¿Pelo seco a la vista? Trucos para repararlo y devolverle la hidratación que se merece

Casi con la misma facilidad que sabemos distinguir si nuestra piel es grasa o seca, podemos señalar cómo es nuestro cabello. ¿Se apelmaza en las raíces? ¿Se ensucia en un abrir y cerrar de ojos? Entonces estaremos hablando de un cabello graso. Si por el contrario tu pelo tiene una cierta e incontrolable tendencia a adquirir volumen en climas húmedos y tus puntas se quiebran con solo una mirada, el cabello seco será el que mejor te defina. Justo igual que ocurre con la piel, un cabello seco no se cuida igual que uno graso y tu relación con tu pelo puede cambiar drásticamente si lo tratas de la forma correcta a o no.

Es cierto que tener el pelo seco hace que tu melena se moldee fácilmente y aguante mas tiempo sin lavar, lo que es una suerte. Pero también tiende a apagarse con facilidad, se encrespa y necesita dosis extra de nutrición para reparar el daño y prevenir la rotura de las puntas o la falta de movimiento. Aunque Olivia Vinten nos ha reconciliado con el cabello rizado y frizz, la sequedad no es una cualidad que deseemos en nuestra melena y convivir con ella para minimizar al máximo los daños está en nuestras manos. Bueno, más bien está en el correcto uso de champú, mascarilla y en mantenerse alejado de las malas inncluencias capilares.

Un cabello seco es fácil de identificar no solo al tacto -similar al de la paja y que aumenta su fragilidad en las puntas-, sino también a simple vista. La falta de brillo y la tendencia al encrespamiento son consecuencias directas de esta falta de hidratación en el pelo. Aunque cabellos como los rizados son por naturaleza secos, los productos que utilicemos, los factores medioambientales y el calor contribuyen en gran medida al aumento de la sequedad.

Dime con qué frecuencia te lavas el pelo y...

Mantener una correcta higiene capilar es vital para que el cuero cabelludo respire y el pelo esté limpio, brillante y con movimiento pero, como todo en la vida, abusar es contraproducente, más de lo que imaginas. Si lavamos el cabello en exceso, como por ejemplo todos los días, terminará por debilitarse. Esto se debe a que el champú seca los aceites lubricantes habituales presentes en el cuero cabelludo.

El calor es un 'false friend'

A diario exponemos a nuestro cabello a fuentes de calor como secadores, planchas, tenacillas y demás moldeadores. A largo plazo, estas herramientas secan demasiado el cabello. ¿Nunca te has preguntado por qué tus puntas están abiertas si lo cuidas con esmero? Si la temperatura de dichas herramientas es demasiado elevada, dañarán el cabello. La solución pasa, por un lado, por regular la temperatura de la plancha para que moldee el cabello sin dañarlo, lo recomendable es que no supere los 185ºC.

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Pero tampoco nos olvidamos del paso previo, preparar el cabello. Los esprays protectores del calor y los aceites nutritivos protegen el cabello del paso de los moldeadores y los hidratan. Por supuesto, además de tomar estas dos medidas, no abusar de las herramientas de calor mejorará la salud del cabello.

Los factores medioambientales no ayudan

Además del calor que aplican los moldeadores sobre el pelo, "la luz del sol directa hace que tu pelo pierda color, flexibilidad y brillo", aseguran los expertos de Garnier. Las estaciones en las que el sol incide de una forma más directa sobre nosotros son en las que el cabello más se estropea. Si a esto le sumamos el cloro o la sal a los que exponemos el cabello en la temporada estival, el daño es mayor. Otro factor medioambiental como es la contaminación también contribuye al encrespamiento y falta de hidratación del cabello.

Por suerte, existen cosméticos protectores de la contaminación que podemos pulverizar sobre el cabello. También es aconsejable aplicar una vez por semana un champú exfoliante para desincrustar todas las partículas de polución del cuero cabelludo y favorecer su oxigenación.

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Los cosméticos tienen mucho que decir

Seguir una rutina equilibrada es esencial. Para ello, si tu cabello es seco, nunca deben faltar los champús hidratantes que incluyan aceites como del de karité, abisinia, argán, coco o aguacate, capaces de aportar hidratación brillo al cabello pero sin renunciar a la limpieza y al brillo. "Los champús que contienen aceites son especialmente efectivos a la hora de hidratar y tratar el pelo encrespado o seco; debes buscar un champú que no tenga sulfatos ni alcohol y que contenga aceites nutritivos", señalan desde Garnier. Los sulfatos son los encargados de absorber la grasa del cuero cabelludo, de ahí que los cabellos secos no necesiten eliminarlos.

Shampure de Aveda, pack 45,99€ en Sephora, es una reinvención de la fórmula original de su primer champú, uno de los iconos de la firma de cuidado capilar. Desde que lo pruebes se convertirá en tu aliado para darle vitalidad a tu pelo y que vuelva a estar brillante como la seda. ¿Su secreto? En su nueva composición han cambiado las siliconas poraceite de abisinia. No aporta nada de peso a la melena, así conseguimos que no se pierda su volumen. Y usar el champú es una delicia, damos fe. Su aroma compuesto por 25 esencias de flores y plantas engancha.

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Champú-crema con aceite de abisinia de Klorane, c.p.v.. Si tu cabello, además de seco, tiende a encresparse, el aceite de abisinia es solo uno de los aceites naturales de su fórmula que reestructuran y devuelven la flexibilidad al cabello.

