Horno de doble cámara y... vaya croquetas
Tenía yo que ir desde Madrid al polígono del Boecillo, en Valladolid, para una reunión a primera hora de la tarde,pero recordaba la recomendación de mi
Tenía yo que ir desde Madrid al polígono del Boecillo, en Valladolid, para una reunión a primera hora de la tarde,pero recordaba la recomendación de mi amigo Fernando S. de R., que me había hablado del Figón de Arevalo, y decidí que había que probarlo. No era decisión fácil pues en el camino hay otros pequeños templos que provocaban la visita, como Riscal en Carbonero Mayor y El Torreón en Tordesillas, pero el espíritu de descubrir un sitio nuevo se impuso.
Tenía yo que ir desde Madrid al polígono del Boecillo, en Valladolid, para una reunión a primera hora de la tarde,pero recordaba la recomendación de mi amigo Fernando S. de R., que me había hablado del Figón de Arevalo, y decidí que había que probarlo. No era decisión fácil pues en el camino hay otros pequeños templos que provocaban la visita, como Riscal en Carbonero Mayor y El Torreón en Tordesillas, pero el espíritu de descubrir un sitio nuevo se impuso.