Robert Pattinson y Kristen Stewart y otros romances que parecen de mentira
Entre idas y venidas, el romance entre los protagonistas de 'Crepúsculo' duró hasta el año pasado desde que se conociesen rodando la película
Un amor que vino y se fue y dejó a Hollywood estupefacto. Entre idas y venidas, el romance entre Kristen Stewart y Robert Pattinson duró hasta el año pasado desde que se conociesen rodando la película Crepúsculo en 2008. Esta semana, la revista Fashion & Style publicaba que hay indicios suficientes como para pensar que el romance de Robsten, tal y como definía a la pareja sus fans, era una ilusión. Una de las pruebas, según dicen, es que el noviazgo comenzó y terminó con la famosa saga de vampiros adolescentes.
Lo cierto es que, hoy por hoy, la prensa asegura que él sale con la cantante FKA twigs desde el pasado septiembre y que ella ha encontrado el amor en los brazos de otra chica. En su momento, la relación entre ambas estrellas corrió serio peligro cuando ella fue cazada besando al director de Blancanieves y la leyenda del cazador, Rupert Sanders, hasta el punto de pedir perdón a su ‘novio’ en público una vez que se destapó el filtreo. La pareja acabó reconciliándose a punto de publicitar la última entrega de la saga vampírica, Amanecer Parte 2.
No es la primera vez que algunos de los romances salidos de Hollywood parecen creados con propósitos publicitarios. Hace años que la misma sospecha se ha cernido sobre todos y cada uno de los amoríos o matrimonios de Tom Cruise. Quizá uno de los más sonados, el que se produjo entre el matrimonio con Nicole Kidman y el de Katie Holmes, fuese el de Penélope Cruz, a la cual el actor conoció durante el rodaje de Vanilla Sky. Aquel infame remake de Abre los ojos unió a la de Alcobendas con el Golden boy de Hollywood en un momento muy propicio para ambos: ella se encontraba iniciando su carrera hollywoodiense y él se acababa de separar de Nicole Kidman, lo cual acrecentaba peligrosamente los rumores sobre una supuesta homosexualidad. La sombra de la sospecha se cirnió sobre aquel noviazgo breve e inesperado.
La manipulación, una larga tradición de la meca del cine
El propio Andrew Morton, biógrafo no oficial de Cruise, aseguraba en una entrevista que lo de Pe y Cruise no había pasado del “colegueo” entre ambos. Los fines publicitarios parecían bastante claros para muchos de los observadores de la pareja, que se presentaba enamorada y feliz en tantas alfombras rojas como les fuese posible.
El Hollywood clásico también tuvo sus supuestos casos de manipulación publicitaria. En una época en la que la vida de las estrellas estaba plenamente controlada por el estudio de turno, los romances de pega eran moneda común. Así es como, años después, se ha hecho patente que Rock Hudson fue llevado al altar con su secretaria para ocultar su homosexualidad o cómo es cada vez más verosímil un matrimonio amañado entre Barbara Stanwyck y Robert Taylor. La protagonista de Stella Dallas y el héroe de Quo Vadis estuvieron casados desde 1939 hasta 1951. Se cuenta que fueron los devaneos de él con iconos sexuales de la altura de Ava Gardner y Lana Turner los que dieron al traste con el matrimonio e incluso provocaron un intento de suicidio de ella.
Sin embargo, ante la cantidad de imágenes que la pareja ofrecía a la prensa posando cual enamorados de una obra de Shakespeare, siempre se sospechó que, por muy republicanos que fuesen en sus ideas políticas, estaban casados para fortificar su carrera y para ocultar la homosexualidad de ambos. Pocos biógrafos se han atrevido a certificarlo desde entonces pero la sospecha siempre ha estado ahí.
Pattinson y Stewart podrían haber sido las últimas y aprovechadas ‘víctimas’ de la maquinaria publicitaria de la meca del cine, esa que fabrica mentiras como quien fabrica churros y que, pase el tiempo que pase, parece que seguirá haciéndolo.
Un amor que vino y se fue y dejó a Hollywood estupefacto. Entre idas y venidas, el romance entre Kristen Stewart y Robert Pattinson duró hasta el año pasado desde que se conociesen rodando la película Crepúsculo en 2008. Esta semana, la revista Fashion & Style publicaba que hay indicios suficientes como para pensar que el romance de Robsten, tal y como definía a la pareja sus fans, era una ilusión. Una de las pruebas, según dicen, es que el noviazgo comenzó y terminó con la famosa saga de vampiros adolescentes.