La solución para un rostro más terso

El rostro es nuestra carta de presentación y lo primero que ven los demás, por ello es necesario brindarle todos los cuidados que estén a nuestro alcance. A consecuencia del proceso natural del envejecimiento, la piel pierde su aspecto terso, liso y juvenil dando lugar a signos de flacidez y arrugas. Además, con el paso de los años el tejido adiposo disminuye y, como consecuencia, el rostro adelgaza y pierde firmeza.

Este problema, que afecta tanto a hombres como mujeres, tiene solución gracias al ácido poliláctico. Este tratamiento, que se realiza tanto en la Clínica Planas Clínica Planas de Barcelona como en Planas Day Madrid, actúa mediante microinfiltraciones subcutáneas que atacan las capas más profundas de la piel para conseguir alisar y reafirmar las zonas tratadas, mejorando el contorno facial. Así, está especialmente indicado para aquellas personas que tengan flacidez facial, arrugas profundas o surcos, y también para aquellas personas con cicatrices deprimidas u otro tipo de defectos de volumen en la piel.

El ácido poliláctico estimula la formación de nuevo colágeno y es biocompatible y biodegradable, cosa que hace que no exista riesgo de producir alergia. En el transcurso de cuatro a seis semanas después de su infiltración el rostro tiene un aspecto más juvenil y con más volumen, al devolver parte de la firmeza perdida y del grosor que la piel ha ido perdiendo. 

Para este ritual de belleza se recomiendan entre dos y tres sesiones de una hora de duración aproximadamente. Antes de cada una es necesario limpiar la zona a tratar y para evitar las posibles molestias que puedan crear los 'pinchacitos', al paciente se le aplica una pomada anestésica o frío local. Tras este paso, se realizan las microinfiltraciones propiamente dichas por vía subcutánea del ácido poliláctico y, tras el tratamiento, el paciente puede incorporarse a su vida normal sin problemas. Los días posteriores se recomienda masajear la zona que se ha tratado durante unos quince días y utilizar protección solar en caso de acudir a la playa.

Cabe destacar que una vez finalizado el proceso y, de forma transitoria, puede aparecer un ligero enrojecimiento de la piel, hinchazón o hematoma en la zona inyectada pero se puede camuflar perfectamente con un poco de maquillaje. Además, para conseguir mejores resultados, es recomendable combinar este tratamiento con otras técnicas como los rellenos, la mesoplastia, el Rich, el Vistabel, el PRFG, la radiofrecuencia o el IPL (Luz Intensa Pulsada). La sinergia entre ellos hace que los efectos sean más duraderos.

La eficacia del tratamiento de la flacidez con ácido poliláctico es gradual y se empieza a ver a las cuatro semanas. Transcurrido este tiempo la piel va adquiriendo volumen, firmeza y grosor. La duración de los resultados está en torno a los dos años a partir de la primera sesión. 

*Doctora Esther Gil y Doctora Inmaculada Sánchez Bejo, responsables de los departamentos de Medicina Estética Facial de Clínica Planas y Planas Day Madrid.