Norman Foster expone más de 200 dibujos en su 'casa'

Ilustrar el medio siglo de trayectoria de Norman Foster a través de sus dibujos es el objetivo de la muestra Norman Foster. Drawings 1958-2008 que recoge 200 de los dibujos del arquitecto británico desde sus tiempos de estudiante, hasta su actual preocupación por una construcción ecológica y sostenible. La muestra estará abierta hasta el próximo día 19 en el Ivorypress Art + Books de Madrid, una nave remodelada por él mismo y que se completará con una serie de coloquios -del 15 al 17- donde Foster debatirá junto a otros colegas; además de críticos o artistas.

Norman Foster. Drawings 1958-2008 permite acercarse de una forma certera al corazón creativo de este arquitecto nacido en Manchester en 1935; licenciado en la Universidad de Manchester en 1961 y que fundó Foster + Partners en 1966, estudio desde el que ha recibido más de 500 premios y ganado más de 86 concursos nacionales e internacionales. Foster consiguió en 1999 el Premio Pritzker (el Nobel de Arquitectura); en 2002 el Praemium Imperiale de Arquitectura; y este año ha logrado el Premio Príncipe de Asturias de las Artes.

La exposición guarda una estructura lineal temporal: En un primer apartado. Los años de formación, donde se recogen aquellos dibujos de arquitecturas históricas y contemporáneas realizadas en sus viajes por Europa como estudiante de la Universidad de Manchester y luego como becario de la americana de Yale. En los sesenta, ya establecido en Londres y con su primer estudio, Foster al tiempo que realiza obras residenciales, se ve fascinado por la arquitectura industrial y ofrece su primera innovación con la construcción Fred Olsen, donde cobija bajo el mismo techo a los descargadores del muelle y a los oficinistas.

Los años clave

Los setenta serán sus años de consagración, cuando busque conjugar trabajo y ocio en un espacio humanizado. Y su punta de lanza es el Hongkong Bank, el edificio estrella de Foster que le lanzó al mercado internacional como uno de los mejores arquitectos contemporáneos. En los ochenta, se interesa por "la construcción liviana", la búsqueda de los nuevos materiales, más ligeros, que le sirven para la construcción de aeropuertos, intervención en centros urbanos, es un nuevo tipo de arquitectura cuyo ejemplo es la Torre de la Collserola en Barcelona.

Los años 90 se interesa por el corazón de las ciudades y el poder del diseño para intervenirlas, como convertir en peatonal Trafalgar Square o la reforma que llevó a cabo en el Reichstag de Berlín. Y por último en el apartado 6 se llega al siglo XXI, cuando Foster contempla la responsabilidad social en una aldea global trabajando desde y para todo el mundo.

Entre los dibujos, se incluye medio centenar de croquis iniciales que normalmente se encuentran en los cuadernos de notas que siempre acompañan al arquitecto y que se han traído a la muestra para arrojar más luz sobre el proceso creativo de Norman Foster. Y como piezas centrales que destacan en la exposición se alzan media docena de maquetas de los edificios más significativos de Foster, desde el Hongkong Bank, a la Torre de Caja Madrid, la Torre del Milenio, o la Torre Collserola.