ARCO: los locales más cool de Madrid donde se mueve la gente del arte

Nos ponemos en clave Warhol, que es algo de lo que se cuece ahora en Madrid (CaixaForum) para dar la bienvenida, a todo color y con espíritu pop art, a la feria de arte contemporáneo más dicharachera de nuestros contornos. Y lo hacemos trazando la ruta off de ARCO; esto es, de los locales más arty donde te podrás encontrar a la gente de este universo tan singular, donde tan pronto asoma una Marilyn a lo Roy Lichtenstein como una ninfa encantadoramente perversa de las pintadas por Balthus (Fundación Mapfre). Esta ruta por locales (o menús) con arte en Madrid empieza a la sombra del Museo Reina Sofía, cómo no.

NuBel, noches de baile after-ARCO

Tal cual, el restaurante del edificio Nouvel del Reina Sofía acoge este miércoles 21, viernes 23 y sábado 24, de 23 a 2:30 h, su L'Art Danse Club, pura distensión y libertad, con el chef Javier Muñoz-Calero a los mandos gastronómicos, una zona lounge equipada con Void Acoustics y una terraza desde la que se contempla el 'Brushstroke', la pincelada urbana de Lichtenstein. Luego ya vienen los amos de la cabina, que serán los encargados de poner en danza al personal con sus cócteles (esta vez no los de beber): Vane Madrid, Álvaro Cabana y Diskoan. Si te haces con un flyer en el propio NuBel o en el pabellón de Ifema, la primera copa es gratis (de 23 a 00 h). El interiorismo, cosa de Paula Rosales, es todo lo artístico que tiene que ser un espacio así.

Más allá de la música y el movimiento de caderas, hay aperitivos españoles de siempre, snacks para compartir, sección Raw, pescados y carnes, hamburguesa NuBel o arroces. En concreto, taco de cocktail de cangrejo y chutney de mango, falafel de tirabeques con yogur y menta, poké de salmón o taco de lomo bajo de vaca curado y patatas cristal. De postre, soufflé-taza de chocolate negro y chantilly.

Dónde: Argumosa 43.

Arzábal, en el museo y en el Retiro

La taberna más sofisticada de los Madriles ha querido dar un toque artístico a su carta, a propósito de ARCO, y lo ha hecho con un menú que se podrá tomar del 21 al 26 de abril, el tiempo que dura la feria. Consta de una terrina de foie, ensalada de perdiz en escabeche ligero, lubina asada sobre ajoblanco, hinojo y estragón, carrillera de cerdo ibérico con verduras de temporada. Y de postre, torrija con infusión de cítricos y helado. Todos los platos llevan ron Zacapa, el destilado de Guatemala que respalda la idea. Estarás en zona de musas; ten cuidado. Precio: 45 euros.

Dónde: Santa Isabel 52 y Menéndez Pelayo 13.

El Velázquez 17, un toque francés

Otro restaurante en el tour gastronómico más arty de estos días por la capital, donde se dan cita amantes del arte y el diseño, es El Velázquez 17, un espacio de suelo también ajedrezado, muy floral y cierto aire francés, en cuyo menú, también maridado con el citado ron, consta de tequeños, croquetas de maíz con nata criolla y empanadas de carne con pico de gallo, más un segundo a elegir entre tacos de pollo crujiente con guacamole, nata, tomates, lechuga, picante y tortillas o arroz chaufa con secreto ibérico. Para poner la guinda a este pastel, fondant de chocolate con sal maldon. Y un hurra por... ¡Mariano Fortuny!, que nos contempla desde el Prado. De los que crean parroquia (de las bellas artes, por supuesto).

Dónde: Velázquez 17 (era fácil).

Séptima, con vistas sobre la ciudad

Al final siempre terminamos en un Only You -sofisticación manda-. Ahora porque después de ARCO, de ese empacho de arte último, aún nos queda sitio para un menú tipo brunch al estilo neoyorquino en su restaurante Séptima. Sobre la mesa, ensaladas de alrededor del mundo, embutidos, ahumados, pasta, risottos, antipasti y platos calientes recién salidos del showcooking. A estas emociones culinarias, barra de ostras de estreno incluida, se suman las vistas desde el ático del hotel. Antonio López, que estás en el cielo (del arte). Pura figuración. Precio: 39,50 euros.

Dónde: Paseo de la Infanta Isabel 13.

Luzi Bombón, para la gente guapa

Esta moderna brasserie enfilando el paseo de la Castellana, en la que, por cierto, los jueves, viernes y sábados hay música, se pone igualmente artística con el diseño de un menú y un postre para la ocasión. Entre los primeros, ensalada de endivias a la parrilla con mojama de bonito casero y vinagreta de mostaza o una crema de espárragos y puerro con berberechos (a elegir). Entre los segundos, pluma ibérica con melocotón y moras o dorada a la parrilla con salsa ligera de espinacas y trinxat. Y de broche de oro, cremoso de chocolate o compota de manzana, crumble y helado de vainilla. Es tan de diseño que es parada obligada de la gente cool y guapa. Precio: 30 euros.

Dónde: Castellana 35 (entrada por Rafael Calvo).

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