Primera imagen de don Juan Carlos tras conocerse sus delicados comentarios sobre la reina Sofía: arropado por su hija y sus amigos
Lejos de evitar a la prensa, el padre de Felipe VI decidió acudir a un restaurante para comer junto a su hija Elena, su amigo Pedro Campos y la esposa de éste
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Ajeno a la polémica. Así parece estar viviendo el rey Juan Carlos esta semana en la que unos delicados audios en los que conversa con Bárbara Rey han visto la luz.
Cada día que pasa surgen nuevas informaciones mientras el emérito continúa en Sanxenxo, disfrutando de unos días de regatas junto a familiares y amigos. Quizás, una de las informaciones más delicadas ha sido la surgida el pasado viernes en unos nuevos audios del padre de Felipe VI y Bárbara Rey en los que el monarca habla con su amante sobre la que entonces era su esposa, la reina Sofía y que ha sacado a la luz 'OkDiario'.
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Si creíamos que ya nada podía sorprendernos, en estos audios resulta muy chocante la indiferencia con la que don Juan Carlos habla sobre la madre de sus hijos y Reina de España. Mientras que en aquellos años, el matrimonio posaba ante las cámaras unido y aparentemente feliz y sólido, el monarca confesaba a la vedette en privado que él y su mujer no estaban juntos "desde que nació Felipe". Añade en la conversación que Sofía le venía bien porque ejercía a la perfección su papel de Reina y porque "aguanta y no se va con otro".
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Estas palabras vuelven a mostrar una cara oculta y poco ejemplar del emérito que no le deja en muy buen lugar. Sorprende la frialdad con la que habla de su esposa y sus palabras vuelve a agrandar la mancha que hace tiempo que recae sobre su imagen.
Sin embargo, don Juan Carlos parece haberse puesto un chubasquero en Sanxenxo por el que no solo le resbala la lluvia de Galicia sino todo lo que está aconteciendo en torno a su figura. En un día nublado, con llovizna y poco adecuado para la navegación como fue el sábado 5 de octubre, el abuelo de la princesa heredera decidió hacer oídos sordos a la controversia sobre los audios y, lejos de esconderse, quiso disfrutar de una comida en familia, a pesar de que sabía que la prensa estaría pendiente de sus pasos.
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Al llegar al restaurante, lo hizo arropado por sus más allegados: su hija, la infanta Elena, y sus amigos, Pedro Campos y la esposa de éste, el matrimonio que siempre aloja en su casa a don Juan Carlos cuando viaja a Sanxenxo.
La primera en bajar del vehículo, fue la infanta Elena. Lo cierto es que la cuñada de la reina Letizia no quiso recrearse mucho y rápidamente se introdujo en el local mientras, con la cabeza algo baja, sonreía tímidamente a los reporteros y fotógrafos. Parecía lógico que no tuviera ganas de hablar, No fue igual la actitud de su padre. Don Juan Carlos, ayudado por Pedro Campos para bajarse del coche y para caminar hasta la puerta del restaurante, se paró antes de entrar para saludar a la prensa y para comentar brevemente cómo estaba viviendo, hasta ahora, las regatas en las que participa. Sonriente y aparentemente tranquilo, el Rey no comentó nada sobre los polémicos audios.
Ajeno a la polémica. Así parece estar viviendo el rey Juan Carlos esta semana en la que unos delicados audios en los que conversa con Bárbara Rey han visto la luz.