Cómo convertirse en el festival preferido de los cachorros de la jet: reguetón y solidaridad
El Share Festival, que se celebra este fin de semana en Barcelona, cuelga el cártel de 'sold out', se llena de niños bien y reparte cooperación entre sus asistentes. El cartel, definitivo
El viernes por la tarde, un grupo de pequeñas adolescentes salía de uno de los clubes de hípica más elitistas de Barcelona para irse a casa y arreglarse para su primer festival de música. No muy lejos, otro grupito hacía lo propio tras salir del club de tenis de similar nivel. Todos se dirigían al Share Festival, una cita musical que tras seis ediciones ha logrado un hito: convertirse en el favorito de los más jóvenes, en especial de los cachorros de la jet.
¿Cómo se consigue eso? El responsable del festival, Stefano Maccarone, habla con Vanitatis y asegura que la capacidad económica o el origen social de los asistentes no es algo en lo que ellos se hayan fijado nunca. Lo que buscan es concienciarlos a través de la música.
Los responsables de la cita rebuscan en las listas de Spotify y Youtube para saber qué es lo que gusta más a los adolescentes más imberbes y ofrecérselo en el Share. Aunque el verdadero objetivo de la cita no es la música, sino el de concienciar a la juventud sobre solidaridad, ecología, feminismo y distintos valores sociales que ellos, esos jóvenes, ya llevan en su mochila.
"Muy concienciada"
“Por mucho que se diga, esta generación está muy concienciada y nos da mil vueltas en todo”, declara Maccarone, “la idea del festival nació de transmitir un mensaje de inclusión, sostenibilidad y solidaridad que tiene sentido si se dirige a los más jóvenes, que son quienes más conciencia tienen”. Con los años se dieron cuenta, sin embargo, que solo con mensajes no llegaban al público deseado, así que emprendieron el camino de búsqueda de la fórmula mágica: la música. “Buscamos un cartel para atraer a los más jóvenes y poder trasmitir así esos valores de los que hablo”, recuerda Maccarone.
Y bingo, la cosa funcionó de tal manera que a dos días de la cita ya casi no quedan entradas. El cartel de ‘sold out’ se colgó en casi todos los espacios desde hace tiempo porque los artistas que visitan el festival rompen moldes. Hablamos de nombres que seguramente muchos lectores no habrán escuchado en su vida: Myke Towers, Jhayco, JC Reyes, Prox… Sí, eso es lo que escuchan nuestros adolescentes, ese ritmo repetitivo y caribeño llamado reguetón que arrasa.
Aitana y Lola Índigo
Además, cuentan con nombres patrios como el de Aitana y Lola Índigo, lo que ha convertido el cartel de este año en el primero de España en tener más mujeres que hombres. Es más, señala Maccarone, el domingo, el último día, sólo hay mujeres. Son Aitana, Chanel, Aida Redru, Vicco, Lia Kali y Belén Aguilera, nombres por los que se pirran las adolescentes y preadolescentes que tienen que ir, si son menores de 16, acompañadas de un adulto.
El año pasado fue el gran paso adelante de la cita: Share Festival Negrita cerró su edición con un total de 34.000 asistentes en dos días, consolidándose así como uno de los festivales de referencia para los jóvenes que se celebra en la ciudad de Barcelona durante la temporada de verano. Dellafuente, Quevedo, Morad, Bizarrap y Aleesha fueron algunos de los grandes reclamos del cartel.
Solidaridad
Entre las acciones solidarias llevadas a cabo el año pasad y que pretenden repetir e incluso aumentar en esta edición, en colaboración con ONG Árboles para siempre, se plantaron 3.000 árboles para compensar hasta dos veces las emisiones de CO2 que produce el evento y dejar una huella ecológica limpia. En colaboración con EnCantados, se tradujo el primer concierto de cada día en lengua de signos, que este año estarán presentes en el concierto de Aitana.
En total, hasta la fecha, algunas de las acciones destacadas son las de enviar 57.037 vacunas contra la polio y otras enfermedades endémicas a niños que viven en situaciones de emergencia en países africanos a través de Médicos Sin Fronteras Barcelona y Unicef Barcelona, gracias a TikTok y Bumble. Se han entregado alimentos y material escolar a 8.966 niños que viven en situaciones de emergencia en Barcelona a través de la Cruz Roja Barcelona. El festival ha donado 8.400 entradas gratuitas para colectivos desfavorecidos para asistir (equivalentes a un valor económico de 302.000 euros), y se ha escolarizado a 1.651 niños refugiados a través de ACNUR Barcelona.
El Share Festival se ha convertido en referente y desde el año pasado, además, forma parte de la gira de festivales dirigidos al público joven que organiza la marca Negrita en verano alrededor de España. Santander, Salamanca y Alicante son otras de las ciudades que convocan a los más jóvenes de la casa para convertirse, con toda probabilidad, en el primer festival al que acuden en sus vidas. Con nervios y muchos cambios de ropa y maquillaje, las adolescentes de las que hablábamos al principio de este artículo entraban en el recinto con el corazón en la mano. Juventud, divino tesoro.
El viernes por la tarde, un grupo de pequeñas adolescentes salía de uno de los clubes de hípica más elitistas de Barcelona para irse a casa y arreglarse para su primer festival de música. No muy lejos, otro grupito hacía lo propio tras salir del club de tenis de similar nivel. Todos se dirigían al Share Festival, una cita musical que tras seis ediciones ha logrado un hito: convertirse en el favorito de los más jóvenes, en especial de los cachorros de la jet.