su actual pareja, la esquiadora Lindsey Vonn, ha acudido con un traje y un original bolso en forma de Teckel de la firma Thom Browne.

Pau Gasol, con un traje otoñal en gris y camisa caqui, también posaba emocionado en este improvisado photocall. Y más nombres relacionados con el mundo del deporte: tampoco se perdía la cita Serena Williams, otra veterana de la cita olímpica.

Y claro, no podemos terminar este repaso a las mejores imágenes de la inauguración de los Juegos Olímpicos sin hablar de las actuaciones musicales, muchas y muy variadas. La más aclamada, la de Lady Gaga, que era una de las primeras en participar, con un espectáculo de burlesque. Y la más esperada, la de Celine Dion, que mantenía la sorpresa hasta el último momento.

Mucho se había hablado de la posibilidad de que la canadiense reapareciera en esta inauguración tras mucho tiempo alejada de los escenarios, incluso se había especulado con su altísimo caché. Y después de cuatro horas de desfiles, actuaciones y simbología de la historia de Francia y de los Juegos Olímpicos, Celine Dion era la encargada de cerrar la ceremonia inaugural, en lo alto de la torre Eiffel y versionando un éxito de Edith Piaf.

Un broche de oro para una noche histórica en la que no han faltado royals,celebrities, grandes estilismos y muchas anécdotas protagonizadas por algunas de las figuras más importantes de la historia del deporte.