Mary de Dinamarca, en casa tras su comentado viaje a Australia: junto a Federico y con un broche de diamantes heredado

A pesar de que la casa real danesa aseguró que el viaje de la reina Mary a Australia estaba programado y no se debía a ningún motivo en particular, su visita generó mucha especulación y encendió las alarmas sobre el delicado estado de salud de su padre, John Donaldson. Federico, quien viajó a Australia junto a su esposa y sus tres hijos pequeños, Isabella, Vincent y Josephine, regresó a Dinamarca a principios de la pasada semana y el jueves fue la reina la que puso rumbo al país escandinavo. Este lunes, ambos han protagonizado un acto conjunto.

Federico y Mary han asistido a un servicio religioso con motivo del aniversario de la invasión de Ucrania. Faltaban pocos minutos para las 16:00 horas cuando los reyes llegaban a la iglesia de Holmen, un templo luterano situado en el centro de Copenhague. Vestidos ambos en colores oscuros, casi de luto, el monarca y su esposa han recordado a las víctimas de la guerra de Rusia contra Ucrania.

Para la ocasión, Mary ha optado por un vestido negro de cuello alto que ha combinado con un elegante abrigo gris con botonadura central. Lo ha combinado con un tocado tipo diadema de la firma Jane Taylor, unos salones de ante de Gianvito Rossi y una cartera de mano de Quidam.

La reina le ha añadido una valiosa joya a nivel sentimental a su estilismo. Hablamos de un broche de diamantes en forma floral que le regaló su difunto suegro, el príncipe Henrik. Perteneció a su madre, la condesa Renée-Yvonne de Laborde de Monpezat, y el marido de Margarita II lo heredó en 2001. En vez de entregárselo a su mujer, decidió guardarlo para hacer un regalo especial.

Y así sucedió en 2004, cuando, con motivo de la boda de su hijo Federico con Mary Donaldson, decidió regalárselo a su nueva nuera, quien lo ha lucido en numerosas ocasiones, entre ellas el funeral del propio Henrik, en febrero de 2018.

"Es importante tomar pausas, porque probablemente tendremos aún más trabajo. Mary y yo tenemos áreas de interés que, cada vez más, requerirán nuestra presencia en foros muy diversos, tanto en el país como en el extranjero", aseguró Federico X en uno de los capítulos del 'Kongeord' (Palabra de rey), las memorias en las que el monarca danés enumeraba algunas de las directrices que iba a seguir su reinado.

Antes de ascender al trono, el hijo de Margarita de Dinamarca tenía claro que iba a compaginar sus deberes reales con los períodos vacaciones. Y así ha hecho desde que en enero de 2024 su madre abdicase en él. Como mencionábamos, hace un par de semanas el matrimonio cruzó el charco sin la compañía de su primogénito, Christian de Dinamarca, que quedó al frente de la Corona durante su ausencia.

El lunes pasado Federico X regresó a Dinamarca para cumplir con la agenda oficial, y el jueves lo hacía Mary, quien quiso volver inmediatamente al trabajo, y al día siguiente se reunió con Simon Kj ær Hansen, líder del Centro Queen Mary. En dicha charla, como apuntan, "se discutió el plan de negocios del centro para los próximos cinco años". Cabe señalar que fue lanzado para "conmemorar el 50 cumpleaños" de la reina danesa y desde entonces "ha seguido de cerca la labor del centro".