400 euros por probarse un vestido de Vera Wang

Vera Wang es la diseñadora nupcial más venerada por las novias de todo el mundo. Sin embargo, la firma puede haber perdido algunas fans en su China natal, donde la política de su nueva tienda de Shanghái ha causado cierta polémica. Según el Global Times la tienda estaría cobrando 3.000 yuanes (algo más de 370 euros) sólo por probarse los codiciados vestidos. Además, cada cliente tendría asignado un tiempo máximo de 90 minutos para elegir el traje perfecto. Si finalmente se lo lleva, se le descuenta la cuantía de la prueba en el precio final. Si no, sencillamente pierde los 3.000 yuanes.

Tal y como asegura este diario, se trata de la única tienda de Vera Wang con esta 'norma', lo cual ha molestado enormemente a los clientes chinos, que dicen recibir peor trato que otros compradores internacionales. Según la firma, se trata de una "forma de proteger la propiedad intelectual de sus diseños", y esta política se suma a otras prohibiciones como tomar fotos en la tienda, una regla habitual en las boutiques de lujo del país.

The Huffington Post justifica la decisión de Vera Wang con su deseo de limitar la entrada de turistas curiosos y proteger la intimidad de los clientes serios. Sin embargo, lograr el equilibrio es muy difícil. El año pasado, Dolce&Gabbana se vio envuelta en una polémica similar cuando un guardia de seguridad de Hong Kong prohibió a un fotógrafo tomar imágenes de la tienda desde la acera. El resultado fue una protesta que congregó a cientos de personas en la puerta.