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Madonna y Portugal se declaran la guerra por culpa del 'caballo de Sintra'
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FRACTURAS

Madonna y Portugal se declaran la guerra por culpa del 'caballo de Sintra'

La prensa portuguesa ha filtrado una serie de mensajes entre la cantante y su agente en los que la estrella se queja porque el país luso no le muestra un trato preferencial... aunque miente

Foto: La cantante Madonna, fotografiada en Nueva York. (Getty)
La cantante Madonna, fotografiada en Nueva York. (Getty)

A Madonna se le ha acabado el amor con Portugal de tanto usarlo. La ex ambición rubia, ahora convertida en una tormenta morena inmensa en la posproducción de su último disco, ha recordado de la forma más brusca posible que es una diva y las divas obtienen lo que quieren a riesgo de arremeter contra todos.

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Y todos, en este caso, son los portugueses, sus otrora adorados vecinos, a los que la cantante, de 60 años, hace reproches en unos duros mensajes privados mantenidos con su agente y que ha revelado el medio sensacionalista luso 'Correio da Manhã'. Unos mensajes en las que su agente se dirige a ella como “my queen” (mi reina) para informarle de que las cosas no están saliendo como ella quiere. La reacción de la artista ha causado estupor.

Todo el revuelo se debe a 'Indian Summer', una de las nuevas canciones del próximo disco de Madonna, que saldrá a la venta este año y en el que se reflejará la influencia que la cultura portuguesa ha tenido en ella en los dos últimos años, según ha dicho la propia cantante. Para el videoclip, la artista se encaprichó de la espectacular Quinta Nova da Assunção, un palacete del siglo XVIII situado en Sintra, a veinte minutos de Lisboa, donde su equipo había programado la grabación entre los días 15 y 20 de este mes. Se obtuvieron los permisos necesarios para todas las escenas (“la actriz tumbada en la cama de su cuarto”, “un grupo de bailarinas ensayando” o la protagonista “circulando por el corredor e interior de algunas salas”, según consta en el guion, filtrado a la prensa) salvo para la imagen reina: un caballo “tumbado en el suelo interactuando con la protagonista” dentro del edificio.

placeholder Madonna, en una gala en el Metropolitan de Nueva York. (Getty)
Madonna, en una gala en el Metropolitan de Nueva York. (Getty)

“Hay cosas que el dinero no paga”, ha dicho el alcalde de Sintra, Basílio Horta, para explicar una prohibición que se justifica, dice, por el patrimonio. “Bajo ninguna condición dejaría entrar a un caballo en el palacio, ¡no tiene ningún sentido! Madonna es una artista, pero el palacio es de todos y no está para ser dañado”.

La confusión se instaló en el rodaje, han contado fuentes de la alcaldía de Sintra. A la diva no le gustó no poder contar con el equino, y los productores insistieron y amenazaron con que iban a llamar al primer ministro, el socialista António Costa, para que interviniese. Ante la negativa del alcalde y el aumento de la tensión, incluso tres policías municipales de paisano fueron enviados al rodaje para que el veto no fuese burlado.

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Y entonces Madonna estalló. Pidió explicaciones a su agente, que trató de excusarse en los mensajes que ya ha leído todo Portugal. “Disculpa, mi reina. Hago todo lo que puedo. Telefoneé a mucha gente y envié varios mensajes. Desgraciadamente, el hombre que puede decidir no está disponible, pero en algún momento lo estará”. Ella responde: “Mañana es demasiado tarde, estaremos grabando en un lugar diferente. Olvídalo”. El agente asegura que lo seguirá intentando, pero entonces la autora de 'Like a virgin' da rienda suelta a su frustración.

placeholder La cantante, en un partido de la selección portuguesa en Lisboa. (Getty)
La cantante, en un partido de la selección portuguesa en Lisboa. (Getty)

“He dado ya mucho a este país y cuando pido un simple favor, que de hecho es mostrar Portugal al mundo, la respuesta que recibo ¡es no! Esto es culpa tuya, ya que tú me convenciste para mudarme aquí”.

Ristra de favores

Pero lo cierto es que no es el primer favor que pide. El pasado julio obtuvo un más que ventajoso contrato con otra alcaldía, esta vez la de Lisboa, que le cedió el espacio trasero de un palacio cercano a donde residía para que aparcara quince vehículos, por 720 euros al mes, un precio extremadamente bajo para tratarse del centro de la ciudad, donde escasean las plazas para el resto de vecinos. Entonces, Madonna se mantuvo en silencio mientras arreciaban las críticas al consistorio. También cuando a su llegada, en 2017, recibió un trato vip al conseguir el permiso de residencia en un tiempo récord tras mantener una reunión privada con la entonces ministra de Administración Interna (Interior), Constança Urbano de Sousa, algo que contempla la ley en casos excepcionales pero que también contó con una considerable dosis de polémica.

El encontronazo de Sintra deja un amargo sabor de boca para los que pueden ser sus últimos meses en Portugal. La artista, que se trasladó a Lisboa para seguir a su hijo, que juega en las categorías inferiores del Benfica, ha dejado el Palacio de Ramalhete, un hotel de doce habitaciones que había alquilado al completo como su nuevo hogar por un año, y se encuentra ahora hospedada en un hotel de lujo de la capital portuguesa, que se espera que abandone definitivamente en verano.

A Madonna se le ha acabado el amor con Portugal de tanto usarlo. La ex ambición rubia, ahora convertida en una tormenta morena inmensa en la posproducción de su último disco, ha recordado de la forma más brusca posible que es una diva y las divas obtienen lo que quieren a riesgo de arremeter contra todos.

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