Hugh Grant: su historia de amor española, caída a los infiernos y parejas abiertas

Cuando Gonzalo Suárez anunciaba el inicio de rodaje de 'Remando al viento' en junio de 1987, poco podía imaginar el director, actor y escritor que su película más internacional iba a cobrar una dimensión muy especial, porque en ella se enamoraron dos de sus protagonistas, en aquel entonces casi desconocidos, Hugh Grant, que este 9 de octubre cumple 60 años, y Liz Hurley.

La película contaba el proceso de creación de una de las novelas de terror más célebres de todos los tiempos, 'Frankenstein', en el que estuvo involucrado no solo la escritora, Mary Shelley, sino también Lord Byron, a quien daba vida Hugh Grant, que en aquel momento tenía 25 años, cuatro más que Liz Hurley, que interpretaba a Claire, la hermana de la escritora y amante del poeta británico, con quien tuvo una hija, Allegra, que falleció en un convento católico a los cinco años.

La película se rodaba principalmente en una finca a unos 50 kilómetros de Madrid en la que había un pequeño castillo, en Llanes, Suiza y Venecia, con un presupuesto de 300 millones de pesetas, elevado para la época, y lograba seis Goya en 1989, la mayoría de carácter técnico, además del de mejor director. Aunque se estrenó en varios países, no fue particularmente relevante para la proyección de la pareja protagonista en términos artísticos, pero su biografía sentimental siempre estará vinculada a este rodaje. De hecho, para pensar en dos ex tan bien avenidos en el panorama británico quizás deberíamos tener presentes a Sarah Ferguson y al duque de York, quienes después de divorciarse siguieron viviendo bajo el mismo techo. Y eso que el protagonista de 'Notting Hill' no se lo puso fácil a la protagonista de títulos como 'Al diablo con el diablo' o 'Colgado de Sarah'.

El 27 de junio de 1995 de madrugada, en plena racha de éxitos, tras 'Cuatro bodas y un funeral', el actor salió en su BMW en Los Ángeles con, como diríamos coloquialmente, ganas de jarana, y contrató los servicios de una prostituta, Divine Brown, quien le realizó una felación en el automóvil. Y fueron pillados 'in fraganti' por dos policías que les detuvieron. Al día siguiente, la foto de su detención había dado la vuelta al mundo, los estudios reformulaban la promoción de su película '9 meses' y tras dar un comunicado entonando el mea culpa se paseó por las televisiones y los medios de comunicación pidiendo disculpas.-

El día del estreno, Liz Hurley estuvo a su lado, la película fue un éxito de taquilla y la industria le perdonó este desliz, como atestigua la longevidad de una carrera en la que ha estado al frente de taquillazos como 'Notting Hill', 'Love Actually' o la saga de Bridget Jones. La actriz y modelo británica, por su parte, demostró tener un gran olfato para los negocios y produjo dos de las siguientes películas menores en la filmografía del que siguió siendo su pareja, 'Al cruzar el límite' y 'Mickey Blue Eyes', que recaudaron 17 y 75 millones en Estados Unidos, en 1996 y 1999, respectivamente. Unos meses más tarde, en mayo de 2000, tras trece años de relación, anunciaban su ruptura de manera amistosa.

Tras su ruptura, Liz Hurley tuvo una relación con el millonario Stephen Bing, que se desentendió del bebé que tuvieron en común, Damien, e incluso aseguró que no era el padre porque tenían una relación abierta, aunque, como diría el abogado Fernando Osuna, la paternidad se demuestra científicamente, y es lo que determinó la prueba de ADN. Y en una vuelta de tuerca de guion, y en una enorme prueba de lealtad, Hugh Grant fue su padrino de bautismo.

La vida sentimental de Hugh Grant ha sido finalmente menos convulsa (aunque sí insólita) de lo que podía hacer creer su affaire con Divine Brown y su reputación sigue intacta. Durante siete años fue pareja de Jemima Goldsmith, una de las grandes amigas de la recordada princesa de Gales, y exmujer del primer ministro de Pakistán y leyenda del críquet, Imran Khan.

Después tuvo cinco hijos con dos mujeres distintas, y ahora entra en esta nueva década con una gran estabilidad sentimental al lado de la productora sueca Anna Eberstein, con quien se casó el 25 de mayo de 2018. El actor fue padre por primera vez con Tinglang Hong, una mujer china de 41 años a quien dicen que conoció en un bar de Chelsea, una de las zonas más chics de Londres. Tuvieron a una niña, Tabitha, que nació en septiembre de 2011, pero su relación hizo aguas temporalmente, y fue cuando se cruzó en su camino la mencionada productora sueca. De tal forma que Grant fue padre por partida doble en apenas unos meses de diferencia, en septiembre de 2012, de un niño, John, con Eberstein, y en diciembre de Felix, fruto de su relación con Hong. Sin embargo, finalmente Hugh acabó consolidando su relación con la productora, con quien tendría dos hijos más, una niña en diciembre de 2015 y un niño a principios de 2018.

Hugh es especialmente celoso de su vida sentimental y nunca se ha pronunciado sobre si mantuvo una relación abierta con ambas mujeres, que parece ser el caso, o si se trató de una infidelidad, pero quien sí lo ha hecho ha sido Liz Hurley: "Es un padre encantador, muy dulce. Tener estos hijos le ha transformado de ser una persona muy desgraciada a otra razonablemente desgraciada. Le ha mejorado", dijo con su sentido del humor británico ante la última paternidad de su ex.

La carrera de Hugh Grant, lejos de languidecer, le está dando oportunidad de demostrar que es mucho más que el galán de las comedias románticas de los años 90 que le encumbraron. Así en 2018 asumía un papel complicado en 'Un escándalo muy inglés', que bien podría habérsele aplicado a él en su momento. En esta miniserie interpretaba al político liberal Jeremy Thorpe, quien en 1879 fue sometido a juicio acusado de estar detrás de su amante homosexual (está disponible en Amazon Prime), y de nuevo ha vuelto a tener una gran oportunidad al lado de Nicole Kidman en 'The Undoing', que llega a HBO el próximo 26 de octubre, en la que interpretan a un matrimonio cuya vida idílica se desmorona.