La infanta Cristina con una blusa estampada de El Corte Inglés e Irene Urdangarin con sandalias de Massimo Dutti, para ir al taller de Caprile

Una vez más, la infanta Cristina llamó a las puertas del taller de Lorenzo Caprile en Madrid. Amigo de la hermana del rey Felipe, es además el encargado de vestirla en las grandes ocasiones, así lo hizo para su boda con Iñaki Urdangarin aquel 4 de octubre de 1997 y así lo hace cada vez que la hija de los Reyes eméritos tiene que cumplir con el rol de invitada perfecta. ¿La última y más reciente ocasión? La boda de Victoria López-Quesada y Enrique Moreno de la Cova celebrada el pasado sábado 31 de agosto en la capital.

Ataviada con una sencilla camisa blanca y una original falda con estampado acuarela, la infanta Cristina se convirtió en una de las más elegantes del enlace. Ahora estas imágenes demuestran que días antes, en concreto, el 29 de agosto, ella junto a su hija, Irene Urdangarin, acudió al atelier que el modisto tiene en la calle Claudio Coello, 20, para ultimar los detalles de su acertado estilismo de invitada. El mismo lugar de donde salió el vestido de la novia, la hija de Cristina de Borbón-Dos Sicilias y Pedro López-Quesada.

Para un día de compras en la capital a finales del mes de agosto, madre e hija apostaron por looks de verano informales en el que reinan las prendas de marcas españolas. Cristina, con una blusa estampada y unos pantalones blancos, y a su lado, su única hija, Irene Urdangarin, con un sencillo vestido negro, volvieron a demostrar su apoyo a las firmas 'made in Spain' en sus nuevos atuendos. Una estampa que nos corrobora lo que bien que se llevan madre e hija, sonrientes y cómplices.

La hermana del rey Felipe estrenó una camisa de El Corte Inglés, un modelo de la firma 'Woman' que está a la venta en la página web por 50 euros. Confeccionada con un tejido de viscosa muy ligero, presenta un motivo geométrico en tonos marrones y blancos. En cuanto al patrón, escote en pico, cuello con solapas, manga al codo y silueta amplia. Cediendo todo el protagonismo a esta prenda, sumó al outfit unos pantalones anchos de lino en color blanco y un cinturón de rafia marrón.

En el terreno de los accesorios, la infanta Cristina eligió unas zapatillas de deporte de Geox valoradas en 120 euros, de color beige claro, con corte de piel elástica y suela dentada a contraste; un bolso de hombro en gris plomo de Longchamp, el superventas Le Pliage, y unas gafas de sol.

Irene Urdangarin, por su parte, rescató del armario un vestido negro. Se trata de un diseño con patrón escalonado, escote en pico y tirantes finos que es un básico, temporada tras temporada, en los catálogos de muchas marcas asequibles. Fabricado con un tejido de popelín, es un modelo perfecto para un día de compras en pleno verano en Madrid.

Como calzado, la hija de la infanta Cristina se decantó por unas sandalias planas de Massimo Dutti que, aunque actualmente no están a la venta, en su momento costaron 80 euros. Revestidas en piel de color negro con pespuntes a contraste, en blanco, son unas sandalias tipo 'flip-flop' con una tira en la pala decorada con una hebilla. Cómodas y todoterreno.

Un maxicinturón trenzado en tono marrón y un collar largo con cadena de eslabones en acabado oro, pusieron el broche de oro al look informal de la sobrina del rey Felipe.