Amber Heard llama a la policía para echar a los empleados de Johnny Depp de su casa

La guerra entre Amber Heard y Johnny Depp no se limita exclusivamente entre ellos, sino que poco a poco está implicando a sus allegados y ahora también a su personal de confianza. La actriz no tiene intención de compartir espacio con nadie que tenga que ver con su exmarido, a quien ha acusado de maltrato continuado. Este lunes se vio obligada a llamar a la policía tras ver cómo parte del personal del actor acudían a la vivienda que el matrimonio compartía en el 849 South Broadway para recoger algunas pertenencias de Depp.

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Esta residencia ha sido tomada por la actriz como un búnker en el que sentirse segura de los ataques del exterior, especialmente de aquellos que ponen en duda la veracidad de su denuncia por maltrato machista. El hecho de que personas ajenas a su hogar accedan a él le crispa los nervios, a pesar de conocerles por ser miembros del equipo de ayudantes de su exmarido. Una acción que ha sido vista por sus abogados como una violación de la orden de alejamiento temporal que el juez ha impuesto a Johnny Depp hasta que se demuestre su inocencia.

El personal encargado de recoger distintas obras de arte y muebles que, presumiblemente, son propiedad del actor de 53 años tuvo que volver al lado de su jefe con las manos vacías, dado que su exmujer impidió que saliese nada de su residencia. Ahora el juez deberá pronunciarse por una cuestión más, sumando ya una larga lista de acusaciones que entre ellos se están lanzando desde que decidiesen poner punto y final a su matrimonio.  

 

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