Cómo convertir una casa en un hogar

Dime cómo es tu casa y te diré cómo eres. La decoración de las paredes que habitamos dicen tanto de nosotros como la ropa que llevamos o las amistades que frecuentamos. Estar a gusto en casa, con muebles, colores y un estilo que coincidan con la manera de pensar y de vivir que cada persona tiene, es fundamental para mantener una vida equilibrada, y algo en lo que los españoles invertimos cada vez más dinero: el gasto medio anual en España en mobiliario aumenta hasta los 510 euros. La feria Habitalia, que se celebra en la Institución Ferial de Madrid, recoge las últimas tendencias de decoración, para poder convertir nuestras casas en auténticos hogares en los que pasar la vida resulte un placer.

El estilo rural sigue siendo uno de los preferidos para habilitar espacios de lectura o reservados. También es uno de los favoritos para decorar las segundas residencias. Materiales como el barro, la terracota, los azulejos, la piedra, la forja o las raíces arbóreas como la teca son básicos en esta tendencia, en la que los muebles pintados a mano, los murales de azulejos o de teselas de mosaico y las mantas de lana o de patchwork ocupan un lugar central. Líneas a la vez rígidas y estilizadas en tonos verdes, ocres, arenas y azules completan un estilo al que le pegan bastante los velones como método de iluminación.

Entre las nuevas generaciones, el estilo contemporáneo, con sus líneas minimalistas, sigue siendo uno de los favoritos. Los tonos blancos y negros copan la paleta cromática de esta tendencia, con especial apego por los acabados en laca, nogal o ceniza, tanto en salones-comedor como en dormitorios. En estos últimos se puede optar por los acabados en cristal multicolor, para poder combinar con los acabados lacados de los mismos tonos. Para los salones, líneas rectas y depuradas, llegando a arriesgar con estructuras zigzagueantes.

Lo que nunca pasa de moda

En combinación con otros estilos o campando a sus anchas, lo clásico sigue sin pasar de moda. Claves básicas: los espacios envolventes y un gran número de elementos ornamentales. A partir de aquí, un viaje en el tiempo y en el espacio hasta la Inglaterra de los siglos XVII al XIX rodeados de acabados en oro y plata, patinas envejecidas y refinados trabajos de marquetería, sobre todo a partir de maderas nobles. No hay que titubear por miedo al barroquismo: lámparas de estilo neoclásico y de araña son bienvenidas, al igual que los tonos naranjas, verdes y ocres.

El mobiliario juvenil pasa por ser rabiosamente actual, adoptando algunas de las tendencias más destacadas del estilo moderno. Los jóvenes buscan la personalización, con la ergonomía, la durabilidad (economía manda) y la flexibilidad. Conseguir esta individualización de los muebles es fácil con la colocación de fotografías o imágenes en los frontales de los armarios. Las necesidades ‘laborales’ de los adolescentes (estanterías, clasificadores, mesa de estudio, flexo...) deben ser tenidas en cuenta a la hora de escoger la decoración.

El último estilo presente en Habitalia (y por tanto en las tiendas de decoración la próxima temporada) es el denominado aventurero. Los espacios decorados de acuerdo a estas pautas cuentan con acabados de anticuario, artesanía étnica, imitaciones de pieles exóticas, detalles como biombos, hamacas y camas con dosel. Maderas con aspecto poco trabajado y de origen tropical, líneas robustas y una gran inspiración vegetal en tonos beige, tostados, marrones y chocolate completan sus reglas maestras.