La calma tensa de Felipe VI y Letizia: los Reyes en Paiporta en medio de la indignación ciudadana

La visita de los Reyes Felipe VI y Letizia a zonas afectadas por la DANA ha sido una de las noticias del fin de semana. El monarca y su esposa se han desplazado el domingo 3 de noviembre hasta Valencia, donde han podido hablar con diferentes cuerpos de seguridad que les han explicado el trabajo que están realizando.

El momento más tenso ha llegado cuando los padres de la princesa Leonor y la infanta Sofía han querido acercarse a los ciudadanos de Paiporta. Una avalancha de personas que llevan días limpiando las calles con los ánimos completamente abatidos, se han agolpado alrededor de Felipe VI y Mazón.

El Rey se ha bajado del vehículo en el que viajaba para conversar cara a cara con los vecinos. La tensión en ese momento ha ido en aumento. Los ánimos estaban muy alterados y muchos ciudadanos afectados por el temporal y que se han sentido abandonados por las autoridades, han comenzado a gritar al monarca y a Mazón. Gritos de “Mazón dimisión”, “Pedro Sánchez, asesino” e insultos se han escuchado constantemente.

El Rey ha tratado de calmar los ánimos y de escuchar a todos los que se acercaban a él para transmitirle su rabia y su impotencia.

Se han vivido momentos de total descontrol en los que la policía montada ha tenido que intervenir, temiendo por la seguridad del Rey y de los políticos presentes.

La reina Letizia no ha estado junto a su esposo en estos momentos de máxima tensión en los que, incluso, se les ha lanzado barro. Una persona del equipo de seguridad de Felipe VI ha querido protegerlo con un paraguas, pero el hijo de don Juan Carlos lo ha apartado y se ha negado a ser tapado con él.

Por su parte, la reina Letizia era incapaz de llegar hasta donde se encontraba su esposo. En una Paiporta donde cientos de ciudadanos descargaban la ira acumulada durante toda la semana, Pedro Sánchez se ha resguardado en un vehículo mientras la Reina trataba de escuchar a los que se acercaban a ella para expresarle el drama que estaban viviendo. El nerviosismo se ha apoderado de algunas personas, que le han lanzado barro. Letizia, con la cara manchada, ha continuado con temple la conversación con varios ciudadanos, visiblemente consternada por todo lo que estaba ocurriendo.

Un cordón policial ha rodeado al monarca mientras cientos de personas le pedían explicaciones ante la falta de recursos y ayuda y le expresaban su indignación.

A pesar de la dura situación, Felipe VI ha tratado de mantener la calma a pesar de que su equipo ha temido por su seguridad en varias ocasiones. El Rey se ha mantenido firme y sin querer marcharse a pesar de que en varias ocasiones han intentado que se montara en el vehículo oficial para abandonar el lugar. Algunos de los ciudadanos han llorado con él y se han derrumbado ante su presencia. Con otros ha conversado y ha tratado de dar explicación a muchas de las preguntas que le hacían.

Ante las circunstancias, en un momento se ha planteado suspender la visita de los Reyes, sin embargo, Felipe VI y Letizia se han resistido a abandonar la zona y han querido dirigrse a Chiva a pesar de los incidentes vividos en Paiporta.