El amor de Sigourney Weaver por España: de pedir trabajo a Almodóvar a su encuentro con Soraya Sáenz de Santamaría

La actriz norteamericana Sigourney Weaver recogerá este sábado el Goya Internacional en la 38ª edición de los premios. “A lo largo de los años, ha cautivado al público y se ha ganado su admiración como una de las intérpretes más queridas de los escenarios y las pantallas a nivel mundial”, justificaban desde la Academia del Cine en la nota de prensa.

La relación entre España y la actriz se remonta al año 1992. Fue cuando se caracterizó de Isabel la Católica para la película ‘1492: la conquista del paraíso’. Para ello, rodó en Salamanca y Sevilla con su amigo Ridley Scott. "Había sido un año español maravilloso", expresó la propia actriz. Pese al gran momento que vivió, los espectadores no refrendaron la inversión en el filme y fue todo un fracaso en cines.

Tuvieron que pasar 20 años para que Sigourney volviera a España. “El patio del Museo del Ferrocarril se convirtió ayer en el escenario de una impresionante persecución con Sigourney Weaver al volante”, publicó el diario 'El País' por aquel entonces. La actriz había viajado a Madrid para grabar una de las escenas de la película ‘The Cold Light of Day’ junto a Bruce Willis y Henry Cavill.

Ese mismo año también rodó con el director español Rodrigo Cortés el thriller ‘Luces rojas’. Durante su estancia, manifestó por primera vez su fascinación por nuestro país. “Me he sentido catalana por unos días. Debería aprender español, me encanta la gente. Es simpática y muy graciosa. Adoro especialmente Barcelona”, explicó.

Sigourney no solo disfrutó de la cultura, también se aseguró de buscar trabajo para volver cuanto antes. “Le he mandado un mail a Pedro Almodóvar. Me encantaría trabajar con él, pero en sus películas no hay actrices que hablen inglés, así que podría interpretar a una persona muda o a alguien que esté aprendiendo español. Es un hombre estupendo. ¿Puedes avisarme, por favor, si necesita a una actriz estadounidense?", preguntó al reportero, tal y como recogió la agencia EFE. Al final, no fue con Almodóvar, sino con Bayona con quien tuvo un papel en una de sus películas. Bajo su dirección, protagonizó ‘Un monstruo viene a verme’ en el año 2016.

Debido a la promoción de la película, disfrutó de varios viajes en nuestro país. En primer lugar, la presentó en el Festival de San Sebastián y, más tarde, viajó a Madrid para el estreno. En la capital, visitó el tablao flamenco Corral de la Morería. Allí mantuvo un encuentro con el bailaor Jesús Carmona y quedó prendada de “sus zapatos maravillosos”, como recoge 'Vanity Fair'. Además, también visitó el Museo del Prado para disfrutar de una exposición sobre el Bosco.

La première fue todo un acontecimiento con la presencia de Weaver. Allí se encontró con rostros como Concha Velasco, Lolita o José Sacristán, y políticos como Soraya Sáenz de Santamaría y Cristina Cifuentes. Después, todos juntos cenaron en la Taberna del Alabardero, un lugar frecuentado por actores y actrices de teatro.

Su última visita ocurrió en 2021 cuando fue premiada en el Festival de Cine de San Sebastián con el Premio Donostia. “Mi primer festival fue San Sebastián y me siento muy honrada de recibir este Premio Donostia, es un auténtico estímulo para seguir trabajando”, explicó a 'LOC' años antes.

“Me encanta trabajar en España porque creo que los españoles tienen una relación especial con el cine: lo ven como una expresión artística y no solo como un negocio”, dijo a 'El País' en 2016. Será con motivo de los Goya cuando Sigourney volverá para recibir de vuelta el cariño que ella ha mostrado por España durante todos estos años.