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La nueva vida de Marcelo y su mujer, Clarice Alves, tras su brillante adiós al Real Madrid
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¿el nuevo Florentino?

La nueva vida de Marcelo y su mujer, Clarice Alves, tras su brillante adiós al Real Madrid

El defensa brasileño se despide del club blanco tras conquistar su última Champions League y convertido en el jugador con más títulos de toda su historia

Foto: Marcelo, celebrando el triunfo en la Cibeles. (Getty/Dennis Doyle)
Marcelo, celebrando el triunfo en la Cibeles. (Getty/Dennis Doyle)

La mejor sensación. Esas eran las tres palabras con las que Marcelo Vieira describía para sus seguidores de Instagram cómo se sentía tras hacerse en el Stade de France de París con la que será su última Champions League con el Real Madrid. El veterano defensa brasileño confirmaba de la mejor manera su final de ciclo con los merengues, habiéndose convertido nada menos que en el jugador con más títulos de toda su historia. Hoy, acompañado de sus dos hijos y su mujer, Clarice Alves, llegaba el momento de decir adiós a un equipo que le ha dado tanto y viceversa.

"No me siento una leyenda, no me califico así [...] No hay ningún problema en salir de un equipo, el mundo no se acaba, no dejaré de vivir por irme del Madrid. Hay otras cosas bonitas en la vida. Lo hemos decidido así. Es un día de alegría, no me voy fastidiado. Siempre voy a animar al Madrid. No quería estar en el Madrid sin aportar", son algunas de las palabras que ha pronunciado en la rueda de prensa de su emotiva despedida y que ya dejó claras el día que ganó la Champions.

"La emoción es brutal, ha sido mi último partido con el Real Madrid, pero estoy muy contento. No es un día de tristeza, me voy con mucha alegría, agradecido a los fans y las noches mágicas que he vivido en el Bernabéu", comentaba Marcelo a pie de campo al término del encuentro en el que el conjunto español venció uno a cero al Liverpool.

"No me siento una leyenda, soy una persona que disfruto cada momento. He tenido la suerte de ser capitán y levantar la Copa antes de mi adiós. Ya el último partido en el Bernabéu fue una mini despedida, pero ahora no me puedo despedir mejor que con mi quinta Champions. He cerrado un ciclo muy bonito", sentenció sin querer desvelar aún su futuro. "Lo vais a saber muy pronto", eran sus enigmáticas palabras.

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Pocos, muy pocos jugadores en la historia del fútbol pueden presumir de un palmarés deportivo como el que a sus 34 años ostenta Marcelo Vieira da Silva Júnior. Sus veintitrés títulos, entre los que brillan especialmente sus cinco Champions League, le convierten en el jugador vivo con más trofeos del Real Madrid tras el fallecimiento de Paco Gento.

Aunque la cantidad cercana a los ocho millones de euros anuales que percibe del club blanco le asegura una jubilación ciertamente dorada, el defensa brasileño quiere seguir ligado al fútbol en el futuro, por el método de comprar varios equipos modestos en Portugal y en su país natal. Pero sus miras están puestas en objetivos más altos, ya que, como él mismo ha confesado, pretende adquirir "algún club insignia, con una hinchada fuerte y tradición en Europa". ¿Estamos ante el nuevo Florentino Pérez? Desde luego no sería un mal ejemplo donde inspirarse.

Sus optimistas previsiones sin duda contrastan con las de aquel chaval que tuvo como primer sueldo de futbolista unos 100 reales (14 euros) como jugador del Juvenil del Fluminense, que entonces entregó a su abuelo como agradecimiento por todo el esfuerzo.

La figura de su abuelo Pablo fue muy importante para Marcelo, criado en uno de los barrios más humildes de Río de Janeiro. Era él quien se encargaba de cuidarle, de llevarle por el buen camino y de encargarse de que fuera a todos los entrenamientos para que pudiese convertirse en futbolista profesional. Su esfuerzo tuvo recompensa en 2006, cuando el Real Madrid anunció su fichaje por casi siete millones de euros.

placeholder  Un joven Marcelo (izquierda), junto a Roberto Carlos y Cicinho en 2007. (Getty)
Un joven Marcelo (izquierda), junto a Roberto Carlos y Cicinho en 2007. (Getty)

Aunque pocos recuerdan que en realidad su futuro estuvo a punto de ser también blanco, pero vistiendo la camiseta del Sevilla, club con el que tenía un acuerdo previo. Sin embargo, cuando se cruzó el club que preside Florentino Pérez de por medio, Marcelo optó por jugar en el Santiago Bernabéu.

