Las hermanas de Mary de Dinamarca, la sorpresa más inadvertida de la fiesta del 18º cumpleaños de la princesa Isabella

A pesar de que hasta el próximo día 21 de abril no cumplirá oficialmente la mayoría de edad, la princesa Isabella de Dinamarca celebraba ayer mismo su 18º cumpleaños por todo lo alto con una fiesta, eso sí; de carácter institucional. A última hora de la tarde, la hija de Sus Majestades los Reyes, Federico y Mary, presidía un concierto de música clásica en su honor, celebrado en el Old Stage Teatro Real de Copenhague.

Para su “puesta de largo”, optó por un diseño azul ‘navy’ con corpiño de escote recto y tirantes anchos y falda de volumen, confeccionada en tul lleno de brillos, el cual acompañó con unos pendientes de diamantes de su madre. Por supuesto, un look motivo de titulares, al igual que su lista de invitados. Más allá, como es obvio, de sus progenitores y un total de 1000 jóvenes de entre 17 y 24 años de todas las partes del país, elegidos a través de un sorteo oficial, la joven estuvo acompañada, entre otros muchos, por su abuela, la reina Margarita, y sus hermanos, los mellizos Josephine y Vicent, y también Christian, quien abandonó por un día su formación militar en el cuartel de Antvorskov.

Sin embargo, esta convocatoria altamente royal, la cual incluyó también la presencia de Ana María de Grecia, eclipsó ante los ojos de la prensa internacional la que podemos considerar la gran sorpresa de la noche y nada tiene que ver con los rumores del regalo de una posible tiara por parte de los miembros de la Corona con motivo de su 18º cumpleaños.

Nos referimos a la participación de Jane Stephens y Patricia Bailey, hermanas mayores de Mary de Dinamarca, en el evento. Sí, tal y como leen, las tías de la princesa Isabella se desplazaron desde Australia, país en el que residen y del que es originaria la reina, para estar con su sobrina en este día tan especial. No obstante, únicamente los medios de comunicación locales destacaron este gesto. Es más, en las agencias de nuestro país tan solo hemos podido conseguir una fotografía de las Donaldson.

Para la ocasión, a la que llegaron tan solo unos minutos antes que los miembros de la familia real, según muestra la retransmisión en directo de la televisión pública nórdica, Jane lució un diseño negro largo de patrón recto, escote redondo y manga sisa, confeccionado en un tejido negro con estampación romboidal en velvet, mientras que Patricia optó por un vestido verde esmeralda, protagonizado por su juego de fruncidos, con manga francesa semitransparente, cinturilla marcada y falda fluida con ligera apertura lateral.

Su inmenso amor hacia la princesa Isabella puede con todo, incluso con la férrea defensa de su intimidad. Un discurso mantenido por el grueso de la familia de Mary de Dinamarca desde que saliese a la luz su romance con el ahora rey Federico X. Siempre se han mantenido al margen de hitos y polémicas apareciendo únicamente ante las cámaras en los momentos más importantes, como la boda de Sus Majestades en 2004, donde actuaron como damas de honor, o la proclamación de ambos el pasado 2024.

Actualmente, Jane Alison Stephens trabaja en el sector farmacéutico tras haber realizado un doctorado en la Facultad de Medicina de la Universidad de Tasmania. Además, es madre de tres hijos y empresaria, cuenta con una tienda de zumos naturales, llamada ‘Boost Juice’, en el centro comercial Eastland de la localidad de Hobart. Por otro lado, Patricia Anne Bailey, también madre de tres hijos, es enfermera en el Hospital Royal Hobart e instructora de fitness. Ambas residen en Australia.

Por lo tanto, las hermanas de Su Majestad se embarcaron en un vuelo de casi 27 horas de duración solo para arropar a la princesa Isabella en su día más especial. Aun así, su gesto quedó eclipsado por los looks de lujo y las joyas históricas lucidas por las royals en la velada. Hoy, ha sido el turno del 85º cumpleaños de la reina Margarita. Objetivo cumplido: su deseo de obtener un perfil bajo se ha hecho realidad; casi por primera vez.