Intencionadas y cargadas de mensaje: las canas de Letizia, a examen

Cuando en julio de 2020 el confinamiento llegó a su fin, una de las consecuencias más visibles tras los meses de encierro fueron las cabelleras repletas de canas. Los peluqueros nos confirmaron que la tendencia se extendía entre sus clientas, y la reina Letizia también parecía verse afectada por la larga espera sin peluquero. Pero varios meses después, no solo las canas de la Reina no han desaparecido, sino que cada vez son más visibles.

Preguntamos a expertos en comunicación institucional, estilistas y cosmetólogos para analizar qué hay detrás de las canas de la esposa de Felipe VI y cómo puede evolucionar su imagen si continúa con este look tan natural.

La falta de tiempo o interés quedan fuera del tablero en este caso, tal y como explica Toni Aira, profesor de Comunicación Institucional de la UPF Barcelona School of Management, que encuentra hasta tres mensajes ocultos en el canoso cabello de la monarca. Un líder institucional debe proyectar con su imagen una serie de valores que a lo mejor no puede expresar con sus breves intervenciones habladas. Las canas de Letizia, según el experto, más allá de ser una tendencia cada vez más extendida, responden a un intencionado mensaje de identificación, conciencia medioambiental y madurez.

• Identificación. “Es verdad que el hecho de no teñirse y no ocultar las canas es una tendencia al alza, cada vez más normalizada en nuestra sociedad. Esto nos puede dar una cierta idea de identificación, que haya gente que se identifique más con una persona que, como ella, no se tiñe”. Los estilistas también coinciden en esta idea: “No es casualidad que siga luciendo sus canas como lo están haciendo otras muchas mujeres en nuestro país, sino que es un pequeño gesto que rompe moldes y da espacio a otros tipos de belleza. Parece intencionado y muy revelador que lo haga ella, una figura pública con una gran relevancia. Es algo que nos iguala a los hombres, ya que en ellos nunca ha sido un problema, más bien lo contrario", apunta la estilista Raquel Saiz, de Salón Blue de Torrelavega.

• Conciencia medioambiental. Este revelador mensaje se debe, según Toni Aira, a un trabajo que el rey Felipe VI ha estado desarrollando desde que era Príncipe de Asturias y que reside en dar importancia al medioambiente: “La idea de que los tintes de pelo son un elemento artificial y que puede tener al final un retorno negativo en esta clave ecológica también suma. Habrá gente que la verá más natural, menos artificial, que verá que utiliza menos elementos nocivos para la naturaleza”.
• Madurez. Aunque tras más de 6 años de reinado, han demostrado su solidez, según el experto en comunicación institucional, tanto el cabello y la barba siempre canos de Felipe VI como la melena de Letizia ahora salpicada de canas vendrían a reforzar la idea de madurez. “Las canas transmiten esa idea de forma automática”, explica. “Esa barba cada vez más blanca, acompañado de Letizia y de esas canas que ahora no oculta, pretenden potenciar esa idea de dos soberanos que se van consolidando en su cargo, no dos jóvenes aspirantes o potenciales sustitutos en sus primeros años de reinado, sino dos reyes que pretenden transmitir por tierra, mar y aire y también a través de su imagen que están consolidados para ello”, concluye el profesor Toni Aira.

¿Y qué opina un experto en el cabello?

Tan importante como el efecto que genera la ausencia de coloración en el cabello de la Reina es saber qué puede haber acelerado la aparición de las canas en su melena. ¿Puede ser el estrés por la situación generada por el coronavirus una causa? "El estrés acelera la aparición de canas, al interferir en el funcionamiento de las células madre que regeneran el pigmento del cabello", aseguran desde Salón Blue, donde también nos recuerdan que Letizia no es la única mujer de la realeza en mostrar sus canas sin problemas. Recordemos que hace unos meses Carolina de Mónaco aparecía en un acto público con su melena cana. “Las monarquías están en un proceso de modernización y esto podría ser una muestra de ello", puntualizan desde el salón cántabro.

Sin embargo, el equipo de estilistas de Tacha matiza que el caso de la Reina no es demasiado llamativo. “La reina Letizia tiene pocas canas para su edad”, dicen. Pero ahí no queda la cosa, esa sensación de dejadez o pelo encrespado también tendría explicación. “La aparición de pocas canas en la melena provoca una ruptura de color y da una sensación de estar distribuido de forma desorganizada”, detallan desde el salón madrileño.

Una dato curioso y que ha contribuido a que las canas de la Reina llamen más la atención, además del notable contraste con su melena castaño oscuro, es la calidad y comportamiento de las canas. “Las canas de Letizia parecen las típicas canas rebeldes y secas a las que, como hemos dicho, les falta hidratación y pueden tener tendencia grasa”, señala Paul Tudor, director de David Künzle Fuencarral. Esto explicaría su constante encrespamiento.

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La solución ante este cabello seco que sale disparado en busca de hidratación reside en el cuidado diario. “Conviene además mantenerlo en casa con productos para disciplinarlo si se encrespa, ya que muchas canas pueden nacer con más vigor o tener una estructura más recia”, aconseja Laura Sánchez, responsable del salón Menta Beauty Place.

¿Y si este fuera el comienzo hacia una melena blanca?

Ni siquiera la reina Sofía ha dejado que las canas se apoderen al completo de su cabello, pero iconos como la mítica Miranda Priestly o actrices como Judy Dench, Helen Mirren o Tilda Swinton han optado por dejar de teñirse y llevan el cabello completamente blanco. ¿Es una opción factible? Helena Reyes, CEO de la firma capilar My Organics, nos comenta que no todo el mundo puede llevar el cabello blanco, ya que, además de acompañarlo de un corte de pelo adecuado, requiere una serie de cuidados. “Para dejarlas al descubierto debes tener un 85% del cabello con canas y que tu cuero cabelludo esté cuidado y con brillo”, subraya, además de recordar que el cabello blanco debe ser matizado con productos específicos para que la cana no amarillee, aparte de protegerse del sol.

La duda de si estamos o no ante el inicio de lo que podría ser un total look blanco en unos años parece quedar resuelta gracias al veredicto de los estilistas de Tacha, que apuestan más por un retraso de la dependencia de la coloración que se crea cuando las canas comienzan a ser difíciles de manejar. “Colorear esos mechones canosos con su color natural cada 4 o 5 meses puede ser una solución más cómoda”, proponen.

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