Robert Pattinson: de vampiro a caballero oscuro y cómo aburrió a su acosadora española

Mayo de 2020. Londres. Las fotos que él mismo se hizo mientras guardaba cuarentena en su apartamento de Londres en pleno rodaje de 'The Batman' para la revista 'GQ' se convirtieron en trending topic en Twitter y nos acercaron al lado más humano, y un tanto cochambroso, de toda una estrella de Hollywood como Robert Pattinson.

Vivir a base de pasta –hizo explotar su microondas cocinando una receta de su invención durante la entrevista por videollamada– y comida de lata, pasar olímpicamente de las rutinas de entrenamiento que tenía programadas y perder la noción del tiempo fueron algunos de los aspectos de su estilo de vida habitual entonces, con los que todos nos pudimos comparar en aquella no tan lejana época de confinamiento estricto que nos tocó vivir.

Sin movernos en el espacio, pero sí en el tiempo, 34 años antes de estas peripecias de cuarentena, Robert Thomas Pattinson nacía en la capital británica, siendo el menor de tres hermanos y el único hijo varón de Robert y Clare Pattinson. Durante su infancia, su padre tuvo un negocio de importación de coches y su madre trabajaba en una agencia de modelos.

A pesar de que siempre fue un niño bastante tímido, quiso ser artista desde muy joven, primero probando suerte como músico y más tarde, animado por su padre, se atrevió a pasarse a la actuación. Tras formarse en el teatro, a los 17 años saltó del escenario a la pantalla logrando su primer papel en la película para televisión 'El anillo de los nibelungos', para cuyo rodaje tuvo que trasladarse a Sudáfrica durante varios meses.

Los fans de la saga del joven mago creado por J. K. Rowling recordarán perfectamente que su siguiente papel fue interpretar a Cedric Diggory en 'Harry Potter y el cáliz de fuego'. Ese rol impulsó definitivamente su carrera, con una revista calificándole incluso como "el próximo Jude Law" y otro asegurando que sería la "estrella británica del mañana". Como el actor ha admitido en varias ocasiones, la fama se le subió un poco a la cabeza.

Gran admirador de Marlon Brando y Jack Nicholson, su plan post Harry Potter era aceptar papeles más pequeños en obras de teatro o películas que le permitieran explorar personajes especiales. Así, interpretó a un veterano de la Segunda Guerra Mundial conmocionado en el thriller de la BBC 'The Haunted Airman' y a un estudiante enamorado de una profesora en 'The Bad Mother's Handbook'.

Sin embargo, también fue despedido de una obra de teatro en Londres y, antes de que se diera cuenta, estaba en Los Ángeles durmiendo en el sofá de su agente e intentando averiguar cuál sería su siguiente paso. Ese paso fue participar en la exitosa saga 'Crepúsculo'.

Su audición para el papel del vampiro Edward Cullen tuvo lugar en el dormitorio de la directora de la película, Catherine Hardwicke. Pattinson las impresionó con su actuación tanto a ella como a su futura coprotagonista, Kristen Stewart, con la que mantuvo una relación entre 2009 y 2012. "Todo el mundo llegó haciendo algo vacío y superficial", dijo Stewart a 'GQ'. "Pero Rob entendió que no era un papel frívolo".

Lanzado definitivamente al estrellato tras este papel, recientemente era declarado como 'el hombre más guapo del mundo' según la Golden Ratio of Beauty Phi. Utilizando esta fórmula, se han medido los ojos, las cejas, la nariz, los labios, la barbilla, la mandíbula y las formas faciales de muchas celebrities, siendo Pattinson científicamente el más atractivo de todos.

Con un talento un tanto desconocido para la música, se le da muy bien tocar la guitarra española y el piano e incluso llegó a grabar dos canciones para la saga vampírica que protagonizó. Actualmente en una relación que dura ya tres años con la modelo Suki Waterhouse, sobre su vida amorosa contaba una curiosa anécdota a la revista 'Creme'.

"Tuve una acosadora mientras rodaba una película en España. Se quedó esperándome en mi apartamento todos los días durante semanas, todo el día. Estaba tan aburrido y solo que salí a cenar con ella. Me quejé de todo lo malo de mi vida y ella nunca volvió. La gente se aburre de mí en dos minutos". Una frase que, al menos en cuestión de cine, parece no tener fundamento, ya que no para de encadenar proyectos con éxito de crítica y público.