Mary de Dinamarca sorprende con una chaqueta de tweed de su hija Josephine y broche histórico de su suegra, la reina Margarita, para dar inicio al crucero de verano

Siguiendo la tradición, Federico X y Mary han vuelto a embarcarse en el yate real Dannebrog para su crucero de verano. Es la segunda ocasión en que realizan esta costumbre desde su proclamación como monarcas, un recorrido que los lleva por distintos rincones de Dinamarca y que este año incluye tres municipios. La travesía dio inicio en Sæby, una localidad portuaria situada en la zona oriental del país, aunque curiosamente no llegaron a bordo del barco real que utilizarán durante estos días, sino en un balandro.

El motivo del cambio a última hora de embarcación se debe a que el puerto de la localidad costera era demasiado pequeño para las dimensiones del Dannebrog, que consta de 78 metros de longitud. La pareja real fue recibida por el alcalde del municipio y la banda del Príncipe, que interpreto ‘Rey Christian’. De este modo, María continúa la tradición de su suegra.

Entre las sorpresas, llamó la atención el vestuario de Mary. La reina, con un extenso guardarropa, optó por una prenda que había sido vista por última vez en su hija Josephine. Lució una chaqueta de tweed de algodón y lino en tonos azul y blanco, con cierres a presión en el frente, bolsillos delanteros, cuello con muesca y un corte ligero, fluido y desestructurado. Esta prenda ha sido compartida en varias ocasiones: Josephine la llevó durante las celebraciones del jubileo de la reina Margarita en 2022, mientras que Mary la estrenó en 2013. Una prenda que combinó perfectamente con una falda midi en azul marino, una blusa con cuello mao, diadema trenzada y unos tacones de aguja marrones.

No fue el único detalle, ya que siguió también los pasos de su suegra, la reina Margarita. Durante su etapa como monarca, la madre de Federico X llevaba siempre un broche de ancla cuando realizaba los cruceros a bordo del barco real. Por ello, con motivo del mismo compromiso, su sucesora como consorte, Mary ha llevado el mismo detalle en el lateral izquierdo de la chaqueta.

Motivados por su conocida pasión por la naturaleza, durante su visita a la iglesia de Sæby recibieron un regalo singular: un bebedero para pájaros de 80 kg, según informó el medio danés BilledBladet. Es muy probable que lo coloquen en alguno de los jardines reales que Mary mostró recientemente en un programa de televisión. “Aunque la naturaleza siempre ha tenido un lugar muy importante en mi vida, la belleza de nuestro jardín silvestre logró cautivarme por completo”, comentó la Reina durante su participación en ‘Søren Vester's Garden – Biodiversidad y jardines de castillos’.