Del estreno estilístico de la princesa Ingrid Alexandra con tiara de diamantes al vestido nupcial de Brigitte Macron: la histórica cena de gala en Noruega

Emmanuel y Brigitte Macron están de viaje en Oslo. Un viaje histórico, ya es la primera vez en 41 años que un presidente francés realiza una visita oficial a Noruega. Su agenda incluye un recorrido por el Museo Nacional, un evento de negocios y una cena de gala con la pareja real en el Palacio Real. Al igual que el pasado mes de abril con motivo del encuentro con la presidenta de Islandia, tanto los Reyes como príncipes herederos estuvieron acompañados por la princesa Ingrid.

El Palacio Real de Oslo volvió a engalanarse el lunes por la noche para la cena en honor a los Macron. Previamente, el rey Harald recibió en audiencia al presidente Emmanuel Macron y a Brigitte Macron. Asistieron también la reina Sonia, los príncipes herederos y la princesa Ingrid Alexandra. La velada exigía a las damas de la realeza un código de vestimenta de máximo esplendor: vestido de gala, tiara y condecoraciones.

Por un lado, destacó la presencia de la joven Ingrid Alexandra, que volvió a deslumbrar tras su debut. Para esta segunda ocasión, se decantó por el rojo con un elegante vestido largo de Vivienne Westwood elaborado en satén, con escote bardot y corsé. Además, se trata de una prenda de estreno, por lo que es la primera vez que la princesa aparece en una gala con un vestido que no le pidió prestado a su madre.

Para complementar su atuendo, la princesa optó por la tiara Boucheron Pearl Circle. Esta joya, recibida en su 18º cumpleaños en 2022, perteneció originalmente a la princesa Ingeborg, duquesa de Vastergotland y esposa de Carl de Suecia y Noruega. Inicialmente, la tiara estaba compuesta por círculos entrelazados de diamantes engastados en platino; sin embargo, al adquirirla para su esposa, Carl le añadió un conjunto de perlas.

Por su parte, su madre, la princesa Mette-Marit, lució un diseño mucho más sobrio. Se decantó por un vestido de seda blanca de la casa Dior, un claro guiño a la pareja presidencial. La prenda destacaba por sus botones frontales y un cinturón anudable. En su caso, lo complementó con la tiara de margaritas, que fue un regalo de bodas de los reyes Harald y Sonia de Noruega.

Brigitte Macron eligió un arriesgado diseño midi con encaje joya, una prenda de inspiración nupcial. La primera dama francesa fue aún más atrevida en la elección de los complementos, decantándose por un bolso de mano y una pinza estampada a juego. A su lado, la reina Sonia optó por un vestido púrpura con brillantes y cintura ajustada, convirtiéndose en la más llamativa de la noche.