Eyeliners fáciles y efectivos con los que salvar un maquillaje rápido
Líneas imprecisas y colores llamativos… No hay normas a la hora de hablar del delineado de los ojos. Quédate con estos tips para convertir el eyeliner en tu herramienta multiusos
Cuando tienes la hora pegada y no te da tiempo a maquillarte, los grandes perjudicados suelen ser los ojos. “Máscara de pestañas y listo”, suele ser una frase muy socorrida para justificar la falta de minutos y destreza con el eyeliner. Sin embargo, la solución puede estar más cerca de lo que imaginas. El delineador es tu amigo, no tu enemigo, y puedes tardar, literalmente, 30 segundos en conseguir un maquillaje mono y favorecedor utilizando solo un lápiz de ojos o un eyeliner.
Tan solo existen algunas normas básicas que tus ojitos agradecerán: asegúrate de que tus herramientas estén en buen estado. Un lápiz de ojos sin punta tiene las mismas probabilidades de delinear que una barra de labios. Por supuesto, si en lugar de un lápiz de ojos, te has decantado por un eyeliner, es imprescindible que no esté seco ni tenga grumitos. Cada vez que lo abres o destapas, entra en contacto con el oxígeno y comienza a secarse.
El negro, ese gran salvavidas
Ahora que está todo aclarado, toda elegir el tipo de delineado que quieres conseguir. A no ser que tengas el Signature de Chanel (43€) y lo manejes con precisión de neurocirujano, los delineados ultrafinos necesitan tiempo y paciencia. Pero existe un plan B.
Traza tu delineado habitual, comenzando desde la mitad del párpado y sigue hasta el final pero sin rematar. Con ayuda de un pincel biselado, un bastoncillo muy fino o incluso la propia uña, colócate en el final del delineado y extiéndelo como si quisieras que llegara a tocar el final de la ceja. Si utilizas un lápiz cremoso o tipo khol, te será más fácil moverlo. Si has optado por un eyeliner, trabaja rápido porque su secado es casi instantáneo.
They're Real Push Up Liner de Benefit (28,99€) es uno de los delineadores tipo gel más fáciles de utilizar. Dependiendo de cómo lo coloques, puedes conseguir un tipo de trazo u otro.
Natural y ahumado
Alternativas salvavidas son las que se consiguen al incluir la palabra ‘difuminar’ en nuestro maquillaje rápido. Si quieres aportar esa oscuridad en la línea de las pestañas con la que el ojo queda mucho más dramático, puedes lograrlo delineando con poca precisión y 'emborronando' la línea con un pincel no demasiado grueso.
El pincel tipo lápiz de Sigma (20,60€) es perfecto para aplicar color en zonas muy concretas o para difuminar áreas pequeñas o a ras de pestañas.
Juegas a borrar la línea y oscurecer el nacimiento de las pestañas pero sin que se vea el trazo. Uno de los efectos secundarios de este delineado ahumado es que al abrir la mirada y llenarla de luz, actúa como una varita antiedad.
El delineador, sea cual sea su formato, en color marrón es otro aliado para un maquillaje 10 y muy natural. Aunque no aporta la misma oscuridad a la línea de las pestañas, crea el efecto óptico de un ojo más rasgado pero su trazo es casi imperceptible. Puedes probar la técnica de difuminarlo o puedes pasar el eyeliner para crear un delineado más fino y preciso. El acabado del trazo no es lo importante, la magia está en que la línea se intuya sin que se vea.
Súmale intensidad
Aunque el tiempo vaya en tu contra, un lápiz tipo khol te puede permitir delinear el párpado superior, el inferior y la línea del agua para lograr un completo blackout. En este tipo de maquillajes, tanto el inicio (lagrimal) como el final (rabillo) son los encargados de crear esa sensación de look muy elaborado. Para conseguir ese acabado pulido, el lápiz cremoso es maleable y permite borrar o arrastrar el delineado para conseguir darle la forma deseada.
El corrector puede ser otro gran aliado para conseguir un look más pulido, pero si quieres ahorrar tiempo. Puedes incluso utilizar el truco del celofán o una tirita para crear la línea recta perfecta. Pega el adhesivo teniendo en cuenta la dirección que deseas en tu delineado, pinta sin miedo -incluso puedes salirte- y quita el celo. Resultado 20.
Marc Jacobs Beauty Highlighter (25€) consigue un color muy intenso y se trata de una fórmula cremosa muy fácil de trabajar. Tienes tantos colores y acabados como desees.
Tip extra: siempre que vayas a delinear los ojos pero busques un acabado muy fino, imagina que lo que quieres es que el rabillo del delineado sea tan fino como una pestaña, para perderse entre ellas.
Glitter, esa cosa de profesionales
Si tienes poco tiempo pero deseas iluminar la mirada con esa nueva sombra de ojos, el delineador también puede pintar por encima de la sombra, pero siempre lograrás un efecto más duradero si lo haces con un eyeliner líquido. En este tipo de maquillajes no hay margen de error y te costará conseguir el efecto difuminado. El plan B es delinear la línea de agua de las pestañas. Las primeras veces te resultará algo complicado, con el tiempo lo harás en un abrir y cerrar de ojos. Literal.
Si ninguno de estos tipos soluciona tu problema de tiempo, varias capas de máscara de pestañas pueden ayudarte a conseguir ese dramatismo, siempre y cuando sepas cómo utilizarla para conseguir el acabado que buscas. El enésimo truco, como siempre, estará en TikTok, donde desde una horquilla hasta el hilo dental pueden delinear.
Cuando tienes la hora pegada y no te da tiempo a maquillarte, los grandes perjudicados suelen ser los ojos. “Máscara de pestañas y listo”, suele ser una frase muy socorrida para justificar la falta de minutos y destreza con el eyeliner. Sin embargo, la solución puede estar más cerca de lo que imaginas. El delineador es tu amigo, no tu enemigo, y puedes tardar, literalmente, 30 segundos en conseguir un maquillaje mono y favorecedor utilizando solo un lápiz de ojos o un eyeliner.