Jake Gyllenhaal: cocinitas, activista, ex de Taylor Swift y sex symbol de los 'nuevos 30'

Los 40 son los nuevos 30. Y si no, que alguien se fije en Jake Gyllenhaal. Cuando empezamos a saber más de él, allá por 2001, en una 'cult movie' como 'Donnie Darko', encarnaba a un 'nerd' de manual. Este 19 de diciembre de 2020 cumple los 40 como uno de los hombres más sexis del mundo; uno de esos actores que caen bien tanto a las mujeres como a los hombres, gais o heteros. Además, es un actor que agrada a la crítica más exigente, ya sea en cine de autor a lo 'Brokeback Mountain' o embarcado en superproducciones pirotécnicas como la desastrosa 'Prince of Persia'.

Pese a que sabemos mucho del eclecticismo de su carrera, el actor es bastante discreto en sus cuitas personales. Actualmente, sale con la modelo francesa Jeanne Cadieu, pero olvídense de verlos posando cual pareja feliz en mil alfombras rojas. Gyllenhaal tiene claro que las cosas de su vida son suyas, valga la redundancia. "Creo que al principio de mi carrera llegué a la conclusión, probablemente sin saberlo, de que algunas cosas de las que hiciera interesarían a la gente, lo que es bastante absurdo, sabiendo cómo de aburrido soy realmente...", dijo en una entrevista.

De 2002 a 2004 mantuvo una relación con Kirsten Dunst que ocupó demasiados titulares. Después matuvo un romance con otra actriz, Reese Witherspoon, una vez que esta se había separado de Ryan Phillippe. Sin embargo, de todas sus novias la que más llamó la atención de la prensa fue Taylor Swift, con la que estuvo durante un breve lapso de tiempo entre finales de 2010 y principios de 2011. La sesión de fotografías de ambos paseando por Brooklyn en el Día de Acción de Gracias de 2010 (con teleobjetivo y mil dificultades para el fotógrafo que las hizo) da buena cuenta de lo buena pareja que hacían el actor y la estrella de la música. Ella, de hecho, le dedicó una de sus famosas baladas: 'All too well'.

Relaciones aparte, a Gyllenhaal le apasiona la cocina y es un activista de tomo y lomo, algo que le viene de familia. Algunas de sus hazañas al respecto las recoge su perfil de Wikipedia, donde se asegura que ha llegado a donar hasta 400 dólares al año para plantar árboles en un bosque de Mozambique. También es conocido su gusto por la meditación, el budismo o los riesgos a la hora de elegir ciertos papeles. Ejemplo de ello es su Jack Twist, uno de los dos cuidadores de ovejas que se entregan a un amor gay en 'Brokeback Mountain'. Cuando Heath Ledger y él le dijeron 'sí' al director Ang Lee, muchos otros actores se habían negado a convertirse en homosexuales en una película que iba a ver todo Hollywood. Gyllenhaal y el fallecido Ledger salieron ganando con su decisión: sus personajes han pasado a formar parte de la historia del cine moderno.

Desenfadado, divertido, siempre dispuesto a mostrar su admiración por Pedro Almodóvar (en el estreno del último 'Spider-Man', en el que encarnaba al supervilano, dijo querer trabajar con el manchego) o a bromear en sus encuentros con los periodistas, Gyllenhaal se ha convertido en un símbolo del Hollywood de este nuevo siglo, en un actor que, más allá de su atractivo, siempre ofrece algo interesante en sus películas. Bienvenido sea ese salto de 'nerd' a guapo de revista, buen actor y comprometido con el tiempo que le ha tocado vivir.