Desde junio de 2023 no se celebraba una cena de gala en el Palacio Real de Madrid, por lo que la velada de este martes ha sido especialmente señalada. Dos años y medio después, los salones del palacio han vuelto a vestirse de gala para recibir al sultán de Omán, Haitham bin Tariq, en una cita marcada por la solemnidad y el simbolismo diplomático.
La ocasión ha tenido además un componente significativo para la propia Casa de Su Majestad el Rey: ha sido la primera cena de gala para varios de los nuevos miembros del equipo. Entre ellos, Camilo Villarino, jefe de la Casa del Rey; Mercedes Araujo, secretaria general; Rosa Lerchundi, jefa de comunicación; Marta Carazo, jefa de la secretaría de la Reina, y Carmen Castiella, consejera diplomática. Para todos ellos, esta velada ha supuesto un debut institucional de altura, un momento que sin duda recordarán.
La Reina saludando a Marta Carazo, jefa de su secretaría. (Limited Pictures)
Todo ha comenzado a las 20:00 horas, con el encuentro entre los Reyes y el sultán de Omán. Tras el saludo inicial, los tres se han dirigido al Salón del Trono, donde han recibido a las autoridades e invitados. No han faltado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; la presidenta del Congreso, Francina Armengol; el presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, y los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y de Defensa, Margarita Robles.
Uno a uno, los Reyes y el sultán han saludado a los invitados, entre sonrisas y complicidad. Después del recibimiento, los invitados se han trasladado al Comedor de Gala, engalanado con la tradicional vajilla de porcelana, la cristalería grabada con el escudo real y los candelabros centenarios que iluminan las grandes ocasiones. Ha sido allí donde el Rey y el sultán han pronunciado sus discursos.
Los Reyes con el sultán de Omán. (Limited Pictures)
En su intervención, don Felipe ha dado una cálida bienvenida al jefe de Estado omaní, subrayando la “amistad y admiración” que España profesa hacia Omán. Ha elogiado la figura del sultán Haitham bin Tariq como “símbolo de liderazgo responsable, prudente y reflexivo”, destacando el papel de su país como “fuente de estabilidad y crecimiento” y ejemplo de tolerancia y convivencia en la región del Golfo.
El monarca ha recordado los lazos culturales y humanos que unen a España y Omán, dos naciones “de navegantes y descubridores, abiertas al intercambio y comprometidas con la paz”. También ha puesto en valor la creciente relación económica, con empresas españolas implicadas en sectores clave del desarrollo omaní como la energía, la ingeniería civil, la sanidad o la inteligencia artificial.
Uno de los momentos más destacados del discurso ha llegado cuando el Rey ha abordado la situación internacional y los conflictos en Oriente Próximo: “Reiteramos nuestro llamamiento a la contención, al silencio de las armas y al cumplimiento de los acuerdos. Podemos estar —así queremos creerlo— ante esa oportunidad para una paz duradera que, desde hace décadas, es el gran anhelo del pueblo palestino y del pueblo israelí. Un escenario en el que un Estado Palestino soberano e independiente conviva en paz y en seguridad con un Estado de Israel, plenamente reconocido por todos. Y un marco de estabilidad que inaugure un futuro mejor de esperanza y bienestar real para la región.”
La Banda Sinfónica de la Guardia Real ha sido la encargada de amenizar la velada, que ha comenzado con la interpretación del himno de Omán. Tras los brindis, la música ha continuado con piezas emblemáticas de ambos países, como 'Suspiros de España', 'La Gran Vía' y 'Mediterráneo', entre otras canciones.
La reina Letizia. (Limited Pictures)
La velada ha continuado en un ambiente de distinción y cordialidad, con la reina Letizia acaparando todas las miradas gracias a su elegante vestido azul cobalto de The 2nd Skin y la histórica tiara rusa. Un cierre brillante para una noche que ha marcado el regreso de las grandes cenas de Estado al Palacio Real y ha consolidado la amistad entre España y Omán.
Desde junio de 2023 no se celebraba una cena de gala en el Palacio Real de Madrid, por lo que la velada de este martes ha sido especialmente señalada. Dos años y medio después, los salones del palacio han vuelto a vestirse de gala para recibir al sultán de Omán, Haitham bin Tariq, en una cita marcada por la solemnidad y el simbolismo diplomático.