Dime cómo calzas y te diré quién eres: los nuevos líderes llevan deportivas

Siempre se ha dicho que los zapatos definen a una persona. Un calzado viejo, sucio o pasado de moda puede ser fatal para nuestras expectativas en situaciones tan trascendentales como una entrevista de trabajo o una cita romántica. No se trata de una afirmación gratuita: una encuesta acaba de demostrar que el tipo de calzado que usamos y la inversión que destinamos a ellos dicen cosas tan importantes de nosotros como nuestra posesión (o falta) de capacidad de liderazgo.

A pesar de los estereotipos, el tipo de calzado que mejor representa el liderazgo moderno no son los mocasines ni los stilettos, sino las tantas veces denostadas zapatillas deportivas. ¿Cuántos pares tendrán Hillary Clinton o Barack Obama? A juzgar por los resultados expuestos por la compañía estadounidense Mindset Media, especializada en examinar los rasgos de personalidad de los consumidores, bastantes. Al parecer, las personas que compran al menos tres pares de deportivas al año tienen un 51% más de posibilidades de poseer más rasgos de liderazgo que otras personas, según informa la agencia de noticias Reuters.

Cualidades como la capacidad de visión y de generar ideas, además de un estilo a la vez decisivo e inclusivo, son las observadas por el estudio, que ha seguido el panel online de investigación del grupo Nielsen. Lo más curioso de la investigación es que estos rasgos se han hallado en todo tipo de personas, “sin importar la edad, los ingresos o el género”, afirma Lauren Arvonio, portavoz de Mindset Media.

Las respuestas de los 7.500 participantes en la encuesta dan como resultado que, aparte de ese 51% de posibilidades de poseer más liderazgo, los compradores de tres o más pares de deportivas al año suelen ser gente más enérgica y firme (un 50%), además de espontánea (47%).

Los estudios de Mindset suelen ofrecer respuestas curiosas sobre los rasgos de personalidad de los consumidores. Así, por ejemplo, según los datos de otra de sus investigaciones las personas que finiquitan el recibo de su tarjeta de crédito mes a mes son más prudentes -pero también menos modestas- que las que optan por el pago aplazado, y los poseedores de vehículos híbridos, un 78% más creativos y menos dogmáticos que los que optan por automóviles clásicos.