La boda Bridgerton de lady Violet Manners y el vizconde Garnock con invitados españoles

La noticia daría para ocupar una temporada entera de 'Los Bridgerton', por la cantidad de ingredientes en los que podría abundar la pluma de Lady Whistledown. A saber: una joven y rebelde aristócrata perteneciente a una familia un tanto excéntrica que anuncia su compromiso con un vizconde conocido por ser justo lo opuesto a ella. Una relación que han mantenido en la sombra hasta el anuncio del compromiso. Tres hermanas, las Manners, que cuentan con legión de seguidores en redes y a las que la prensa británica ha tachado varias veces de "maleducadas" por sus fiestas. Un castillo, unos padres separados que comparten la misma mansión, y las quinielas por los ilustres invitados que pueden acudir a la boda, entre los que podría haber varios aristócratas españoles.

Lady Violet Manners es la hija mayor del duque de Rutland. También es una de las tres famosas Manners que han protagonizado fiestas y escándalos, aunque últimamente es más conocida por la iniciativa Heritage Explore, que pretende abrir al público las mansiones más majestuosas de Gran Bretaña. La joven no había dado señales de tener una relación estable hasta que hace pocos días publicó en su perfil de Instagram: "Dije sí a mi Caledonian Cowboy" (en referencia a un gaitero y poeta escocés) acompañando la foto de una imagen en la que su novio, Bill, le pasa un brazo por los hombros en actitud que no deja lugar a dudas. "Ha sido un fin de semana torbellino. Muchas gracias por todas las felicitaciones y el amor que nos han enviado. Ha sido increíble. Solo minutos después de la propuesta, estábamos absorbiendo todo en esta vista". La pareja estaba en Colorado.

La boda de la hija del duque de Rutland y el heredero del condado de Lindsay y actual vizconde Garnock, significa la unión de dos conocidas dinastías de la aristocracia del Reino Unidos. El padre de William, James Lindesay-Bethune tiene una buena colección de títulos: es el 16º conde de Lindsay, 16º lord Parbroath, 25º lord Lindsay de Byres, y 15º lord Kilburnie, Kingsburn y Drumry. También es miembro destacado del partido Conservador y de la Cámara de los Lores. Fue presidente del National Trust for Escocia desde 2012 hasta 2017. Se casó en 1982 con Diana Mary Chamberlaine-Macdonald y han tenido cinco hijos: Frances Mary (1986), Alexandra Penelope (1988), William James (1990); David Nigel (1993) y Chalotte Diana (1993). Por el lado materno, el Clan Macdonald es uno de los más extendidos de Escocia.

Entre los dos tienen varias mansiones para elegir donde celebrar su boda. Los Rutland moran desde siempre en el castillo de Belvoir, un edificio salpicado de torres y torreones enclavado en una finca de 6.500 hectáreas en el condado de Leicestershire, con 365 estancias donde cuelgan cuadros de Van Dyck o Pussin. Belvoir tiene suficiente espacio para albergar a David, duque de Rutland, y a su esposa Emma, de la que está separado. Él vive en la Torre del Pastor y ella en el Ala de la Guardería, junto a las habitaciones de sus cinco hijos: Lady Violet; Lady Eliza, 26; Lady Alice, 29; Charles Manners, marqués de Granby, 24; y Lord Hugo Manners, 20.

Los Rutland están más que acostumbrados a los escándalos, e incluso se diría que les gustan. “El duque de Rutland y yo nos vamos a separar… Pero conviviremos en nuestro castillo y tendremos nuevas parejas’: Esta es la sorprendente reacción de la duquesa frente a las infidelidades de su esposo”. Así comenzaba un texto que se publicó en el 'Daily Mail' en septiembre de 2012 y que redactó la propia duquesa, en el que esta revelaba que había pillado al duque con dos novias, algo que le había llevado a sentir “infelicidad, rabia y rencor”. Sin embargo, la aristócrata contaba que lo había logrado superar y que había iniciado “una relación con otro hombre, que trabaja en la finca”.

Aunque si hay un escándalo que protagonizó la familia ese fue el de Margaret Campbell, la abuela del actual duque, madre de Frances Manners. El divorcio de su segundo matrimonio con el duque de Argyll se convirtió en el proceso judicial más escandaloso del siglo XX en Reino Unido y acaparó las portadas de la prensa británica a principios de los años 60, que cargaron contra la duquesa, Margaret Campbell, por sus supuestos escarceos amorosos filtrados por su marido. Si quieren saber más HBO Max estrenó no hace mucho una miniserie sobre el tema, 'Un escándalo muy británico', protagonizada por Claire Foy y Paul Bettany.

"No sé qué hacen pero da la impresión de que ahí dentro tienen elefantes", explicaba un indignado vecino de las hermanas Manners cuando la prensa indagaba sobre cómo era convivir con el ritmo frenético de las hermanas. La familia cuenta con un adosado en Fulham para cuando están en Londres al que los británicos, tan dados a los sobrenombres, bautizaron antes de la pandemia como el 'Palacio de los revolcones'. El lugar era escenario de esparcimiento para las Manners y sus 300 mejores amigos de la élite, como lady Kitty Spencer (hija del conde de Spencer), lady Melissa Percy (hija del duque de Northumberland), lady Isabella Innes-Ker (hija del duque de Roxburghe) o los hijos de Bryan Ferry. Todos ellos ya han felicitado a la pareja por el anuncio de su futura boda.

Parece que poco a poco las cosas se han ido calmando y el anuncio del compromiso de la mayor, Violet, con un aristócrata escocés que hasta la fecha solo ha sido conocido por su trabajo va por buen camino. El vizconde de Garnock se crió en el condado de Fife y tras pasar varios años trabajando para marcas de alcohol premium en el mercado estadounidense, decidió fundar junto a unos amigos una empresa que destila un licor muy escocés... salvo porque no lleva alcohol. Las redes sociales de Feragaia, su marca, están repletas de imágenes en las que Bill y su equipo se afanan en la producción y la comercialización de esta esencia escocesa por todo el mundo. El novio, que estudió en Alabama, compagina su pasión por sus raíces con su admiración por la cultura estadounidense (estudió en Alabama).

La hermana de Bill, lady Charlotte Lindesay-Bethune, actual duquesa de Noto, está casada con Jamie de Borbón-Dos Sicilias, hijo de Pedro de Borbón-Dos Sicilias y Sofía Landaluce, duques de Calabria, y nieto del Infante don Carlos. La pareja se casó en 2021 en Palermo, reuniendo a una nutrida representación de la aristocracia europea, entre los que se encontraban el duque y la duquesa de Huéscar, el conde y la condesa de Osorno o el príncipe Mirko de Bulgaria. En la boda de su hermano se espera también algún representante de nuestra nobleza.