¿Sabes cómo reconocer una dieta milagro? Todas las señales que las delatan
Prometen pérdidas de peso rápidas y sin esfuerzo. Pero no dicen que después de finalizada, o abandonada, se vuelven a ganar todos los kilos. Y tampoco que son un grave atentado contra la salud
Cada año, hay alguna dieta milagro que alcanza la gloria. A veces, porque es la que sigue la celebrity del momento; otras, porque se difunden por la red como una epidemia. Es el caso de la dieta de la Bella Durmiente, que propone dormir más para comer menos. Más que una dieta es una fórmula para adelgazar: no propone un plan de comidas, ni cantidades ni tipos de alimentos concretos. Solo dormir, eso sí, con la eficaz ayuda de sedantes o somníferos. Es una aportación más al disparate de las dietas milagro que reúnen siempre una serie de características comunes a todas ellas. A través de estas claves podemos identificarlas.
1. Tienen un nombre atractivo
La dieta de la Bella Durmiente, la de la piña o la de la cerveza transmiten la idea de que no hay nada malo en ellas, que seguirla no implica sufrimiento, que adelgazar será la tarea más sencilla y placentera del mundo. En realidad, sus nombres no son fruto de la casualidad ni de la popularidad. Están pensados de acuerdo con criterios muy comerciales para vender mejor el concepto.
2. Parece muy fácil seguirlas
Por lo menos al principio porque insisten en que estas dietas no son restrictivas en cuanto a las cantidades. 'Come todo lo que quieras', suele ser uno de sus mantras más utilizados. Y este 'come lo que quieras', que al principio de una dieta resulta muy tranquilizador, se convierte en uno de sus principales problemas a medio plazo. ¿La razón? Piensa en comer piña a todas horas; o proteínas sin descanso; o en sopa desde la mañana hasta por la noche. Cansa, ¿no?
3. Tienen un alimento como protagonista
La dieta de la piña consiste en comer piña a todas horas durante 5 días; la de la sopa, igual, pero con una mezcla de vegetales que se convierte en el alimento básico de los 7 días que dura la dieta. Para justificar este protagonismo y aumentar las expectativas, se suele dotar al alimento estrella de la dieta en cuestión de propiedades extraordinarias barnizadas con un aire místico que prometen una mejora de la salud. Pero la piña no adelgaza en sí misma; lo hace porque en la dieta se restringen muchísimo las calorías.
4. Grandes pérdidas de peso en tiempo récord
Nos dicen lo que queremos oír cuando el tiempo apura y el bikini empieza a ser una realidad: esta dieta te hará perder 10 kilos en un mes; o tres en una semana. Nos viene genial creerlo. Y sí, se pierden, pero también se pierde masa muscular y aumenta el riesgo de sufrir osteoporosis. Las dietas milagro trastornan el funcionamiento metabólico general y siempre traen debajo del brazo un efecto rebote cuya intensidad variará en función de lo restrictiva que haya sido la dieta.
5. Una dieta para todo el mundo
Forma parte del milagro de estas dietas: un patrón de ¿comida? idéntico para todo el mundo, independientemente de la edad, sexo, estado de salud, nivel de actividad física, etc. Es una de las claves de su éxito: si a mí me ha funcionado, lo cuento a todo el mundo porque doy por hecho que a los demás les va a funcionar igual de bien que a mí. Los médicos no se cansan de advertir que el principio 'café para todos' no es extensible a las dietas, incluso cuando estas son equilibradas.
¿Tienes un dispositivo móvil iOS o Android? Descarga la APP de Vanitatis en tu teléfono o tablet y no te pierdas nuestros consejos de moda, belleza y estilo de vida. Para iOS, pincha aquí, y para Android, aquí.
Cada año, hay alguna dieta milagro que alcanza la gloria. A veces, porque es la que sigue la celebrity del momento; otras, porque se difunden por la red como una epidemia. Es el caso de la dieta de la Bella Durmiente, que propone dormir más para comer menos. Más que una dieta es una fórmula para adelgazar: no propone un plan de comidas, ni cantidades ni tipos de alimentos concretos. Solo dormir, eso sí, con la eficaz ayuda de sedantes o somníferos. Es una aportación más al disparate de las dietas milagro que reúnen siempre una serie de características comunes a todas ellas. A través de estas claves podemos identificarlas.