Las mejores formas de cuidar tu contorno de ojos
Son el espejo del alma y los primeros en delatar el paso del tiempo. Ojeras, patas de gallo, hinchazón… Nunca una zona tan pequeña te trajo tantos quebraderos de cabeza. Hasta hoy
Las razones por las que #1es tan sensible a la edad son varias. La primera es que su piel es mucho más finita que la del resto del rostro, por lo que se presenta como más frágil y chivata ya que deja entrever fácilmente lo que esconde la dermis. La segunda es que está sometida a un ejercicio constante pues, de media, parpadeamos unas 10.000 veces al día. Pero, según los expertos de Shiseido, ahora también hay que añadir un tercer factor: nuestros hábitos respecto a las pantallas. Ellos afirman que el 90% de las mujeres que rondan la treintena pasan más de 10 horas delante de un dispositivo. Y las consecuencias son que al fijar la vista, los ojos y los músculos de la zona se mueven menos, reduciendo los parpadeos a 7,5 veces por minuto (justo la mitad de lo habitual). Esto aumenta la rigidez y al estar concentradas, irremediablemente fruncimos el ceño, lo cual no ayuda pues tampoco favorece la circulación ya que, al haber menos movimiento, esta se ralentiza. ¿El resultado? Aumenta el aspecto tanto de las ojeras como de las bolsas. Te descubrimos las posibilidades para que no pierdas de vista tu rutina de contorno de ojos idónea.
Cremas
La opción más tradicional pero no por ello menos efectiva. Su textura contundente es idónea para controlar la aplicación, incluso para las menos mañosas. Los expertos de Avène recomiendan acompañar su uso con un masaje para mejorar la circulación, dos veces al día. La clave es extender la fórmula presionando los puntos de tensión (es donde se acumula la energía) y que son a la altura de la nariz, en la parte ahuecada del ojo y en la comisura externa sobre la parte superior de los pómulos.
1. Cuidado Desfatigante Contorno de Ojos Les Essentiels, de
Específicos
Los principios de los cuidados faciales se diversifican en la rutina específica para la mirada con sérums o concentrados, rellenadores e incluso mascarillas. Tú eliges la textura de los productos teniendo en cuenta que las opciones son casi infinitas (ya hay que incluso tratan las pestañas) y prestando atención a cómo cambia el modo de aplicación (algunos se extienden sobre el párpado, con dosificadores que también descongestionan) y a que el orden de la rutina se modifica.
1. Eye-Opening Serum Blue Therapy, de
Parches
Hay muchas posibilidades. Prueba los que se inspiran en la técnica no invasiva de iontoforesis, que utiliza las microcorrientes (necesitan un gel conductor) para potenciar la permeabilidad con una penetración más rápida de los activos, mientras reduce la profundidad de las arrugas. Otra opción que está muy de moda en la cosmética coreana son los parches de hidrogel, que ayudan a descongestionar y reducir las bolsas gracias a su efecto oclusivo (lo ideal es meterlos en la nevera para potenciar sus efectos). La tercera opción de parches son los realizados en tejido que suelen contener altas concentraciones de activos, lo que les convierte en aliados perfectos para un efecto inmediato.
1. Gold Black Pearl Eye Mask, de
Gadgets
La tecnología cosmética te entrará por los ojos con estos dispositivos que descongestionan, drenan, estimulan y rejuvenecen tu mirada. Los hay que combinan tecnología led (controla las diferentes longitudes de onda para estimular a los fibroblastos, regenerar y homogeneizar el tono) con electroestimulación a través de microcorrientes de baja intensidad (ayudan a ganar firmeza). También los hay que realizan varias modalidades de masajes oculares adaptándose a las necesidades de cada usuario y, por último, buscan los elementos limpiadores con programas específicos para la mirada que, a través de pulsaciones, favorecen el drenaje linfático de las ojeras.
1. Dispositivo Time Control+, de
Otros problemas que te envejecen
La piel del contorno de los ojos es cinco veces más fina que la de la cara, que a su vez es cinco veces más fina que la del cuerpo. En la epidermis, la capa cornea, responsable de la barrera protectora, es muy delgada y está continuamente sometida a agresiones. Y la dermis tiene menos fibras de colágeno y elastina, es más elástica y ligera que el resto de la piel. Por todo esto hay que prestar especial atención a esta zona tan delicada. Para elegir la mejor solución, identifica tu problema:
Patas de gallo. En el contorno de los ojos hay 22 músculos y 14 de ellos se activan al parpadear. Parpadeamos unas 10.000 veces al día, de ahí que nos salgan estas arruguitas alrededor del globo ocular.
Bolsas. Debajo de los ojos hay unas almohadillas o 'septum' con una membrana cutánea que contiene la grasa orbitaria. Con los años, el exceso de peso, la retención de líquidos o los problemas de visión, la almohadilla se relaja y produce las bolsas.
Ojeras. Es una pigmentación excesiva de la coloración del párpado inferior. Pueden ser en un tono marrón por producción excesiva de melanina, que es más común en la raza blanca y por causas genéticas. O en un tono morado, por la dilatación de los capilares debido a la congestión circulatoria.
Hinchazón. Un problema con la microcirculación de la zona puede producir edema o hinchazón. El drenaje de los vasos linfáticos del contorno de ojos es activo durante el día por la actividad de los 22 músculos al gesticular, pero por las noches hay falta de movilidad y disminuye la capacidad drenante, por eso muchas personas se levantan con los ojos hinchados.
Las razones por las que #1es tan sensible a la edad son varias. La primera es que su piel es mucho más finita que la del resto del rostro, por lo que se presenta como más frágil y chivata ya que deja entrever fácilmente lo que esconde la dermis. La segunda es que está sometida a un ejercicio constante pues, de media, parpadeamos unas 10.000 veces al día. Pero, según los expertos de Shiseido, ahora también hay que añadir un tercer factor: nuestros hábitos respecto a las pantallas. Ellos afirman que el 90% de las mujeres que rondan la treintena pasan más de 10 horas delante de un dispositivo. Y las consecuencias son que al fijar la vista, los ojos y los músculos de la zona se mueven menos, reduciendo los parpadeos a 7,5 veces por minuto (justo la mitad de lo habitual). Esto aumenta la rigidez y al estar concentradas, irremediablemente fruncimos el ceño, lo cual no ayuda pues tampoco favorece la circulación ya que, al haber menos movimiento, esta se ralentiza. ¿El resultado? Aumenta el aspecto tanto de las ojeras como de las bolsas. Te descubrimos las posibilidades para que no pierdas de vista tu rutina de contorno de ojos idónea.
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