Los dos años sobrios de Kate Moss tras décadas de fiestas salvajes

De protagonizar escándalos con abundancia de drogas y alcohol y destrozar habitaciones junto a Johnny Depp a escuchar a Mozart y hacer puzles durante la cuarentena con su actual pareja, el conde Nikolai von Bismarck. Así ha cambiado la vida de Kate Moss en los últimos meses desde que dejara la bebida y las fiestas que tantas veces hicieron que saltara a los titulares.

La supermodelo apuesta ahora por un estilo de vida saludable que incluye tener un entrenador personal, hacer yoga y madrugar. "Me meto en la cama alrededor de las once de la noche y veo Netflix antes de quedarme dormida. Acabo de terminar la serie 'Sex Education', que es muy divertida", ha desvelado en una entrevista a la revista 'Elle'.

Este extremo lo confirma su gran amigo, DJ Fat Tony, que confirma que la británica lleva dos años completamente sobria y ha dejado atrás los vicios del pasado. "Ahora se lo pasa mejor que nunca", asegura el músico, que también ha ayudado a dejar el alcohol a otras celebrities como el polémico Boy George. Y Tony sabe de lo que habla, ya que, como él mismo confiesa, "gasté más de un millón de libras en drogas y perdí mi casa y la cordura".

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La modelo ya parecía en 2015 querer ir por el buen camino tras pasar una semana de desintoxicación en Turquía en junio de 2015, pero el viaje terminó en un nuevo escándalo cuando la Policía tuvo que sacarla a la fuerza de su vuelo después de una sesión de copas en el aeropuerto.

La que fuera reina de la pasarela, que ahora tiene 46 años, admitió recientemente que también ha tratado de reducir la cafeína y la nicotina de su vida. En declaraciones a la NBC aseguraba que "bebo mucha agua, no demasiado café y estoy tratando de fumar menos". En esa misma entrevista hablaba también de cómo se arrepiente de haber posado desnuda cuando solo tenía 15 años. “No dejaría que mi hija lo hiciera ahora. La miro, y pensar que yo estaba haciendo topless a su edad… ¡Es una locura!”.

En otra entrevista, la modelo comentaba que “antes solo existía una cosa para mí: fiesta, fiesta y más fiesta. Con mucho alcohol y otras locuras. Ahora me relajo en el campo con mi hija [Lila Grace, que sigue los pasos de su madre en la industria de la moda]. Cocino asado y hago mermelada”. Todo un cambio radical para la que llegó a ser conocida como Cocaine Kate.