Es noticia
Menú
Ivanka Trump, 'la Empecinada': abre otra tienda pese a sus fracasos empresariales
  1. Estilo

Ivanka Trump, 'la Empecinada': abre otra tienda pese a sus fracasos empresariales

A la hija del presidente de Estados Unidos le cuesta abrirse hueco en el complicado sector textil. Ahora lo vuelve a intentar con otro negocio. ¿Éxito rotundo o fracaso estrepitoso?

Foto: Ivanka Trump quiere volver a ser una empresaria de moda.
Ivanka Trump quiere volver a ser una empresaria de moda.

El empeño de Ivana Trump por reinar con orgullo en su imperio fashionista no está siéndole fácil. En marzo tendrá que testificar por una querella interpuesta por la firma de zapatos Aquazzura, que le acusa de plagiar el popular diseño de la marca Wild Thing. Este es el último –que no único– bache en su torpe carrera para hacerse un hueco en el mundo de la moda. La hija de Donald Trump abrió en 2007 una tienda de joyas en el Upper East Side neoyoquino, un negocio con los tinte propios de la serie de televisión 'Gossip Girl' que se reubicó en el Soho neoyorquino cuatro años después para terminar cerrando en el año 2015.

Queda claro que ella lo intentó. De hecho, también abrió una tienda en China que la llevó a cerrar tiempo después, al igual que aquella miniboutique que abrió en el edificio familiar: la Trump Tower. Por si fuera poco, la controversia volvió a llamar a su puerta cuando aprovechó la entrevista que Trump y su familia concedían al programa '60 minutes' para promocionar sus joyas. Al día siguiente de la aparición, los periodistas de moda recibían un email en el que la silueta del brazalete dorado, valorado en más de 10.000 euros, acompañaba a la fotografía de Ivanka durante la entrevista.

placeholder Ivanka Trump, un ejemplo de naturalidad
Ivanka Trump, un ejemplo de naturalidad

Las redes sociales se encendieron al ver en este gesto un intento de hacer negocio de la mano de la política. Por su parte, los medios recordaron a los Trump que la cláusula de emolumentos de la Constitución estadounidense prohíbe a los presidentes y a sus familias sacar provecho económico gracias su posición. Pero todavía hay que sumar otro fallo a esta historia plagada de fracasos. Los almacenes Nordstrom anunciaron que dejarían de vender la marca ante el imparable descenso de sus ventas, una acción que, como no podía ser de otra forma, fue criticada por su padre en su polémica cuenta de Twitter. El 8 de febrero compartió el siguiente tuit: “Mi hija Ivanka ha sido tratada de forma desleal por Nordstrom”. Sears, Burlington, Neiman Marcus, Kmart y Shoes.com siguieron el ejemplo de esta empresa textil.

La ventaja con la que cuenta Ivanka es que, aunque las grandes cadenas e incluso el público le den la espalda, su padre jamás lo hará. Por eso ha abierto una pequeña tienda en la Trump Tower en la que vende una selección de diseños de su colección, que ofrece ahora una franja de precios más asequibles. Aunque Ivanka ya no se encarga de las operaciones diarias de la firma para trabajar junto a su padre, estando Abigail Klem a la cabeza de la marca, el tener que abrir una tienda en la famosa torre ha tenido que pasar por las manos de la Trump Organization, de la que se encargan los hermanos de Ivanka, Donald Trump Jr. y Eric Trump.

Pero todavía hay más chicha en este cuento de terror. Poco después de reunirse con el presidente de China Xi Jinping, Ivanka se aseguró dos patentes de sus firmas en el mercado asiático. Dichas licencias las había solicitado un año antes y la prensa se apresuró a acusarla de estar beneficiándose de su posición. Mientras que el mercado estadounidense parece darle la espada, las ventas de la marca en China siguen creciendo.

placeholder
U.S. presidential advise

Al abrir esta pequeña tienda en la Trump Tower, la firma lucha por diversificar su modelo de negocio y por no depender ya de los grandes almacenes que, como queda patente, no la apoyan. Mientras tanto, Ivanka intenta ganarse al público millennial apostando por firmas como Zara en sus apariciones públicas. Los looks por los que apuesta en sus viajes tienen buena intención, pero alguien asesora mal a la pobre Ivanka, pues sus elecciones terminan siendo siempre peligrosamente superficiales.

Su viaje a India duró dos días y medio, durante los cuales lució seis looks. Comenzó por apostar por la chaqueta Sylvia de la firma americana Tory Burch, que si bien emulaba la estética hindú, no dejaba de llevar el sello de una firma americana. Al día siguiente, lucía un vestido de la marca canadiense Erdem. Segundo error. Aunque Ivanka planeaba lucir por la noche un diseño confeccionado por la diseñadora india Neeta Lulla, la preferida de las estrellas de Bollywood, prefirió optar por otro modelo de Tory Burch. “Si la intención de Ivanka era rendir homenaje a nuestra cultura con sus looks, el tributo tendría que haber sido auténtico. Habríamos preferido verla lucir un diseño hecho a mano en nuestro país que un modelo procedente del suyo. El intentar unir estas realidades hace que sus gestos sean superfluos”, declaró Bandana Tewari, directora de 'Vogue' India.

Ivanka sigue intentando, pese a todo, hacerse un hueco en la moda. Sin embargo, como siga así, va a terminar siendo uno de los mayores fracasos fashionistas de la historia aunque, no nos engañemos, en realidad es complicado que la historia de la moda siquiera la contemple. Ya veremos cuánto le dura su tienda en la torre familiar.

¿Tienes un dispositivo móvil iOS o Android? Descarga la APP de Vanitatis en tu teléfono o tablet y no te pierdas nuestros consejos de moda, belleza y estilo de vida. Para iOS, pincha aquí, y para Android, aquí.

El empeño de Ivana Trump por reinar con orgullo en su imperio fashionista no está siéndole fácil. En marzo tendrá que testificar por una querella interpuesta por la firma de zapatos Aquazzura, que le acusa de plagiar el popular diseño de la marca Wild Thing. Este es el último –que no único– bache en su torpe carrera para hacerse un hueco en el mundo de la moda. La hija de Donald Trump abrió en 2007 una tienda de joyas en el Upper East Side neoyoquino, un negocio con los tinte propios de la serie de televisión 'Gossip Girl' que se reubicó en el Soho neoyorquino cuatro años después para terminar cerrando en el año 2015.

Moda
El redactor recomienda