Caprile: "No participo en Cibeles porque no me interesa ese mundo"

Recién terminada la edición de febrero de MBFW Madrid, Lorenzo Caprile, uno de los diseñadores nupciales más prestigiosos de nuestro país, ha estado este lunes en la redacción de Vanitatis para hacer una radiografía al mundo de la moda y hablarnos, entre otras cosas, de las razones por las que en los 20 años que cumple como firma nunca ha desfilado en la pasarela madrileña. "No participo en Cibeles porque no me interesa todo ese mundo y creo que se le da al desfile más importancia de la que en realidad tiene. El desfile no es un final sino un inicio, una herramienta más para darte a conocer, pero lo importante viene después, y es vender tu colección, fabricarla, entregarla a tiempo, distribuirla...", respondía Caprile con la franqueza y la naturalidad que le caracterizan.

Dejando claro que él no es diseñador sino modisto, según la definición del diccionario de la RAE, Lorenzo Caprile añadió que "la moda española goza de una salud excelente, con el grupo Inditex a la cabeza, que ha cambiado las reglas del juego a nivel mundial", y nombró a otros nombres fundamentales para el futuro de nuestra industria textil, como Mango, el Grupo Lonia (Purificación García, CH, Bimba y Lola), Desigual, Tous, Pronovias, Rosa Clará..., o la zapatería española, con una lista interminable de referencias. Y es que él apenas ha sentido la crisis al tratarse de un taller artesanal y pequeño. ¿Su secreto para mantenerse a flote? Muy simple: "Trabajar, trabajar y trabajar".

Caprile es también el creador de algunos de los trajes de alta costura más fabulosos de los últimos tiempos, desde el rojo que lució Letizia en su primera aparición oficial en Europa como prometida del Príncipe, en la boda de Federico y Mary de Dinamarca o el goyesco fucsia de Doña Elena en el enlace de Victoria de Suecia, hasta el espectacular vestido de paillettes y tul de seda blanco y negro que hizo brillar a Silvia Abascal sobre la alfombra roja de los Goya 2011. Sin embargo, la Princesa de Asturias no ha vuelto a confiar en su savoire faire a pesar del éxito de aquellos diseños. El modisto no sabe la razón y se defiende diciendo que "eso habría que preguntárselo a Su Alteza Real".

Si algo ha dejado claro Lorenzo Caprile en este encuentro digital es que no es ni mitómano ni fetichista, y que cualquier clienta que entre a su taller es bienvenida. Sobre qué le parece que las actrices españolas elijan creadores extranjeros para los Goya en lugar de potenciar la moda nacional, también fue claro y contundente: "Nuestras actrices son mujeres hechas y derechas y tienen absoluta libertad para elegir lo que más les guste. Como nosotros tenemos libertad para ir a ver el cine que más nos gusta". Sin embargo, según su opinión, "cada vez vamos más uniformados y vestimos más tristemente", a pesar de vivir en la era de la información y la globalización.

Por su parte, Caprile se confiesa seguidor del trabajo de Charles James, a su parecer "el mejor modista del siglo XX", y también de los nuevos chicos de Valentino y de Albert Elbaz para Lanvin. Aunque "la principal inspiración es siempre la clienta: su físico, su estilo, su personalidad, sus exigencias...", explica.

Por último, el diseñador también tuvo tiempo para dar consejos, en primer lugar para los que empiezan en este mundillo: "Mi consejo a los que quieren hacerse un hueco es trabajar y ser conscientes de que un desfile no lo es todo. Desfilas y al día siguiente la vida sigue". A las novias que están actualmente buscando su vestido ideal, las invita a mirarse en el espejo: "Lo primero que han de tener en cuenta es su físico. No hay que autoengañarse".

Y a pesar de descartar por completo lanzar una colección prêt à porter, no dudó en decirnos las tres prendas que no deben faltar en nuestro armario: "Un vestidito negro, un buen blazer y unos vaqueros que te sienten de maravilla".