La afición de la reina Sofía que comparte con hija y nietas: fotógrafa de la Familia Real

En los jardines del Palacio Real, al sol y entre risas, la princesa Leonor enfoca a su hermana con una cámara. La infanta Sofía ríe, se toca el pelo y echa el cuerpo hacia delante, confiada y divertida.

Terminan las hermanas entre carcajadas, y el juego entre ambas queda grabado por una tercera persona. Las imágenes han aparecido este domingo en prensa cortesía de la futura reina de España.

La princesa Leonor ha abierto parte del álbum personal que comparte con la Infanta y de pronto todos hemos sido testigos de momentos íntimos de la Familia Real. Y hemos sabido que la Princesa juega con el objetivo, algo que ha hecho toda la vida su abuela, la reina Sofía, aunque sin mostrar los resultado al público en general. Aunque no le hubiera importado.

Como la abuela

No había momento que se le resistiera y en cada celebración, allí estaba ella, cámara en mano. La madre de Felipe VI ha mantenido su afición por la fotografía durante décadas aunque ahora, al ser todos ya mayores y no haber tantos encuentros festivos, no puede fotografiar a la familia, su objetivo más preciado.

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En Vanitatis hemos visto imágenes de fiestas privadas de la anterior Familia Real en la que se puede ver a quien fuera reina tomando imágenes a alguna de sus hijas y nietos posando ante ella. También la infanta Cristina tenía una buena cámara, aunque más grande y aparatosa que la de su madre, un artilugio que desapareció cuando llegaron los móviles. En cambio, en casa de doña Sofía la cámara ha perdurado en el tiempo y la reina madre ha seguido revelando las fotografías a la antigua.

La infanta Cristina hace algo parecido a su madre, aunque no tiene ya tantos álbumes de fotos, puesto que prefiere el digital y tomar imágenes con el móvil. Su casa, señalan quienes la conocen, está llena de fotos de recuerdos, sobre todo de sus cuatro hijos, desde bebés hasta mayores.

Álbumes ordenados

Quien tiene decenas de álbumes de fotos bien ordenadas por tiempo y por circunstancias es la reina Sofía. Quienes la conocen cuentan que es una de las cosas que más le gusta hacer: sentarse cómoda en un sillón y pasar las páginas de sus álbumes de fotos, recordar los viejos tiempos, viajes con la familia, momentos de vacaciones, íntimos y divertidos.

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Otro de los asuntos que a la reina Sofía le ha interesado retratar a lo largo de su vida ha sido la naturaleza. Amante de todo lo relacionado con el medio ambiente y su preservación, la madre de Felipe VI cargaba con su cámara en muchos de sus viajes solidarios y tomaba fotografías de lo que más le interesaba.

Quienes la tratan en la actualidad lamentan que ya no tiene esa pasión por fotografiar lo que la rodea, que está más cansada por la edad y prefiere, además, estar cerca de su querida hermana, la princesa Irene de Grecia, que no se encuentra en buen estado.

Archivo de gran valor

Sea como sea, con pocos los privilegiados que han tenido acceso a ese enorme archivo de imágenes que sin pretenderlo, la reina Sofía ha creado con los años. En Vanitatis hemos podido ver algunas de las imágenes y son fotografías que destilan cariño y voluntad. Aparecen sus hijos, el centro de su afición fotográfica, y también sus nietos.

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Lo curioso es que hay muchas imágenes de su marido, el rey Juan Carlos I, cuando sabemos que han estado muchos años distanciados. Pese a esa separación de facto, la reina Sofía ha acompañado a don Juan Carlos durante años a viajes con amigos, privados, tal como Vanitatis ha podido comprobar en algunas imágenes. Fotografías cuya calidad no es profesional, claro está, pero sólo por su contenido valdrían millones. Pero sabemos que son imágenes que nunca verán la luz.