El secador de Revlon que está revolucionando Amazon
Si casi 5.000 personas le han dado 5 estrellas a este secador… será por algo (y no se equivocan)
Hay un secador de Revlon del que mi madre me habló maravillas y que yo, escéptica, no hice ni caso. No es que mi madre no sea una mujer sabia, que lo es, simplemente es que no tenemos ni de lejos el mismo tipo de pelo. Solamente compartimos el amor por el pelo liso teniéndolo ambas rizado. Y hasta ahí llegaron sus genes.
Su pelo es grueso, fuerte y tiene mucha cantidad, yo por el contrario tengo el pelo mucho más fino y débil y, aunque no tengo poco pelo, no rompo los prendedores cuando me hago una coleta, cosa que sí le ha pasado a ella toda la vida.
Así que tras una primera muy mala experiencia con otro secador que me recomendó, no hice mucho caso de esta nueva adquisición que había hecho a través de Amazon porque, bueno, así somos las hijas a veces.
Pasaron unos meses y mi secador se estropeó (mentira, simplemente quería cambiarlo…) y buscando en
Llegados a este punto os debo avisar de que las reviews suelo buscarlas en Amazon UK y US porque, debido al volumen de venta, hay una mayor muestra de opiniones. Si bien esto está cambiando cada vez más en el mercado español, aún nos llevan algo de ventaja y por eso, y porque gastarme más de 60 euros en un secador lo requería, suelo leerlo todo todo TO-DO.
Bueno, pues ahí estaba yo viendo fotos en Amazon US del resultado del pelo tras usar esta supuesta maravilla, haciendo scroll entre sus casi siete mil comentarios (74% de ellos de 5 estrellas) cuando pensé: “¿No será este el secador que me dijo mi madre?”
Así que la llamé por teléfono y le pregunté la marca del secador: “Yo qué sé, hija, ven y lo miras”, y me fui a casa de mis padres a comprobar en mis propias carnes (y pelo) si eran ciertas las bondades de las que hablaba Amazon. Y lo eran.
Pero también tiene contras.
¿Merece la pena este secador?
Para empezar, admitiré que me quedé alucinada de que mi madre hubiese descubierto esta joya antes que yo, pero así son las madres. Te sorprenden cuando menos te lo esperas. Superado el estupor, me puse con el secador.
Calienta mucho MUCHO el pelo, por lo que no recomendaría nunca su uso sin habernos aplicado un protector térmico y, por otro lado, pesa bastante para ser un secador. Y hasta aquí los contras.
Sus ventajas superan con creces estos dos inconvenientes. Si divides el pelo en franjas pequeñas, al necesitar menos tiempo de secador reduces el calor al que expones el cabello, por lo que solucionas el primer problema y gracias a su cepillo, que permite un modelaje más sencillo, en lo que antes tardabas 40 minutos ahora tardas 20, por lo que también se reduce el tiempo que expones tu pelo al calor.
Además, no deja el pelo lacio y pegado a la cara, como pasaba con otros secadores ‘alisadores’. Con este aparato puedes moldear el pelo como necesites, aunque es verdad que creo que para personas con el pelo corto no debe funcionar muy bien debido al grosor del cepillo.
En conclusión, me gustó mucho cómo me dejó el pelo y la facilidad para peinarlo ahorrándome la fase de las planchas, lo cual agradezco (y mi cabello más). Pero no iba a ser todo maravilloso, lo siento, a la hora de ponerme a escribir este artículo no he encontrado el producto en
Hay un secador de Revlon del que mi madre me habló maravillas y que yo, escéptica, no hice ni caso. No es que mi madre no sea una mujer sabia, que lo es, simplemente es que no tenemos ni de lejos el mismo tipo de pelo. Solamente compartimos el amor por el pelo liso teniéndolo ambas rizado. Y hasta ahí llegaron sus genes.
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