Día Mundial del Sueño: los trucos de Jennifer Aniston y Kim Cattrall para dormir bien
El insomnio asalta a muchas de las famosas que acaparan la atención mediática. Repasamos qué están haciendo mal y qué podrían hacer para mejorar su sueño de una santa vez
Caer en los brazos de Morfeo no es algo sencillo para un gran segmento de la población tanto aquí (según los últimos estudios, uno de cada cinco españoles sufre una alteración del sueño) como en EEUU. El consumo de fármacos contra el insomnio, que no para de crecer a ambos lados del Pacífico, da buena fe de ello. ¿Pero cómo se las apañan nuestras celebrities favoritas para superar estos trastornos y quedarse roques de una vez por todas? Aquí van sus consejos (y los nuestros).
Kim Cattrall
Su insomnio crónico fue el responsable de que en 2016 tuviera que abandonar la representación que protagonizaba en el Royal Court de Londres y volar hasta EEUU para ponerse en tratamiento. Kim describió en una entrevista radiofónica aquellas 48 horas sin dormir como un tsunami, como si sintiera “un gorila sentado en el pecho” y tuviera que decidir entre su cordura o su trabajo. Hasta ese momento, su relación con la almohada había tenido altibajos y achacaba sus problemas al jet lag, tomar demasiado té o a la menopausia.
Pero la experiencia londinense supuso un punto de inflexión, se acabaron las excusas y Kim decidió buscar ayuda sometiéndose a una terapia cognitiva para conectar consigo misma y reaprender a dormir. Esta terapia psicológica es la de referencia para tratar el insomnio crónico y permite reeducar los malos hábitos y aprender a dormir de nuevo. Bien hecho, Kim, y dulces sueños.
Demi Lovato
Ella misma lo contaba en la MTV: “Realmente no me di cuenta de que estaba enferma. Pensé que escribir siete canciones en una noche era normal. Pensé que quedarse despierta hasta las 5:30 de la mañana era normal”. Pues no, Demi, no es normal, y el insomnio es la consecuencia directa de tanto horario exótico. Dentro de cada uno de nosotros hay un reloj interno que guía nuestro ritmo circadiano y es el que nos indica cuándo comer, cuándo despertarnos y cuándo dormir. Hay que hacer caso a ese reloj y no desbarajustarlo o si no, pagaremos las consecuencias en forma de noches en blanco y kilos de más.
¿Cómo respetar nuestro ritmo interno? Pues adquiriendo una rutina saludable en el sueño con unos horarios lógicos y rutinarios, que, desde luego, no implican acostarse a las 5:30 de la mañana. ¿Que no hubiera nadie a tu alrededor a esas horas no te dio una pista, Demi? ¿No te preguntaste “dónde estará todo el mundo”? Durmiendo, Demi, estaban durmiendo.
Jennifer Garner
En 2015 Jennifer Garner y Ben Affleck dejaron de vivir juntos. En 2016 seguían sin firmar los papeles del divorcio y yendo a terapia de pareja, pero parece que las cosas no apuntaban bien y Jennifer se lo barruntaba. ¿Cuándo? Pues por la noche metida en la cama. Así lo contó en 'Vanity Fair': “Cuando no puedo dormir, y no soy alguien que normalmente tenga ese problema, pero me ha pasado en el último año, y necesito algo para desconectar mi cerebro, veo a Tina Fey y Amy Poehler. Dios bendiga a esas chicas”.
Lo que le pasó a Jennifer en 2016 es un clásico de la mente femenina (para algo las mujeres sufren más insomnio que los hombres): el llevarse los problemas a la cama, lo que hace imposible el descanso. Una de las causas más frecuentes de insomnio es el estrés, porque hace que nuestro sistema nervioso simpático, que reduce su actividad al acostarnos, esté siempre alerta y eso impide que nos quedemos dormidos. ¿La solución? Relajarnos. ¿Cómo? Con yoga, con mindfulness, con vídeos graciosos de Tina Fey... o firmando los papeles del divorcio.
Jennifer Aniston
Atención al consejo que dio en el 'Huffintong Post', porque tiene más razón que una santa: “Mi consejo [para combatir el insomnio]... es dormir con el teléfono a una distancia mínima de cinco pies de mí. Eso me ayudó muchísimo”. Para poder conciliar el sueño necesitas melatonina (sí, esa misma que te compras en la farmacia para combatir el jet lag). Guiado por nuestro ritmo circadiano interior (ese que Demi se salta a la torera), el cerebro empieza a secretar melatonina cuando la luz del día empieza a decaer…
Pero la luz que emite el móvil (y el que dice el móvil, dice la tablet) interfiere en ese mecanismo natural, inhibe la secreción de melatonina y así es imposible pegar ojo. Haz caso a Jennifer, destierra tu teléfono del dormitorio y deja de usarlo, al menos, una hora antes de irte a la cama.
Yennis Cheung
La que fue chica Bond en 'Skyfall' es una verdadera pro en acumular noches en blanco. Como ella misma declara en el 'Daily Express', no duerme bien desde que tenía 13 años y su madre también es insomne. Sus declaraciones son todo un recorrido por la peor pesadilla de los que no descansan por la noche: llegó a sentir que el sueño era su enemigo y la sola idea de irse a la cama ya la ponía de los nervios. Y sí, Yennis, aunque la genética tiene su papel en esto de no dormir, porque los patrones de sueño están influidos por ella, como demostró el dr. Daniel Gottlieb, investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard en un estudio que realizó sobre este tema en el que participaron más de 50.000 personas...
Esa impronta genética solo marca unos cuantos minutos de sueño cada noche. Quizá en tu caso, el consumo de comida basura, chocolate y refrescos de cafeína todos los días pesaban más que la genética en tu incapacidad para planchar la oreja. Ya lo dicen los expertos, si te cuesta dormir, prohibidos los excitantes (nicotina incluida) a partir de las seis de la tarde.
¿Tienes un dispositivo móvil iOS o Android? Descarga la APP de Vanitatis en tu teléfono o tablet y no te pierdas nuestros consejos de moda, belleza y estilo de vida. Para iOS, pincha aquí, y para Android, aquí.
Caer en los brazos de Morfeo no es algo sencillo para un gran segmento de la población tanto aquí (según los últimos estudios, uno de cada cinco españoles sufre una alteración del sueño) como en EEUU. El consumo de fármacos contra el insomnio, que no para de crecer a ambos lados del Pacífico, da buena fe de ello. ¿Pero cómo se las apañan nuestras celebrities favoritas para superar estos trastornos y quedarse roques de una vez por todas? Aquí van sus consejos (y los nuestros).