Doña Sofía y las piezas de su armario y de su joyero que ya ha donado en vida a sus hijas, sus nietas y la reina Letizia

Hay quienes esperan a su muerte para dejar todo aquello que les pertenece a sus seres queridos, mientras otros intentan hacerlo en vida. Este último es el caso de doña Sofía, quien se encuentra repartiendo su vestuario y sus joyas entre las mujeres de su familia. Tal como cuenta la revista 'Hola', la intención de la Reina emérita es repartirlo todo entre sus hijas, las infantas Elena y Cristina, sus cuatro nietas, Victoria de Marichalar, Irene Urdangarin, la princesa Leonor y la infanta Sofía, así como su nuera, la reina Letizia.

Son, en total, siete las mujeres que recibirán -o ya han recibido- piezas del armario de doña Sofía. La emérita cuenta con un joyero de infarto, lleno de joyas valiosísimas. Cuando don Juan Carlos abdicó en 2014 y don Felipe se convirtió en Rey, las alhajas del lote de pasar pasaron -de ahí su nombre- a doña Letizia, quien como reina consorte es la actual titular. En este lote se encuentra la tiara de la Flor de Lis, varios broches, las pulseras gemelas, unos pendientes, un collar de chatones y otro de perlas.

Además de estas joyas, doña Sofía tiene las que heredó de su familia, como es el caso de la tiara Prusiana. Al haberla lucido ella en su boda con don Juan Carlos, y después doña Letizia en su enlace con don Felipe, está previsto que esta joya se quede en manos de la Corona, para que en su momento pueda llevarla la princesa Leonor, quien también dispondrá de otras tiaras como la Cartier o la rusa.

Estas dos últimas piezas fueron de mujeres de la familia real española, pero no están en el lote de pasar. Fue don Juan Carlos quien las compró como regalo para su esposa, con la intención de que se queden en el joyero de los Borbón, y así se hará. Sin embargo, otras muchas piezas que tiene doña Sofía, y que no cuentan con tanto valor histórico, serán para sus hijas y sus nietas Victoria e Irene.

Según varios expertos en joyas de la familia real española, el collar con un rubí que doña Sofía heredó de su madre, la reina Federica, será para una de las infantas. Cabe recordar el gran amor que sentía la reina emérita por su progenitora, de ahí que quiera que esa joya se la queden sus hijas. Los rumores apuntan a que lo mismo sucederá con el conjunto de rubíes que el armador griego Niarchos le regaló por su boda, y que es de su entera propiedad. La parure incluye tiara, collar y pendientes.

Doña Sofía, poco a poco, está repartiendo todo el arsenal que tiene, e Irene Urdangarin ha sido de las primeras en demostrarlo. La joven causó sensación el pasado mes de septiembre en la boda de Teodora de Grecia y Matthew Kumar con un vestido que perteneció a su madre y unos pendientes propiedad de su abuela materna de oro amarillo con pequeños zafiros en cabujón, acompañados de piedra de luna también tallados en la misma forma.

Como cuenta a Vanitatis Juan Rivero, experto en las joyas de la familia real española, doña Sofía posee el collar a juego, pero su nieta solo llevó los pendientes. Se desconoce la procedencia de este conjunto de joyas, lo que sí nos confirma el experto es que la madre de Felipe VI lo lució en 1995 en una recepción en el Palacio Real de Madrid con motivo de la celebración de la inclusión de España a la Unión Europea, entre otras ocasiones.

Los pendientes se encuentran desde hace un tiempo en el joyero de Irene, además de otras piezas. También hay constancia de que Victoria de Marichalar ha recibido de su abuela varias piezas, pero de momento no ha lucido ninguna de ellas en público.

Por su parte, las infantas Elena y Cristina prefieren lucir sus propias joyas en los grandes eventos, pero son plenas conocedoras de que una gran parte de las alhajas de su madre quedarán en sus manos, y así lo desean. Entienden, por supuesto, que muchas de ellas pasen a doña Letizia como reina titular, para después ser lucidas por Leonor y Sofía, pero ellas no rechazan su parte del pastel.

Doña Sofía no solo ha dado ya a sus hijas algunos collares o pendientes, también bolsos y otros complementos que ya no usa. Por ejemplo, en la reciente boda de Nicolás de Grecia con Chrysi Verdinogiannis, la infanta Cristina lució un bolso de Chanel en color beis que en su día fue propiedad de su madre.

Alta Costura para su nuera

La emérita cuenta, además, con un vestidor lleno de diseños de Alta Costura, al que tienen acceso todas las mujeres de la familia. A Sofía le gusta compartir y ver que sus prendas tienen una segunda vida. En este caso, la que más ha reutilizado sus vestidos ha sido doña Letizia, una muestra de que la relación suegra y nuera es, cuanto menos, cordial.

Hace poco descubríamos que un vestido blanco que la Reina lució en la entrega de los Premios Nacionales de Cultura 2022-2023 fue una remodelación de un Valentino que hizo de un vestido original de doña Sofía. Doña Letizia se decantó por este diseño de manga corta y largo midi, realizado en crepe blanco, con bordado de flores tanto en la parte superior como en el bajo. Si hacemos zoom vemos que las aplicaciones de guipur están decoradas con pequeños abalorios plateados, lo que lo convierte en una pieza llena de detalles.

Para encontrar una foto de doña Sofía luciendo dicho vestido tenemos que viajar hasta 1984, cuatro décadas atrás. Por aquel entonces, la emérita confiaba para sus eventos de gala en Valentino, y para la cena que don Juan Carlos y ella ofrecieron en honor al entonces presidente de la República Argentina, Raúl Alfonsín, quien realizó una visita de Estado a España acompañado por su esposa, María Lorenza Barreneche, estrenó este modelo.

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N.Tiburcio

Son muchas ya los ocasiones en las que doña Sofía ha cedido ropa a doña Letizia, quien está dispuesta a reutilizarla y darle una segunda vida. La emérita tiene la idea de que también Leonor pueda lucir sus diseños de grandes firmas en actos importantes, todo un orgullo para ella.