La hermética boda de Francesca Thyssen: Venecia, arte y Borja como símbolo de paz
La hija del fallecido barón se casa esta semana con Markus Reymann. Juntos lideran una exposición en la iglesia de San Lorenzo de Venecia, donde podría ser el enlace
Francesca Thyssen presume de anillo de compromiso. (Gtres)
Sabemos que Francesca Thyssen se casa este octubre en Venecia, nos lo confirmó ella misma hace unos meses, sin dar más detalles. La propia mecenas emitió un breve comunicado en el que agradecía las felicitaciones recibidas, sin revelar ni el lugar ni la fecha exacta. La hija del barón Thyssen vive rodeada de un círculo íntimo, de confianza y hermético que guarda sus secretos con celo.
En La Otra Crónica apuntan que podría celebrarse este jueves 9, fecha en la que deberían viajar los invitados más simbólicos: Borja Thyssen y Blanca Cuesta, quienes acompañarán a la hija del barón Thyssen en su día. Su presencia es una manera de tender puentes dentro de un apellido acostumbrado a los titulares familiares.
Iglesia de San Lorenzo, del siglo XVI en Venecia. (EFE/Emanuele Basso)
No ocurrirá lo mismo con la baronesa Thyssen, que podría convertirse en la gran ausente de la celebración. Pese a que las tensiones entre madre e hijo parecen haberse aliviado en los últimos años, y pese a que ha habido cierto acercamiento entre Francesca y Tita, no ha sido suficiente como para compartir boda veneciana. Tita y Francesca Thyssen, viuda e hija del fallecido barón, representan maneras opuestas de entender el legado Thyssen: una desde la exposición mediática y la gestión patrimonial, la otra desde la discreción intelectual y el compromiso artístico. Y sus enfrentamientos han sido crudos y, además, públicos.
Por todo lo publicado y todo lo apuntado por la propia pareja, no será un enlace multitudinario de góndolas y fotógrafos, sino una ceremonia íntima, probablemente rodeada de arte contemporáneo, agua salada y amigos discretos. Si el jueves 9 finalmente resuenan campanas, podría ser que fuera en San Lorenzo, porque hay un detalle que nos hace sospechar: Francesca y su pareja, el artista y comisario Markus Reymann, tienen una exposición conjunta en la citada iglesia. Eso supone que el templo es también un centro de arte y al haberse casado anteriormente, Thyssen no pasará de nuevo por la vicaría (no consta en ninguna publicación que haya pedido la nulidad de su anterior matrimonio).
Borja Thyssen y Blanca Cuesta con Francesca, en 2019. (Cordon Press)
Desde Vanitatis hemos querido comprobar fechas, horas, lugares... Y no ha sido fácil. Como buenos 'detectives' nos hemos sumergido en el laberinto veneciano, entre registros, parroquias y rumores, en busca de la boda más esquiva del otoño. En los registros eclesiásticos y civiles de la ciudad no aparece todavía ningún aviso, ni en San Moisè, ni en San Zaccaria, ni en Santa Maria della Salute, templos habituales para las bodas de alto abolengo y que hemos comprobado.
Sabemos que la muestra Ocean Space, un proyecto dedicado a los océanos, al arte y al sonido de las ballenas liderado por la pareja casamentera ocupa estos dias la iglesia de San Lorenzo, pero en ningún lugar se indica que uno de estos días las visitas estén cerradas al público. Otras iglesias que suelen ser las preferidas por las grandes fortunas que escogen Venecia para casarse, incluso por lo civil, son la Scuola Grande diu San Giovanni Evangelista, el Palazzo Pisani Moretta y la San Giorgio Maggiori, tres lugares que no cuentan por el momento de avisos de cierre para esta semana. El único popular entre 'celebrities' que anuncia un cierre es la Scuola Grande di San Rocco, que este viernes tiene horario reducido y el sábado está cerrado.
Potente mecenas
Como vemos, la discreción es absoluta. En ninguna iglesia confirman o desmienten nada, y el círculo de la pareja mantiene un silencio hermético. Lo que sí sabemos es que Reymann y Thyssen se conocieron trabajando: él dirige el TBA21–Academy, el brazo artístico y ecológico de la fundación de ella, y juntos han recorrido medio mundo impulsando proyectos sobre el futuro del planeta. Si algo les une, más allá del amor, es una devoción por el mar y la belleza.
Hija del barón Hans Heinrich Thyssen y de la modelo británica Fiona Campbell-Walter, Francesca Thyssen-Bornemisza es una de las grandes figuras del mecenazgo cultural europeo. Heredera de una de las colecciones de arte más valiosas del siglo XX, ha sabido transformar su apellido en una plataforma contemporánea que une arte, ciencia y conciencia medioambiental.
Desde la fundación Thyssen-Bornemisza Art Contemporary (TBA21), creada en 2002, ha impulsado proyectos internacionales con artistas, oceanógrafos y pensadores de todo el mundo. Vive entre Viena y Venecia, y ha consagrado su vida a la exploración del vínculo entre la creación artística y el planeta.
Arte y canales
Divorciada del archiduque Carlos de Habsburgo-Lorena, jefe de la casa real de Habsburgo, todo apunta a que la boda de Francesca no será una de esas ceremonias multitudinarias que inundan los canales con flashes y góndolas. Más bien parece un ritual íntimo, probablemente rodeado de arte, agua salada y amigos discretos. Este jueves estaremos pendientes -por si entre el rumor de las mareas y el canto de las ballenas, se oye también el sonido de unas campanas nupciales.
Francesca Thyssen-Bornemisza, fundadora y presidenta de TBA21. (EFE/Mariscal)
Francesca comparte con su pareja su dedicación al arte contemporáneo y la protección del océano, algo que deja su impronta en la fundación. Allí, Markus Reymann es precisamente el director de la Thyssen-Bornemisza Art Contemporary Academy (TBA21–Academy).
Sabemos que Francesca Thyssen se casa este octubre en Venecia, nos lo confirmó ella misma hace unos meses, sin dar más detalles. La propia mecenas emitió un breve comunicado en el que agradecía las felicitaciones recibidas, sin revelar ni el lugar ni la fecha exacta. La hija del barón Thyssen vive rodeada de un círculo íntimo, de confianza y hermético que guarda sus secretos con celo.