Luz, amplitud y minimalismo

En Sant Salvador de Guardiola, un pequeño pueblo situado cerca de la montaña de Montserrat, encontramos una casa diseñada por el equipo de Susanna Cots Interioristes. Destaca por sus espacios diáfanos y por el excelente trabajo realizado para permitir la entrada de luz, la gran protagonista de esta vivienda.

Se ha jugado con diferentes niveles en las estancias, de manera que conseguimos una vista del resto de los ambientes desde cualquier lugar de la casa. Asimismo, resaltamos la importancia que se le ha otorgado a la cocina, ya que se ha creado como núcleo de reunión y comunicación familiar.

En la primera imagen podemos apreciar la puerta de entrada, que es de roble oscuro. En las paredes de la escalera, lejos de crear volúmenes compactos, se ha optado por crear formas geométricas colocando una parte de vidrio, tal y como se ve en la segunda instantánea. De esta manera se consigue más ligereza visual, lo que permite una amplia vista de los distintos espacios. Las paredes son blancas para resaltar la luz, combinadas con tonos grises y pequeñas pinceladas en naranja, para romper con la monotonía del color blanco. Se han abierto todos los espacios para permitir disfrutar de la luz en cualquier rincón de la casa, ya que se han creado unas oberturas superiores (en la cubierta y en distintas zonas) que permiten una entrada de luz continuada.

La tercera fotografía muestra la cocina, concebida como núcleo principal de la casa. En ella destaca la facilidad de movimientos gracias a los amplios espacios que se han dejado pensando en la distribución de la zona de trabajo como si fuera una cadena de producción: cogemos el producto, lo cocinamos y, acto seguido, limpiamos los elementos utilizados. Aun siendo una zona muy amplia, toda esta actividad se realiza en un espacio reducido para poder tener las cosas ordenadas y a mano.

El dormitorio principal, a la vista en la cuarta instantánea, posee baño propio y vestidor. El baño está separado en tres zonas: el plato de ducha y la bañera, el w.c y, por último, el lavamanos, que por la parte trasera realiza la función de tocador. En él se mantiene la idea de los espacios diáfanos.

Creada a partir de líneas rectas, la chimenea, visible en la primera foto, destaca por la simplicidad de su forma, siguiendo el estilo del resto de la casa. Está colocada estratégicamente de manera que permite dar calor al resto de las estancias cuando se enciende. Esto es posible gracias a los espacios abiertos de la vivienda.

Gracias a la amplitud de la cocina, se ha creado un espacio de reunión, un lugar de comunicación con el resto de los miembros de la familia, visible en la tercera fotografía. Cada uno puede realizar una actividad completamente distinta en un mismo espacio sin perturbar a los demás. Al seguir la misma línea de la casa, se ha creído oportuno realizar un gran ventanal con pavés, dando una gran entrada de luz al espacio. Para el mobiliario de ésta se sigue utilizando el lacado blanco y el contrachapado de abedul con el fin de dar calidez al ambiente.