El look de gala de Charlène de Mónaco: un vestido homenaje a su carrera de nadadora para brillar en la alfombra roja

Tras una semana de múltiples eventos en la capital del Principado, la 64º edición del Festival de Televisión de Montecarlo ha llegado a su fin durante la tarde-noche de este martes 17 de junio. Por si fuera poco, su tradicional ceremonia de clausura se ha encontrado presidida por Sus Altezas Reales, los príncipes Alberto y Charlène de Mónaco, quienes han subido al escenario para entregar la prestigiosa Ninfa de Cristal -galardón de dichos premios- a Robin Wright, reconocida actriz, directora y productora estadounidense.

Sin embargo, antes de dicho momento, al igual que el resto de los invitados, el matrimonio perteneciente a la familia real monegasca ha pisado la alfombra roja de la cita, donde, además de por separado, han posado con los miembros del jurado de la organización. Entre ellos, ha destacado la presencia de la periodista francesa Mireille Dumas o la intérprete americana Judith Light.

Cumpliendo rigurosamente el ‘dress-code’ de la gala y teniendo en cuenta su relevancia internacional, Charlène no ha dudado en estrenar un nuevo diseño para la ocasión. Nos referimos a un sofisticado vestido azul cielo de corte sirena, firmado por Ralph Lauren y destacado por un cuello halter reforzado con tiras de gasa, el cual parece rendir homenaje a sus orígenes como nadadora.

Solo cabe recordar que la esposa representó a Sudáfrica en diversas competiciones deportivas, incluyendo los Juegos Olímpicos de Sídney 2000. Por ende, es consciente del poder estético de su espalda y brazos; zonas que ha dejado completamente al descubierto con este tipo de escote. Además, el color elegido es la mejor representación del agua.

A modo de finalización de esta oda a su pasado, Charlène de Mónaco ha querido rematar esta exclusiva prenda con unas elegantes sandalias plateadas de Manolo Blahnik y unos pendientes de diamantes en forma de mariposa de la joyería Van Cleef & Arpels.

Esta apuesta ha sido completamente diferente a la escogida por la princesa consorte durante su desayuno con Robin Wright, el cual ha tenido lugar esta misma mañana en el Café de París de Mónaco. La esposa del príncipe Alberto y la actriz estadounidense posaban juntas en un almuerzo de 'Mujeres con Propósito', organizado por la firma suiza Akris. El objetivo de este encuentro era ensalzar a mujeres relevantes que, con su dedicación, están construyendo un mundo más justo, inclusivo e igualitario.

Durante este evento, la sudafricana lucía un vestido camisero blanco de largo midi, manga larga, botonadura en los puños y ligero drapeado en la zona central y largo midi, valorado en 2.590 euros. A este sumó unos slingback en color nude de Gianvito Rossi, hechos a mano en Italia y con tacón de reloj de arena de 8,5 centímetros.