Fin de año viajero: márchate a cenar lejos de Madrid (o de casa) en Nochevieja

La Nochebuena es casera, aunque este año hayamos trazado el plan de cenar en un restaurante, pero la Nochevieja es más de liarse la manta a la cabeza y echarse a la mar aunque luego nos quedemos en tierra. Como imaginamos un fin de año viajero, no podemos sino pensar en un cotillón y unas uvas lejos del hogar, en un escenario de lujo. El último día del año (y el primero si puede ser) pásalo aquí. En Granada, Toro (Zamora), Lanzarote, la Rioja Alavesa o Solares (Cantabria). No se puede pedir más.

1. Hotel Vincci Albayzín, en Granada

Perderse por el Albaicín (soñado), calle arriba calle abajo, asomarse al mirador de San Nicolás y volver a exclamar de asombro al ver la Alhambra pintando el paisaje con la Sierra Nevada de fondo. Puede ser antes o después, ese día o al siguiente, de cenar en el hotel Vincci Albayzín, que precisamente está inspirado en la maravillosa ciudad palatina andalusí. Patio interior con fuente, azulejos típicos, columnas de marmol y grandiosas lámparas; así es.

El menú: copa de bienvenida, aperitivos en mesa (saquito de gambón con pesto de queso crema y aceitunas negras), crema de centollos, atún rojo con lasaña de verduritas naturales y solomillo de ternera con láminas de patatas a la crema, más todos sus alrededores. ¿De postre? Una alegria: tiramisú de pera y crema de mascarpone. Precio: 110 euros. Menú infantil, 30 euros.

Dónde: Carrera de la Virgen, 48. Granada.

2. Hotel Princesa Yaiza, en Lanzarote

A la orillita del mar te espera el Princesa Yaiza, un cinco estrellas de lujo con todo el aire canario, anclado en la lanzaroteña localidad de Playa Blanca. El hotel ha preparado un espectáculo pirotécnico y varias opciones para darle alegría al cuerpo: cóctel y gran cena de gala de Fin de Año con 7 pases de maridaje de vino y champán, gran cena de gala especial en La Plaza con Champagne Bar y música en vivo, y gran buffet de gala para recibir el año nuevo. Después vendrá la fiesta con cotillón (también para los niños). Para el día siguiente, el primero, no podía faltar el baño en aguas atlánticas, concretamente en Playa Dorada.

El menú: encurtidos de verduras y cremoso de aguacate, canelón de trufa y foie de rabo de toro, merluza de la Graciosa, guiso marino con plancton y cremoso de apionabo, sorbete de uva y mora (en el intermedio), y cerdo ibérico de bellota lacado con crema de queso vulcano, calabaza y patata. Al final, un tesoro: oro y chocolate, semifrío de lima, tierra de zanahoria y coulis de frambuesa, más petit four. Precio: desde 244,50 euros. Con alojamiento y desayuno, 400 euros.

Dónde: Avenida Papagayo 22. Playa Blanca. Yaiza (Lanzarote).

3. Hotel Viura, en Villabuena de Álava

La Rioja Alavesa, con todo su paisaje vitivinícola y su promesa de buenos caldos, es un escenario de lujo para esta despedida. Su emblemático hotel Viura, esa virguería arquitectónica hecha de cubos superpuestos y grandes cristaleras por donde, avasallante, entra la luz, abre sus puertas para vivir esta mágica noche en una de sus 33 habitaciones, con vistas a la sierra de Cantabria, y también para cenar un menú especial de Nochevieja que irá seguido ya en 2018, toma nota, de un brunch. No falta el cotillón ni la barra libre y el DJ.

El menú: en el bar, dos exquisitos aperitivos con champán. En el restaurante, cigala asada sobre berza de asa de cántaro, jugo de sus cabezas y ensalada de vaina, merluza de anzuelo sobre crema de hongos y solomillo de vaca gallega asado al carbón de encina. Y no está todo. De postre, castañas, sabores de invierno y turrón. Precio: 175 euros. Menú infantil, 20/30 euros. La noche en habitación doble Deluxe con desayuno y menú de Nochevieja para dos, desde 625 euros.

Dónde: Herrerías s/n. Villabuena de Álava (Álava).

4. Valbusenda, en Toro (Zamora)

Seguimos entre viñedos, ahora en un 'wine spa' en toda regla, lujo al por mayor en Castilla y León. Valbusenda es un complejo enoturístico que se alza en otra de las mecas del vino patrio, Toro, a orillas del río Duero y en plena ruta del románico, que siempre es un plus. Te puedes quedar a cenar, dormir, desayunar y disfrutar de su spa y su espacio fitness. Precio: desde 330 euros

El menú: encaje de chipirón y camarones entre los aperitivos, velouté de cigalas con papada asada de entrante, mero sobre emulsión de manzana verde y pilpil de bacalao ajoarriero y cochinillo confitado. De prepostre, sorbete de hierbabuena con gelée de mojito y crumble de limón, y de postre, texturas de chocolate y AOVE. Precio: 210 euros.

Dónde: Carretera de Toro a Peleagonzalo. Zamora.

5. Balneario de Solares, en Cantabria

La verdad es que el fin de año también pide balneario y mucho mucho relax. Por eso nos hemos venido al de Solares, un clásico del Cantábrico, muy cerquita de Santander y junto al Parque Natural de Cabárceno. El hotel Castilla Termal Balneario de Solares, muy familiar (cuenta incluso con balneario infantil con aquagym y juegos para ellos, además de cine y ludoteca) tiene una promoción especial para este día que incluye cena y cotillón con uvas, alojamiento, desayuno bufé y acceso a la piscina termal (desde 271 euros).

El menú: empieza con una 'alegoría a nuestra tierra' (tosta crujiente con anchoa selecta, queso pasiego recubierto de vino tostadillo y mousse de erizo de mar), sigue con bogavante sobre tartar de tomate, suave crema de mostaza y perfume de cítricos, un sorbete a su manera y el carré de cordero. Para coronar, una crème brûlée (tierra de chocolate y salsa de uvas frescas con helado de canela).

Dónde: Avda. Calvo Sotelo 13. Solares (Cantabria).

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