Michael Douglas y Catherine Zeta-Jones presumen de vacaciones en Mallorca

Un año más, y ya van 31, Michael Douglas, acompañado de su esposa Catherine Zeta-Jones y su hija Carys Douglas, han vuelto a elegir Mallorca para sus vacaciones, alojándose en la finca S'Estaca en Valldemossa que el actor y su exesposa, Diandra Lucker, compraron hace tres décadas.

Tras pasar el confinamiento recluidos en su casa de las Bermudas, la hollywoodiense pareja disfruta estas semanas de la espléndida propiedad construida en 1867 por el archiduque Luis Salvador de Habsburgo en plena Sierra de la Tramontana y que ya es propiedad exclusiva del actor norteamericano. La finca salió a la venta en el año 2014 por un precio de 55 millones de euros pero, ante la imposibilidad de encontrar comprador, fue bajando de precio hasta los 28,5 millones de hace unos meses, momento en el que Douglas adquirió la mitad que pertenecía a su ex.

No es de extrañar que los actores repitan cada año su tradicional visita a nuestro país. La finca cuenta con siete edificios, todos ellos con habitaciones para invitados, un salón, biblioteca, bodega, spa y gimnasio. También han reservado un espacio para un huerto ecológico. Es sin duda “un lugar mágico”, tal y como el protagonista de 'La joya del Nilo' dice en un vídeo promocional que realizó cuando trataba aún de vender la finca.

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La casa ha sido escenario de rodajes en los últimos meses y puede verse con mucho detalle en la serie de Netflix 'White Lines', que se ha rodado en Mallorca aunque está ambientada en Ibiza.

Durante sus primeros días en la isla, fue la actriz británica la que dio cuenta de su presencia en Mallorca a través de su cuenta de Instagram. Carys, de 16 años, también dejó constancia de sus vacaciones en la isla a través de su perfil. Su padre finalmente también se ha animado a mostrar a sus 767.000 seguidores una instantánea de su veraneo español.

En la misma red social, hace un año, el actor nominado a un Emmy por su serie 'El método Kominsky' celebraba con una tarta de la pastelería de Ángel Cortés sus 30 años de íntima relación con la isla.