Foto: Enrique Riquelme. (EFE)

En el club madrileño ha llegado a superar a Di Stéfano para convertirse en el segundo extranjero con más partidos de Liga en el club blanco, solo rebasado por Roberto Carlos, siendo hasta ahora el capitán del Real Madrid tras la marcha de Sergio Ramos al PSG francés. Mientras su futuro es aún incierto de cara a la próxima temporada, en el vestuario sigue siendo el número uno cuando de cantar y bailar se trata, como confirman sus propios compañeros.

En lo que respecta a su vida familiar, está felizmente casado desde hace quince años con su novia de toda la vida, la actriz y modelo brasileña Clarice Alves, y juntos forman uno de los matrimonios más sólidos en el mundo del fútbol.

Ambos tienen dos hijos en común. El mayor de ellos, Enzo, comparte el característico peinado del futbolista y lleva camino de seguir la carrera de su padre en el fútbol. Por otro lado, Liam lleva llenando de felicidad el hogar de la familia desde 2015.

Grandes amantes de los animales, especialmente de los perros, la familia tiene cuatro canes en su residencia de La Moraleja además de un gato. Tras la muerte de una de sus perritas hace unos años, Uly, Clarice le dedicaba un emotivo mensaje de despedida en Instagram.

"Hoy es tu día, mi flor, estrella tan preciosa. Siento inmensamente tu falta. Fuiste mi mejor compañera en estos últimos diez años. Amor tan nuestro… Mi pequeña gran compañera", escribía la actriz.

Además de un abultado palmarés de títulos con el Real Madrid y su selección, Marcelo tiene un gran número de tatuajes repartidos por su cuerpo que incluyen el 12 –su número de camiseta y el día de su nacimiento– y también el trofeo de la Liga de Campeones en su muslo izquierdo. Por supuesto, no podía faltar la imagen de su abuelo Pablo, fallecido en 2014, también inmortalizada con tinta en su brazo.

Triunfos y títulos aparte, el lateral brasileño se ha ganado cierta fama de 'cabezaloca', pagando un millón en multas desde que llegó a Madrid. Problemas con Hacienda, denunciado por la guardia civil por exceso de velocidad, conducir sin puntos y quebrantar el cierre perimetral forman parte del largo historial de Marcelo.

Esta última sanción fue especialmente polémica, después de que el jugador y su familia se saltaran el confinamiento en la Semana Santa de 2021, lo que le acarreó una multa de 2.700 euros. La prueba del delito fue una foto que el propio futbolista subió a su cuenta de Instagram, donde tiene más de 50 millones de seguidores, en la que se le veía con su mujer e hijos en el paseo marítimo de la playa de la Malvarrosa de Valencia sin mascarilla, a pesar de que en estos momentos no se podía entrar ni salir de la región sin causa justificada debido a la pandemia.

¿Cuál será ahora el próximo destino del talentoso lateral tras 16 temporadas visitiendo de blanco? ¿Se jubilará en su país o vivirá unos últimos años dorados en un Emirato como hizo Xavi Hernández? ¿O quizá cuelgue las botas y se dedique a ser presidente de un club a tiempo completo como Ronaldo? Pronto saldremos de dudas.

La mejor sensación. Esas eran las tres palabras con las que Marcelo Vieira describía para sus seguidores de Instagram cómo se sentía tras hacerse en el Stade de France de París con la que será su última Champions League con el Real Madrid. El veterano defensa brasileño confirmaba de la mejor manera su final de ciclo con los merengues, habiéndose convertido nada menos que en el jugador con más títulos de toda su historia. Hoy, acompañado de sus dos hijos y su mujer, Clarice Alves, llegaba el momento de decir adiós a un equipo que le ha dado tanto y viceversa.

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