Penny Mordaunt pone a la venta el vestido icónico de la coronación de Carlos III

Una mujer con gesto solemne y elegantemente vestida porta una gran espada. Va delante del rey Carlos III, en una procesión que están viendo en directo millones de personas en todo el mundo. La mujer encarna serenidad y firmeza, ataviada con un vestido capa azul cuyo único accesorio es un bordado de hojas de laurel en ambos hombros a conjunto con el tocado. Fuera de Reino Unido, la gente no sabe quién es y los comentaristas que están cubriendo la coronación explican que se trata de Penny Mordaunt, entonces lord presidenta del Consejo Privado de Carlos III.

Esta política británica es bastante conocida en su país, donde tiene un pasado como 'celebrity'. Llegó a ser considerada en su día como la diputada más sexy del Parlamento británico e incluso participó en un reality show de saltos de trampolín. Su presencia preeminente en la coronación de Carlos III se debió a su misión de portar la llamada Espada del Estado, una de las cinco espadas ceremoniales que se usaron en la ceremonia. Hierática y firme a pesar de sostener el arma (3,6 kilos) durante casi una hora en la abadía de Westminster, su look también llamó la atención y la convirtió en uno de los personajes que se viralizó en las redes sociales (la política ya había avisado de que llevaba semanas haciendo flexiones con los brazos para poder cumplir). Fue tal el éxito de su misión que su nombre volvió a subir en las quinielas del liderazgo del Partido Conservador durante unas semanas.

Pero todo aquello pasó y la líder de la Cámara de los Comunes no parece una mujer especialmente nostálgica. Ante la evidencia de que el icónico vestido que lució aquel día no iba a poder ser reutilizado en bodas, bautizos o comuniones, Mordaunt ha tomado la extravagante decisión de ponerlo a la venta. Alega, según lo que ha dicho al 'Sunday Times' en una entrevista publicada el fin de semana, que el diseño se ha vuelto tan reconocible que siente que nunca más podrá volver a usarlo. La idea es financiar con el dinero de la venta varios proyectos de su circunscripción de Portsmouth North.

Mordaunt, de 50 años, tiró de humor con la revista 'Style': "Nunca podré volver a usarlo, ¡a menos que vaya a una fiesta de disfraces vestida de mí misma! Es un vestido tan icónico que debería continuar y hacer otras cosas buenas".

La diputada conservadora explicó a la revista cómo surgió la idea detrás del novedoso diseño: “Obviamente, mi predecesor en la última coronación fue un hombre. Además, yo era muy consciente de que, aunque íbamos a llevar las túnicas de la coronación y todo el espectáculo, también era una coronación moderna para un rey moderno".

“Así que quería usar algo con lo que pudiera estar al lado de mis colegas femeninas del gabinete y no parecer fuera de lugar –y al mismo tiempo estar al lado de la gran cantidad de clérigos, los perseguidores de armas, todos los uniformes militares– y encajar". El vestido costó 1.200 libras y fue confeccionado por la marca de prêt-à-porter Safiyaa, una de las firmas favoritas de la princesa de Gales. El sombrero era de Jane Taylor y los bordados corrieron a cargo de Hand & Lock, una casa de bordado fundada en 1767 que trabaja con la familia real y grandes marcas de moda.

“Miré muchas imágenes en busca de diseños que cumplieran todos los requisitos y sentí que un vestido capa funcionaría muy bien. Tiene una especie de halo histórico, pero también hace un guiño a los militares”, explicó Mordaunt.

La líder de los Comunes es muy consciente de la capacidad que tiene la industria de la moda para ayudar y dar visibilidad a las mujeres, también a las que trabajan en ella. Durante su mandato como secretaria de desarrollo internacional, Mordaunt apoyó a Eden, una organización sin fines de lucro que enseña a fabricar joyas a mujeres del sudeste asiático rescatadas de las redes de tráfico de personas.

“Le envié uno de los collares a Meghan Markle. Fue al principio, en ese momento ella estaba teniendo dificultades. Quería demostrarle la oportunidad que tenía y lo que potencialmente podría hacer. Tuvo mucho apoyo de los parlamentarios, mucha gente le escribió y quiso apoyarla”. La publicación le preguntó si Markle respondió a su oferta, y Mordaunt respondió: "No, no lo hizo". Y, entre risas, añadió: “Pero valió la pena intentarlo”.