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Los castillos escoceses, un lujo en tiempo de crisis
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Los castillos escoceses, un lujo en tiempo de crisis

Han aguantado el paso de tropas y el devenir de los siglos y ahora se han convertido en una de las principales atracciones turísticas de las

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Los castillos escoceses, un lujo en tiempo de crisis

Han aguantado el paso de tropas y el devenir de los siglos y ahora se han convertido en una de las principales atracciones turísticas de las Islas Británicas. Construidos de firme roca a prueba de recesiones, los castillos escoceses se llenan de nuevo de visitantes. Lo cuenta el semanal británico The Observer: las reservas de alojamiento en estos inmuebles han crecido enormemente y ya están en marcha las del próximo año 2010.

 

La Nochevieja ha sido productiva en el país británico: inmuebles históricos como el Castillo de Dalcross en Inverness-shire, tuvo el cartel de completo durante la celebración del año nuevo. Los clientes dispuestos a pagar 5.700 libras esterlinas por sus cinco habitaciones, tres salas de recepción, dos vestidores, un comedor, bar y cocina no escasean a pesar de la recesión.

 

“Nuestras ventas han aumentado un 36%”, explica a The Observer Harriet Filewood, responsable de una agencia que gestiona más de 100 castillos en Escocia. Filewood no sale de su asombro, porque al igual que otros esperaba que la crisis afectara al negocio del lujo. Sin embargo, no ha sido así y de hecho la demanda está experimentando incluso un repunte.

 

“Este año ha sido tan fuerte, si no más, que cualquier otro año”, remacha Sue Bourne, gerente de otra agencia de alquiler de castillos. “No hemos sentido ningún descenso en la demanda y tampoco hemos tenido que aplicar descuento en las propiedades”. Bourne ve una posible explicación: los que antes viajaban al extranjero ahora prefieren quedarse en la isla.

 

Vivir en un castillo, aunque sea por uno o dos días, es como hacer un sueño realidad para muchas personas. Además, la creciente depreciación de la libra con respecto al euro los está convirtiendo en atractivos también a ojos del turista continental: “Pensamos que las reservas de Europa comenzarán a crecer con el año nuevo debido a la fortaleza del euro”, remata Bourne. Ya lo sabe, en su próximo viaje piense en la fortaleza de los castillos escoceses.

Han aguantado el paso de tropas y el devenir de los siglos y ahora se han convertido en una de las principales atracciones turísticas de las Islas Británicas. Construidos de firme roca a prueba de recesiones, los castillos escoceses se llenan de nuevo de visitantes. Lo cuenta el semanal británico The Observer: las reservas de alojamiento en estos inmuebles han crecido enormemente y ya están en marcha las del próximo año 2010.