Champú Karité Hydra de René Furterer, 17€ en Sephora. Para cubrir todas las necesidades hidratantes del cabello seco, cuenta con el ultranutritivo aceite de karité que aporta también un plus de hidratación pero sin apelmazar.

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Champú Classic de Rahua, 35,95€ en Sephora. Su popularidad a nivel internacional ha crecido como la espuma y su nombre, Amazon Beauty, en referencia a las amazonas, no al gigante de venta, tiene parte de la culpa. Además de reparar las puntas, también actúa sobre el cuero cabelludo hidratándolo y fortaleciéndolo. Aporta suavidad y brillo en parte gracias al aceite de Rahua que le da nombre y es rico en aceite omega 9 y al resto de sus componentes de origen natural.

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Aceite de abisiana, aliado secreto

Si no conoces esta maravilla de ingrediente, debes saber que es completamente natural y que su acción imita el rendimiento y la sensación posterior de las siliconas naturales. Es decir, la presencia del aceite de abisinia en el producto ayuda a limpiar el cabello suavemente, nutrirlo en profundidad, darle el brillo que necesitas y dejarlo mucho más suave, justo lo que necesitan las melenas secas y quebradizas. Este ingrediente proviene de la Crambe abyssinica, planta sudafricana cultivada en zonas del Mediterráneo de cuyas semillas se extrae el reconocido aceite que hizo famoso la reina de Saba, que hacía uso de este elixir por su textura ligera y sus cualidades cosméticas, tanto para la piel como para el cabello, ya que es rico en complejo de omega 6 y 9, y tiene acción reconstructiva que revitaliza hasta la última capa de la fibra capilar.

Acondicionadores, no te olvides de ellos

Muchas personas se suelen saltar el paso del acondicionador, inmediatamente después del champú y antes de la mascarilla. Sin embargo, su finalidad, además de desenredar, es mejorar la hidratación del cabello. Escúrrelo después de aclarar el champú, desenreda y aplica el acondicionador de medios a puntas. Deja un par de minutos y aclara.

Moroccanoil Acondicionador activador de rizos, c.p.v. Sí, los cabellos rizados siempre son secos, pero eso no quiere decir que el rizo tenga que estar perfectamente definido. Precisamente el encrespamiento es uno de los frentes habituales con los que combatir a diario a la hora de dar forma a los rizos. En esta ocasión, el aceite de argán se encarga de desenredar, hidratar y definir el rizo, manteniendo a raya el encrespamiento, pero sin dejar un efecto apelmazado.

Acondicionador con aceite de amla reparador en profundidad de IGK, 29,99€ en Sephora. Especialmente recomendado para los cabellos teñidos, aquellos que más sufren y que padecen sequedad, consigue hidratar el cuero cabelludo revitalizándolo. Sus componentes penetran en la fibra debido a su complejo de proteínas vegetales patentado que fortalece el interior del cabello

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Mascarillas, condensar los tratamientos

Mientras el acondicionador suele pasar desapercibido, la mascarilla tiene un puesto de oro en nuestros cuidados capilares. Es el paso en el que se concentra toda la hidratación que nuestro cabello necesita. Para multiplicar sus beneficios, tras aclarar el acondicionador, seca el cabello con una toalla hasta que quede húmedo pero no gotee. Puedes desenredarlo con un peine de púas gruesas o o directamente con los dedos. A continuación, aplícalo de medios a puntas y recoge el cabello en un moño para poder seguir realizando otras actividades. A los 5-10 minutos aclara con agua fría para sellar la cutícula y potenciar el brillo.

Mascarilla regeneradora de aceite de higo chumbo de Christopher Robin, 52,99€ en Sephora. Básicamente se trata de la perfecta fusión de aceites vegetales con propiedades regenerantes y antioxidantes que protegen y tratan el cabello dañado. A diferencia de otras mascarillas, se debe aplicar a través de un masaje desde la raíz hasta las puntas y con una pequeña cantidad de producto ya que su fórmula cunde mucho.

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Fructis Hair Food Mascarilla Hair Food 3 en 1 Banana Nutritiva de Garnier (4,90€) es como dar de comer a tu cabello con un intenso baño de banana para prevenir el daño que se produce como consecuencia del pelo seco. Enriquecido con extracto de plátano de Costa Rica, hidrata y aporta brillo y se puede utilizar a modo de acondicionador (con aclarado), como mascarilla o para un retoque final en las puntas sobre el cabello seco o mojado.

Tratamientos intensivos, que no falten

Una recomendación en la que todos los peluqueros del mundo siempre coinciden es en aplicar de forma regular tratamientos específicos. Igual que un par de veces aplicamos una mascarilla sobre nuestro rostro, los sérums capilares o los aceites pueden mejorar notablemente la salud de nuestro cabello hidratándolo, aumentando su luminosidad o incluso actuando como protectores térmicos.

Huile Prodigieuse de Nuxe, a partir de 29,99€ en Sephora. Un aceite salvavidas, perfecto para hidratar y embellecer piel, cabello y rostro dejando un agradable aroma pero sin ningún tipo de acabado graso.

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Shu Uemura Essence Absolu Multi-Purpose, 32,99€ en Amazon. A diferencia de otros esprays, se pulveriza con la difusión perfecta para cubrir amplios mechones de una pasada, creando una película que protege del calor, aporta brillo y controla el encrespamiento. Además, deposita la hidratación necesaria para evitar roturas, en parte gracias al aceite de camelia. Se puede utilizar tanto sobre el cabello seco como mojado y no apelmaza.

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