Irina Shayk reaparece espectacular y a lo Gilda tras su ruptura con Bradley Cooper

Irina Shayk está tratando de olvidar a Bradley Cooper con el mejor estilo posible. Enfundada en un ceñido vestido de cuero de Ermanno Scervino y con guantes negros a lo Gilda, la top rusa de 33 años desfilaba ayer en Florencia con motivo del 90º aniversario de CR Runway x LuisaViaRoma en el que es su primer acto público tras saltar la noticia de su separación del actor de 44 años.

Más tarde Shayk, que compartió pasarela entre otras tops con Bella Hadid, cambiaba de modelo sin dejar el color negro y optaba por un diseño de Mugler con chaqueta y falda de rayas a juego, combinado con detalles sexy en guantes y medias.

Antes de desfilar en Italia, la modelo había pasado unos días en un lugar de lo más recóndito: Islandia. En su cuenta de Instagram compartió varias imágenes del viaje en las que posa frente a los bellos paisajes de la isla. Esas fotos llegaban tan solo dos días después de que se anunciara su ruptura con Cooper.

Según publica la revista 'People', fuentes del entorno de la pareja aseguran que “dado que Bradley e Irina siempre han sido muy discretos con su vida privada, pocos sabían que estaban teniendo problemas”, pero que a estas alturas llevaban “vidas totalmente separadas”. Las mismas fuentes han declarado que Irina “no está centrada en la fama y solo quiere proteger a su familia”. Ambos tienen una hija en común de dos años, Lea De Seine.

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El actor, por su parte, se dejó ver en una fiesta del Sunset Tower Hotel en Los Ángeles esta semana junto a unos amigos. Testigos presenciales declaraban que Cooper “parecía no tener ni una sola preocupación en el mundo”.

Y en medio de las especulaciones sobre una posible relación entre él y Lady Gaga, la cantante ha decidido tomar la iniciativa y esta semana, en plena actuación en Las Vegas, cuando uno de los espectadores gritó: “¿Dónde está Bradley Cooper?”, ella respondió molesta: “Sean amables, sean amables o váyanse al carajo”.