Juan Carlos I evita su esperada reaparición en Sanxenxo en plena polémica por las fotos íntimas publicadas con Bárbara Rey

Juan Carlos I, ha ocupado los titulares de todos los periódicos estos últimos días. La publicación de unas fotos íntimas con Bárabara Rey en una revista holandesa por parte del hijo de la actriz ha desatado la polémica. Este viernes se esperaba ver al rey emérito haciendo lo que más le gusta hacer: navegar por Sanxenxo. Sin embargo, el monarca ha decidido cancelar su esperada aparición en el último momento y ausentarse del evento náutico que suele marcar sus visitas a Galicia.

El motivo de no acudir ha sido la meteorología. Este mediodía se ha levantado un viento que ha provocado que don Juan Carlos no posara ante la prensa que lo esperaba. Era en la localidad gallega, donde tenía previsto participar en una nueva serie de regatas como hace habitualmente. Pero, pese a no contar con el padre de Felipe VI entre su tripulación, el Bribón ha zarpado para hacer presencia en la competición que lleva su nombre.

Aunque uno de los motivos del viaje fueran las regatas, Don Juan Carlos aterrizó en el aeropuerto de Vigo el pasado lunes por la tarde. En la pista saludó de forma afectuosa a Pedro Campos, su amigo íntimo y anfitrión durante sus estancias en Galicia. Como en ocasiones anteriores, se trasladó directamente a la casa de Campos en Sanxenxo, que se ha convertido en su residencia durante estos viajes a España. A pesar de la polémica, el monarca se muestra dispuesto a disfrutar de estos días rodeado de amigos, de quienes siempre lo han acompañado en momentos clave.

Esta visita marca la decimocuarta ocasión en que el rey emérito regresa a España desde que se estableció en los Emiratos Árabes, siendo la séptima vez en lo que va de año. Su presencia en Galicia ya no sorprende, y el padre de Felipe VI parece haber encontrado en las regatas un refugio donde puede relajarse y disfrutar de una de sus pasiones: la navegación. Aunque su estancia se ve envuelta en el revuelo mediático, su agenda sigue centrada en las competiciones náuticas y los encuentros con amigos de toda la vida.

Entre los allegados que acompañarán durante esta estancia se encuentra Philip Adkins, exmarido de Corinna Larsen, además de su médico personal, Manuel Sánchez. Estos encuentros son habituales en cada una de sus visitas. Este viernes, por ejemplo, ha organizado una cena con amigos que se desplazarán hasta la localidad gallega con los que se siente protegido y arropado. Pero no solo se rodea de conocidos durante estos viajes. Siempre que don Juan Carlos pisa España, cuenta con la compañía de la infanta Elena, que además no pierde la oportunidad de disfrutar de una buena regata.

El ruido mediático que rodea al rey emérito no es nuevo, y sus allegados no han ocultado su malestar ante la publicación de las fotografías con Bárbara Rey. Algunas fuentes cercanas a Juan Carlos expresaron su indignación hace unos días a Vanitatis. “Cada vez que viene a España pasa algo”, señalaron añadiendo que consideran la publicación de esas imágenes como “un atropello” y “cosas antiguas que ya se sabían”. Además, han cuestionado la legalidad de la publicación, sugiriendo que las imágenes fueron tomadas en una propiedad privada.

En cuanto a su vida en Galicia, Juan Carlos se mantiene fiel a su rutina: rara vez sale del chalet donde se aloja salvo para entrenar o competir. Aunque su pasión por la gastronomía local es bien conocida. A pesar del alboroto mediático y las controversias, el rey emérito parece decidido a disfrutar de estos días en su refugio gallego, rodeado de los suyos, centrado en las regatas que tanto le apasionan y evitando a la prensa todo lo que pueda.