Stormy Daniels: la actriz porno que ha puesto en jaque a Donald Trump

Una semana antes de que finalmente fuera imputado por el supuesto pago a la actriz porno Stormy Daniels a cambio de su silencio, el expresidente Donald Trump advertía de forma apocalíptica que se avecinaba una "potencial muerte y destrucción" si se llegaba a enfrentar a cargos criminales, algo que finalmente ha sucedido.

Según el político y empresario de 76 años, que actualmente se encuentra junto a su mujer en su mansión de Mar-a-Lago de Florida, su imputación puede buscarla "solamente un degenerado psicópata que verdaderamente odia a Estados Unidos", en alusión al fiscal Alvin Bragg, que fue quien inició el caso. Pero sin duda es la estrella del cine para adultos la principal responsable de un hecho trascendental en la historia del país norteamericano.

Aunque Trump se ha enfrentado durante años a investigaciones criminales en múltiples frentes, que van desde la presunta interferencia en las elecciones presidenciales a supuestos delitos financieros o su papel de instigador del asalto al Capitolio, finalmente ha sido la actriz y directora porno conocida por sus fans como Stormy Daniels la que le ha puesto en jaque finalmente.

Daniels, cuyo nombre legal es Stephanie Gregory Clifford, fue criada por una madre soltera en Baton Rouge, la capital de Luisiana. Los caballos eran su principal interés y afición. Pero comenzó a ganarse la vida trabajando en clubes de striptease desde el instituto. Según ha relatado, su juventud fue complicada, pasando apuros económicos y viviendo en uno de los peores barrios de la ciudad.

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Finalmente empezó a aparecer en películas pornográficas y a dirigirlas, utilizando un seudónimo extraído del nombre que el bajista de Mötley Crüe, Nikki Sixx, dio a su hija –Storm– y de su preferencia por la marca de whisky Jack Daniel's. Pronto comenzó a hacerse un nombre en la industria del ocio para adultos, consiguiendo varios premios y entrando en el salón de la fama del cine X. Posteriormente participaría en varios realities e incluso se le concedió la llave de la ciudad de West Hollywood en 2018, coincidiendo con la celebración del Día de Stormy Daniels.

Casada en tres ocasiones y madre de una hija, la actriz también ha aparecido en los últimos años en películas convencionales como 'Virgen a los 40' con Steve Carell y se ha interpretado a sí misma en 'Saturday Night Live'.

Daniels conoció a Donald Trump durante la celebración de un torneo de golf para famosos en Lake Tahoe (California), donde fue contratada para saludar a los competidores entre los tees de salida. Ha afirmado que el magnate hizo que un guardaespaldas la invitara a cenar, que más tarde mantuvieron relaciones sexuales en su habitación de hotel a pesar de que él estaba casado con la que sería primera dama, Melania Trump, y que mantuvieron el contacto durante un tiempo porque él le ofreció un papel en su reality show, 'The Apprentice'.

Sin embargo, cuando Trump se presentó con éxito a las elecciones presidenciales de 2016, su relación con Daniels evolucionó drásticamente. La actriz estaba negociando entonces un acuerdo para salir en televisión durante la campaña presidencial y hablar del supuesto encuentro sexual con Trump cuando recibió lo que los fiscales dicen que fue un pago de 130.000 dólares para que no hablara de lo ocurrido. El entonces abogado de Trump, Michael Cohen, hizo el pago.

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Aunque Trump ha negado haber mantenido relaciones sexuales con Daniels y ha sostenido que el pago no tuvo absolutamente nada que ver con las elecciones que ganó, los fiscales han persuadido ahora a un gran jurado para que acusara de que su método de pago a Cohen –en abonos mensuales de 35.000 dólares– era ilegal tras una investigación destinada a determinar si violó las leyes estatales de financiación de campañas o falsificó registros comerciales. Cohen se declaró culpable en 2018 de cargos federales relacionados con este pago. Además de a Daniels, Cohen dijo que organizó un pago de dinero por el silencio a otra mujer por orden de Trump.

Daniels se reunió recientemente con los fiscales de Manhattan y respondió a sus preguntas sobre el pago del expresidente. Su abogado, Clark Brewster, dijo en un tuit del 15 de marzo: "Stormy respondió a las preguntas y ha accedido a estar disponible como testigo, o para más indagaciones si es necesario".

Desde entonces, los fans de Trump han arremetido duramente contra Daniels, intentando descalificarla públicamente como testigo creíble, sacando a relucir su carrera como estrella del cine porno. El expresidente, por su parte, se muestra tranquilo y, en su línea habitual de declaraciones furibundas, asegura que “solo han traído esta acusación falsa, corrupta y desgraciada contra mí, porque yo estoy con el Pueblo Americano, ¡y saben que no puedo tener un juicio justo en Nueva York!".