Más allá de los días especiales: guía para usar las ampollas cosméticas a diario
Las que parecían destinadas a ser usadas solo por su efecto flash reclaman su hueco en tu rutina de cuidado. Sus ventas se han disparado y hoy averiguamos el porqué
Seamos sinceras: estos concentrados cosméticos los reservábamos para las ocasiones especiales. Su prometido resultado inmediato las convertía en el bien más preciado para celebraciones varias. Sin embargo, parece que nuestros hábitos de uso respecto a las ampollas han cambiado en los últimos años y ya se presentan como un tratamiento de uso diario. ¿Quieres conocer los pormenores? ¡Sigue leyendo!
Y es que, según la Dra. Aurora Garre, Medical Marketing Manager ISDIN, estos cócteles cosméticos intensivos son tus mejores aliados para potenciar la belleza natural de la piel y retrasar su envejecimiento. Hay infinidad de opciones pero, a grandes rasgos, podemos decir que “las ampollas son la forma farmacéutica idónea para determinados ingredientes que se oxidan fácilmente”, apunta. Quizá el caso más reconocible es el de la vitamina C. No importa en qué concentración se encuentre porque el principal beneficio de este formato monodosis es que permite crear una atmósfera que garantiza la estabilidad de aquellos ingredientes que se ven afectados por el mero contacto con el aire.
El secreto de su éxito
La experta asegura que no en todos los países han tenido el aumento de ventas que estamos viviendo en España. Quizá sea por una mayor preocupación sobre el envejecimiento de la piel en nuestras fronteras donde el sol es una constante (a él se le atribuye el 80% del declive de la dermis). De este modo parece lógica la pasión por las ampollas pues, a grandes rasgos, sus puntos fuertes son: esa alta concentración de ingredientes cosméticos, sus texturas ligeras y lo cómodo que resulta su formato de cristal, que encaja en cualquier rutina, es más seguro e idóneo para llevar de viaje.
¿Qué ampolla elijo?
Ya hay tantas opciones como necesidades diferentes se pueden presentar en tu tez. La doctora afirma que el omnipresente efecto flash de antaño ya no es imprescindible pues, aunque muchas lo tienen, otras tantas se valen de sus altas concentraciones para tratar, cada día (y/o cada noche), las irregularidades del cutis con un efecto antioxidante y vitamina C, estimular las defensas de la piel para repararla, exfoliar para sumar propiedades despigmentantes o promover la producción de colágeno con un efecto peeling.
Manual de uso
La experta reconoce que es mucho más sencillo de lo que parece. Siempre es aconsejable leer el prospecto, pero en términos generales, el momento de aplicarla es tras una exhaustiva limpieza y el uso del contorno de ojos, antes de la crema y el fotoprotector.
Para ello agita la monodosis y golpea suavemente el extremo superior para acumular el cosmético en la zona inferior. Pon el protector y ábrela con cuidado colocando inmediatamente, si tiene, su propio aplicador de silicona. Extiéndela el producto con un suave masaje sobre rostro, cuello y escote, evitando la zona de la mirada, y espera a que se absorba por completo antes de seguir con la rutina de cuidado.
Importante: ten presente las horas que puede estar abierta sin perder sus propiedades (suele ser máximo unas 48 horas).
Nuestra selección de ampollas cosméticas
1. Isdinceutics Day & Night Antioxidante, de Isdin (32,95 €, con 10 u. de día y 10 u. de noche). Se trata de un tratamiento diurno con el concentrado Flavo-C Ultraglicano, que asocia vitamina C (antioxidante) y proteoglicanos (favorecen la producción de ácido hialurónico), y uno nocturno con Flavo-C Melatonin, que repara el daño producido por el estrés oxidativo.
2. Hyaluron-Filler Concentrado, de Eucerin (32,85 €/ 6 u.). Es un sérum antiarrugas con acción intensiva gracias al cóctel de ingredientes con ácido hialurónico y glicina-saponina.
3. Factor G Renew Ampollas Bioestimulantes, de Sesderma (24,95 €). Este tratamiento compuesto por siete monodosis diferentes con nueve factores de crecimiento, tiene efectos antiedad inmediatos (luminosidad) y a largo plazo (hidratantes y reafirmantes).
4. Impurity Stop, de Dra. Schrammek (42 €/ 7 u.). Ayudan a controlar la producción de sebo y afinan los poros con un efecto matificante que, además, potencia la hidratación.
5. Proteoglycan EGF, de Montibello (43,10 €/ 14 u.). Combina factores de crecimiento y proteoglicanos para actuar en conjunto, favorecer la regeneración de la piel y mostrarla rejuvenecida.
6. S.O.S. Detox-Pollution, de Singuladerm (62,47 €/ 4 u. tratamiento de un mes). Se trata de un sérum antioxidante que mejora los mecanismos de defensa natural de la dermis ante la polución y el daño del sol.
7. Ampollas Bicalm+, de Laboratorios Babé (14 €/ 10 u.). Además de mantener la piel hidratada durante 24 horas y de no ser sensibilizar, esta referencia contiene un 21% de ingredientes activos que calman (incluso brotes de rosácea o atopía) con el activo de avena y el extracto de regaliz.
8. Glow Booster Bi-Phase Ampoules, de Babor (94 €/ 14 u.). Las primeras bifásicas (se tienen que agitar para mezclar la fase oleosa y la fluida) tienen efectos inmediatos y aportan nutrición gracias a sus aceites vegetales.
Seamos sinceras: estos concentrados cosméticos los reservábamos para las ocasiones especiales. Su prometido resultado inmediato las convertía en el bien más preciado para celebraciones varias. Sin embargo, parece que nuestros hábitos de uso respecto a las ampollas han cambiado en los últimos años y ya se presentan como un tratamiento de uso diario. ¿Quieres conocer los pormenores? ¡Sigue leyendo!