Las nuevas y sorprendentes referencias corporales para optimizar tu silueta

Las consecuencias de la pandemia son muchas. Además de las obvias, sus efectos negativos también han alcanzado a las esferas relacionadas con el autocuidado y la belleza. Al odiado maskné producido por llevar la necesaria mascarilla, se le ha sumado un envejecimiento acelerado de las manos por culpa del exceso de uso de los geles hidroalcohólicos, los problemas para conciliar el sueño, los cambios en la alimentación, la adopción de un ritmo de vida más sedentario…

¿El resultado? Una encuesta publicada en la revista 'Nutrients' reveló que el 38% de los españoles experimentó un aumento de peso durante el confinamiento, además el 44% no realizó nada de ejercicio físico... La media de kilos que nos hemos agenciado, según un estudio realizado por Ipsos, es de 5,7.

La doctora Pilar Riobó, jefa asociada de Endocrinología y Nutrición, en colaboración con Arkopharma Laboratorios, nos recuerda que lo ideal es mantener una alimentación saludable y equilibrada. Apuesta por la dieta mediterránea (implica una considerable cantidad de frutas y verduras), distribuida de forma equilibrada en cinco comidas diarias cargadas de nutrientes. Además de mucha hidratación y, muy importante, insiste en la importancia de desafiar a la pereza con ejercicio cada día.

Pero, mientras llevas a cabo estas pautas de autocuidado, el buen tiempo asoma a la vuelta de la esquina y mentalmente reclamas una ayudita extra para optimizar la silueta. El objetivo es mejorar el aspecto de la celulitis (asumimos que ahí está, pero que podemos minimizarla), aportar un extra de firmeza, aligerar las piernas con referencias drenantes... Y sin aburrirte. Descubre las sorprendentes opciones que tienes al alcance de tu mano.

El milagroso barro

Los cuidados con arcillas no son algo nuevo. Su contenido en minerales les ha convertido en grandes aliados beauty y, seguramente, forman parte de la lista de ingredientes de alguna de tus mascarillas purificantes para el rostro.

Hoy en El Corte Inglés

Ahora llegan en formato corporal con el nombre de Anticelulítico Máscara de Barro Corporal, de Somatoline (49,50 euros). Se trata de un tratamiento que combina extracto de diente de león (depura), arcilla negra (suaviza), escina (destaca por acción drenante) y extracto de arándano (desinflama y activa la microcirculación). Se utiliza siguiendo las pautas básicas de cualquier mascarilla: se aplica una fina capa sobre la zona a tratar con gestos circulares y lo dejas actuar durante 20-30 minutos (notarás que se seca), antes de aclararlo con agua.
¿Lo mejor? Puedes hacer un plan de choque, con 2-3 sesiones a la semana, para ver cómo se difumina la celulitis en tiempo récord.

Aliados en patch

Hay que reconocer que los tratamientos en parche nos encandilan. Será por su sencillo funcionamiento... Te los pones y te olvidas de ellos. Sienta bien pensar que están haciendo algo por tu piel de naranja mientras tú sigues con tu rutina.

Los Active Patch Body Concept, de Bioline Jatò (60 euros, 28 parches), consiguen resultados a corto plazo, en zonas muy concretas del cuerpo, gracias a su cóctel de ingredientes estimulantes, drenantes y reafirmantes. Extractos de cafeína, carnitina o jengibre se unen a los de fucus, castaño de Indias, hiedra y té verde en un tejido que favorece una absorción sostenida durante 24 horas.

Hoy en El Corte Inglés

Otra opción es la que propone la firma Valy, con sus Ion Patch Reducer (39,95 euros, 28 parches en Amazon). Se basan en la iontoforesis, una técnica que se alía con una corriente de baja intensidad (que se transmite por iones incluidos en las sustancias activas) con la misión de llegar a capas más profundas. El resultado es que ayudan a movilizar las grasas, mejoran la circulación y evitan la acumulación de líquidos mientras estimulan la producción de colágeno para optimizar la elasticidad de la piel.

Lánzate al mousse

No solo por los ingredientes triunfan las fórmulas cosméticas, las texturas tienen mucho que ver en el éxito de que seas constante al utilizarlas. Si no eres muy fan de los acabados untuosos, Crackling Body Mousse, de Montibello (29,90 euros), es para ti. Consiste en una espuma, con efecto crujiente, inspirada en los tratamientos profesionales que contiene un booster específico, reductor y anticelulítico, para trabajar las zonas más complicadas. Al aplicarla notarás un efecto ‘peta-zetas’ en la piel que acelera la penetración de los activos. Sin duda, te sorprenderá.

El aceite nunca falla

Las opciones en aceite tienen sus ventajas: presumen de altas concentraciones de vitaminas y ácidos grasos insaturados, se pueden aplicar sobre la dermis húmeda y seca, penetran fácilmente, aportan una hidratación más intensa… Por lo que los anticelulíticos oleosos resultan tremendamente atractivos.

Firming Yuzu Body Oil, de Alma Secret (22,50 euros), nutre, repara, reafirma y actúa contra las estrías y los adipocitos a través de una composición de 18 óleos vegetales naturales y orgánicos (como el de sésamo, macadamia, argán, uva, espino amarillo…) que se asocian con un complejo de algas. ¿El plus? Su fragancia, cítrica y delicada, ostenta el poder de ponerte de buen humor.

Una alternativa oleosa que hidrata, tonifica, mejora la textura y trabaja sobre la celulitis es L’Huile, de Scens (51,45 euros). En él, los aceites esenciales de pomelo y cedro favorecen la circulación y estimulan al metabolismo con la misión de minimizar el efecto acolchado de las zonas más complicadas como caderas, muslos, abdomen o glúteos. Los oils de baobab y chía, incluidos en la formulación, se encargan de iluminar la superficie.

El gadget

Sí, no es una fórmula de uso tópico, pero si la idea es ofrecer alternativas contra la celulitis que te enganchen, no podemos obviar esta categoría.

Hoy en El Corte Inglés

Rowenta Body Massager, de Rowenta (159,99 euros, en Amazon) no es el primero, pero sí el más nuevo. Sus predecesores tienen una misión similar, de realizar un intenso masaje que logra suavizar la piel de naranja más incrustada, ganar un plus de firmeza y trabajar sobre la pesadez de las piernas cansadas. Tienes que ser constante pero los efectos los notarás muy pronto. Y es lo más parecido a tener un salón profesional en casa.